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¿Quién no ha tenido nunