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¿A quién no le ha pasado, cuando se ha encontrado con un conocido que hace tiempo que no ve, que le diga eso de "¡Pero qué cambiado estás!"? Aunque la sorpresa, según como se diga, puede parecer que nos envía un mensaje de "vaya, te ha pasado un tren por encima" o uno de genuina admiración por lo bien que, pese a todo, nos sentó 2020, no deja de resultar curioso que, a cualquier edad, parezca que nunca nos deja de cambiar la cara, lo cual sería un reto de lo más gordo para tecnologías como el reconocimiento facial.
A no ser que seas un Mr. Potato, tenemos ciertas garantías de que los elementos de tu cara se mantendrán más o menos en el mismo lugar durante toda tu vida, así que el asunto del orden y las proporciones tiene cierta tendencia a prevalecer y, por lo tanto, a facilitar el trabajo de reconocimiento facial, tan necesario, por ejemplo, en el mundo de la ciberseguridad.
No obstante, la edad y otros factores como la alimentación, el medio ambiente, enfermedades y procedimientos médicos, sí que pueden hacer que las facciones se vean alteradas, ya sea de forma gradual, por ejemplo, con el envejecimiento, o de forma radical, si decides que te vas a gastar la herencia familiar en cirugías estéticas.
Para los ingenieros que se encargan del estudio del reconocimiento facial, ser capaces de estimar cómo cambia la composición de la piel a lo largo de los años sirve para proyectar el envejecimiento de una persona.
Esto facilita mucho las cosas porque sea cual sea el estilo de vida y las decisiones de cada uno, todos vamos a envejecer, así que anticipar esto soluciona de lleno una constante.
Individualmente, cuando se tiene acceso a la persona a la que se quiere analizar, la realización de un estudio de la piel para poder trasladarlo a la tecnología resulta muy útil. La preocupación estética se echa a un lado y el foco se dirige a la inteligencia artificial y su capacidad para reconocer cambios en la fisonomía de un mismo individuo.
Porque sí, el día que podamos reconocerte con absoluta precisión en una foto tuya de cuando tenías un año, en otra a tus catorce y en una a los cincuenta, habremos clavado eso del reconocimiento facial que tanto promete en materia de ciberseguridad.
Además de envejecer, las personas van cambiando con la edad, sobre todo su forma física. Por mucho que hagas deporte y lleves una alimentación saludable, el envejecimiento se puede manifestar en una ganancia de peso. O, por lo contrario, alguna alteración hormonal o procedimiento médico, como el balón gástrico, te pueden hacer perder unos cuantos kilos.
Toda una aventura para el sistema de reconocimiento facial que tenga que seguir tus rasgos década tras década.
Por eso, numerosas empresas tecnológicas están invirtiendo millones de euros para tener el mejor reconocedor facial, que se adapte a los cambios de las personas y a cualquier circunstancia de cada individuo. Parece una tarea complicada, ¿verdad?
Aunque parezca increíble, sí, un reconocedor facial es capaz de reconocer a las personas a lo largo de toda su vida. Y dicha precisión va en aumento para sortear los cambios de apariencia más drásticos.
Depende mucho también del modelo de reconocedor facial. Por ejemplo, cualquiera de los teléfonos móviles lowcost que se venden en la actualidad, es probable que te denieguen el acceso si te cambia la cara por cualquier circunstancia en un periodo de tiempo relativamente corto, porque no sea capaz de reconocerte si, por ejemplo, te has operado la nariz o te has pasado con otro tipo de retoques.
Aunque, si nos centramos en reconocedores faciales de alta calidad y que se utilizan para entornos donde se necesita cierta seguridad, esto no sucederá así. Este tipo de dispositivos satisfacen la detección ante el crecimiento de la cara, la nariz y muchos puntos más determinantes de nuestro cuerpo.
¿Cuándo deja de cambiar la cara? ¿Cómo crece la cara? Debes saber que la cara crece mucho más despacio que la cabeza y termina de crecer alrededor de los 20 años que, curiosamente, es la edad a la que empieza a desarrollarse la muela del juicio. Adaptable por definición, el reconocimiento entiende cuando deja de cambiar la cara de las personas, ya que se estabilizan la anchura y altura del rostro. Sabiendo que la cara deja de crecer sobre esta edad, los algoritmos de reconocimiento facial determinan que, a partir de la misma, la anchura del rostro no va a modificarse mucho más.
Estos datos pueden ser de mucha utilidad para los investigadores, ya que sus algoritmos se pueden referenciar y centrar en otros datos morfológicos para el desarrollo de las propias herramientas.
Todos conocemos el mito de que cuando mentimos nos crece un poquito la nariz. Y aunque no es algo que suceda cuando mientes, sí es cierto que existe un proceso natural por el cual te sigue creciendo la nariz... toda tu vida.
La nariz, que crece hacia abajo a causa de la gravedad y la ruptura del colágeno, puede llegar a crecer hasta los 17 o 18 años de edad y seguir creciendo el resto de tu vida. Este es otro punto que los desarrolladores del reconocimiento facial tienen que tener en cuenta.
¿Y si engordas o adelgazas la piel facial? Esto tampoco es una preocupación, pues existen numerosas técnicas, como la medición de la textura de la piel, que se centran en la biometría facial y cuyas referencias son rasgos como la barbilla, el contorno de los ojos o los pómulos, que son menos cambiantes que los mencionados anteriormente.
Complejo y abstracto, el reconocimiento de la cara siempre es un reto. La imagen que se captura desde la cámara tiene que ser tratada y analizada sin saltarse ningún paso para garantizar que el perfil de la persona en cuestión es el correcto.
En primer lugar, se tiene que obtener una imagen con la cara de la persona, siempre intentando que la resolución sea la mejor para tener los rasgos físicos de mejor calidad.
Posteriormente, tiene lugar el paso que se conoce tradicionalmente como análisis facial, en el que se localizan los componentes a estudiar. Mediante algoritmos geométricos se normaliza el fotograma con referencias como la pose, el tamaño... Este paso es un poco complejo, porque depende totalmente de la captura de la foto, la iluminación, la distancia entre las pupilas, la posición de la nariz, etcétera.
En este paso toma fuerza la información que se utiliza para distinguir entre las distintas caras que existen en la base de datos. Mediante técnicas 3D y geométricas se extraen todos los rasgos de la persona que se ha sometido a la fotografía y se guardan en un vector para el posterior reconocimiento facial.
En el último paso, que es el fundamental, se compara el vector extraído del paso 3 con todos los existentes en la base de datos. Si existe un patrón con un porcentaje muy elevado de coincidencia con algún vector guardado (ya que no puede ser 100% exacto al original) permitirá el acceso. En caso contrario, indicará que esa cara no corresponde con ningún patrón.
Como puedes ver, el funcionamiento es sencillo de explicar pero muy complicado de realizar. Considerando eso, el algoritmo de reconocimiento tiene que ser, además de ser efectivo, muy seguro para evitar cualquier usurpación de identidad.
Ahora hablaremos sobre este algoritmo de reconocimiento facial y qué técnicas emplean para desarrollarlo los mejores ingenieros de todo el mundo.
Este algoritmo de reconocimiento se estudia dentro de la rama de la inteligencia artificial y puede percibir semejanzas incluso mejor que muchos humanos. ¿Sabes qué técnicas emplean los mejores ingenieros de todo el mundo para desarrollarlo? Te vamos a contar dos de ellas, aunque hay muchas más.
Gracias al 3D puedes obtener la anchura, altura y profundidad de una cara. Además, a estas técnicas no le afectan los cambios en la iluminación, por lo que en los análisis se pueden obtener datos más exactos.
Otras técnicas más antiguas solo empleaban 2D. Desde que se instauró el 3D, la profundidad ha permitido obtener mayores ángulos de medida. Único inconveniente: se necesitan unos sensores mucho más calibrados para que las medidas sean exactas.
Con esta técnica se intenta, sobre todo, memorizar las manchas, cicatrices, tatuajes o cualquier elemento que puede caracterizar a una persona. Este método mejora el reconocimiento en un 25%, además de ofrecer facilidad para la organización de la base de datos, ya que permite ordenar a las personas por estas características especiales.
La llegada de esta tecnología ha permitido que numerosos sectores se interesen por el reconocimiento facial. Sobre todo el sector de las finanzas, empresas de telecomunicaciones, empresas de todo el mundo para el acceso de sus trabajadores, en los coches inteligentes, en los aeropuertos para agilizar trámites, etc.
En el sector de la banca se está empezando a instaurar la posibilidad de sacar dinero del cajero mediante el reconocimiento facial. ¿Interesante verdad? Pero, ¿es seguro?
Sí, es seguro y, además, un estudio afirma que un 70% de los clientes lo cambiarían por el sistema tradicional (el PIN).
Cometido principal de esta tecnología en el sector de las finanzas: mejorar la experiencia al consumidor y la seguridad en las operaciones de cada cliente, ya que facilita el acceso a la base de datos. Simplemente la cámara del cajero te examina y te da acceso a usar sus servicios.
¡Olvídate si quieres de la tarjeta de crédito o el PIN!
Sorprendentemente, el primer campo donde se utiliza esta tecnología es en la seguridad pública. Numerosas cámaras de vigilancia lo tienen ya instalado con la posibilidad de detectar a cualquier persona que pase por delante de ella. Sobre todo, existe una base de datos con grabaciones de criminales que pueden detectar al sospechoso para proceder a su arresto inmediato.
Ya no solo hablamos de cámaras de seguridad. Además, policías de la ciudad de Pekín cuentan con unas gafas especiales para reconocer caras de sospechosos. Su uso normalmente es en lugares donde el paso de gente es muy frecuente, ya que estas gafas tienen una velocidad de reacción increíble.
Por último, su uso también se ha llevado a cabo en cerraduras inteligentes, que en su interior tienen instalada una cámara para dar acceso al personal autorizado. Ya existen empresas de alquiler de habitaciones que cuentan con estas cerraduras.
Numerosas marcas de coches se han interesado por el reconocimiento facial y están invirtiendo una gran cantidad de dinero por tener el coche más inteligente.
¡Imagina sentarte en el coche y arrancar sin necesidad de llaves! Y ya no es solamente esto, sino que en una base de datos se guardarán tus gustos y la configuración del coche. Simplemente con sentarte se instalará.
En el tema de la seguridad, será imposible arrancarlo sin pasar este reconocimiento, lo que disminuirá los robos y aumentará la seguridad.
¡El futuro está más cerca de lo que piensas!
Existen ya aeropuertos que están empezando a emplear esta tecnología para las entradas de los pasajeros a diferentes países y para agilizar los embarques, ayudando así tanto a las compañías aéreas como al personal del aeropuerto.
En concreto, el aeropuerto de Orlando será el primero de todos los Estados Unidos donde la entrega de documentación no será necesaria gracias a las cámaras de alta resolución, que toman fotografías de los pasajeros y las comparan con la base de datos de aduanas. Proceso que tarda aproximadamente 2 segundos por pasajero y tiene una tasa de acierto del 99%. Todo un avance pero, ¿y si es verdad que todos tenemos un doble en algún lugar del mundo? Esperemos que esta variable esté contemplada, para evitarnos un disgusto.
Antes de comercializar un producto con este tipo de tecnología es necesario asegurarse de que es 100% seguro para el consumidor. Si te dijera que si tienes un gemelo, él puede entrar a tus datos bancarios sin tu consentimiento, o que alguien puede crear un modelo de mascarilla que simule tu cara y acceder a tu coche, ¿lo comprarías? La respuesta probablemente sea no.
Los gemelos no tienen caras 100% iguales. De hecho, ya existen reconocimientos que son capaces de distinguir el más mínimo detalle para rechace el acceso de quienes se parecen a ti pero no son realmente tú. Eso sí, la seguridad muchas veces empeora la usabilidad, es decir, puede ser que por cualquier pequeño detalle, siendo tú el usuario correcto, no te permita el acceso.
Cabe destacar que si la cara de los gemelos es 100 % exacta (se puede dar el caso, pero es muy raro) el acceso se desbloqueará para cualquiera de los dos. Pero en estos casos suele haber sistemas alternativos para diferenciarlos.
Los sistemas avanzados que utilizan luz infrarroja son mucho más seguros, ya que no solo contemplan los rasgos de tu cara, sino el parámetro de la profundidad. Es completamente imposible que, con un molde de la cara de otra persona, consigas tener acceso a su perfil de reconocimiento.
Una máscara de estas características no va a tener expresiones, la piel no va a ser exactamente la misma e incluso hay sistemas que son capaces de medir el pulso cardíaco.
Una pregunta muy común es: ¿qué pasaría si estás durmiendo y te pasan tu móvil por la cara? En este caso, dependerá de la prioridad de seguridad que le hayas dado a ese dispositivo. Si el dispositivo presenta un sistema seguro, normalmente identifican el nivel de inconsciencia. Es decir, si el usuario presenta los ojos cerrados por más de 3 segundos, no se le aceptará el reconocimiento.
Por ejemplo, el sistema de reconocimiento de la mayoría de los móviles que incluyen funcionalidades de desbloqueo por reconocimiento facial, no presenta estos requisitos de consciencia, por lo que si alguien te pasa el terminal mientras estás dormido, podrá acceder a él, ya que el porcentaje de rasgos tuyos que perciba será muy elevado.
Hacerte cualquier tipo de rasguño en la cara no supondrá ningún problema para tu dispositivo, ya que, al fin y al cabo, el porcentaje de reconocimiento va a ser muy elevado puesto que la anchura, la altura, la profundidad o el tamaño de los ojos no van a cambiar.
La industria de la inteligencia artificial cada vez está más presente en la sociedad y, en la actualidad, se están desarrollando aplicaciones para que tu día a día sea mucho más llevadero.
La aplicación británica Blippar está desarrollando una nueva sección dentro de su startup de reconocimiento de imágenes. Se trata de una sección en la que se podrán reconocer famosos con una imagen y aparecerá una ficha con información del personaje público.
Es la primera aplicación que incluirá el reconocimiento de caras con una simple fotografía. Contará con unas 70.000 figuras públicas en su lanzamiento que, posteriormente, irá actualizando con el paso del tiempo. Además, si tú quieres pertenecer a su base de datos, te puedes crear un perfil para que a cada usuario que intente reconocer tu cara le salga tu ficha. Curioso, ¿verdad?
¡Una forma nueva divertida de hacer saber a la gente quién eres y de aprender más sobre los demás! Y una nueva preocupación para los más celosos de su privacidad.
¿Se te ha perdido tu perro mientras lo paseas? No te preocupes, porque una empresa china ha desarrollado Megvii.
Megvii es una aplicación valorada en 3.500 millones de dólares que te permite almacenar en una base de datos la huella de la nariz de tu perro con una fiabilidad del 95%. Simplemente, inicia la cámara de tu smartphone con la aplicación y hazle una foto a la nariz. Si tu perro se pierde alguna vez, lo podrás encontrar con esta aplicación.
¡15.000 dueños ya lo han hecho!
Actualmente, la mayoría de los móviles que se están fabricando incluyen en su software la posibilidad del desbloqueo del móvil mediante reconocimiento facial. En 2019 esta tendencia ha superado en uso al reconocimiento por huella, aunque numerosos estudios afirman que la seguridad que se tiene con el reconocimiento facial es pésima.
4 de cada 10 smartphones se desbloquean con una foto del dueño.
Algunos detalles curiosos sobre el uso del reconocimiento facial.
La postura de Facebook está siendo clara respecto a la investigación e innovación tecnológica en su plataforma. Instauró un sistema de reconocimiento facial que es capaz de detectarte en fotos en las que estás sin etiquetar. Durante el año pasado fue el tema del momento y ha incentivado la polémica para muchos ciudadanos, ya que están recopilando información y utilizando esta nueva herramienta sin el permiso de ciertos usuarios.
Funcionamiento sencillo para una funcionalidad que tiene el éxito prácticamente garantizado: el usuario sube una foto a la plataforma y esta se encarga de analizarla para, posteriormente, etiquetar a las personas que aparecen en ella. Luego las notifica. Facebook cree que es fundamental, ya que así todos sus usuarios son conscientes de todas las fotos o publicaciones en las que aparecen en la red. Todavía tienen mucho trabajo por hacer, pero en un futuro no muy lejano se cree que estará instaurada totalmente en la plataforma.
Amazon cuenta con un proyecto de vigilancia más conocido como Amazon Rekognition. Este proyecto consiste en vender sus servicios en seguridad y presenta grandes ventajas respecto a las empresas convencionales, ya que su innovación es constante.
Amazon Rekognition presenta diversos sistemas que facilitan el reconocimiento de objetos, personas y hasta la captura de emociones como pueden ser el miedo o la tristeza. Se basa en una tecnología de aprendizaje profundo (rama de la inteligencia artificial) que se encarga de analizar millones de fotografías diarias. Todos los rostros localizados se devuelven con coordenadas y un marco rectangular.
La inteligencia artificial es el futuro, y las empresas están invirtiendo mucho capital para que tengamos los mejores servicios, garantizando la seguridad de las personas. Está claro que todavía queda mucho por delante, pues estamos al principio de una nueva era en la que, viendo lo poco que llevamos de recorrido, quedan muchas cosas nuevas que experimentar: mejor tecnología, mejor experiencia al consumidor y, por supuesto, una mejor calidad de vida para hacer de este mundo un lugar mejor.
Puede que tengan sus inconvenientes, ya que te pueden estar vigilando en todas partes, en cualquier momento, e incluso saber cuál es tu estado de ánimo a través de las fotografías que quedan registradas en las bases de datos. Pero forma parte del proceso. A las grandes empresas les interesa mucho toda esta información para encontrar a sus clientes ideales, y esto es bueno para ti aunque parezca mentira: de esta manera, las compañías solo se fijarán en los consumidores que de verdad están interesados en sus productos y no tratarán de invadir con su publicidad a todo el mundo.
¿Cómo ves el futuro? ¿Crees qué dentro de unos años la inteligencia artificial nos permitirá una seguridad facial en todos los aspectos comentados anteriormente? ¿Qué sectores serán los próximos donde el reconocimiento facial se instaurará? ¿Tiene límites esta tecnología? ¿Cómo crees que se conjugarán privacidad y seguridad en el mundo de las próximas décadas?
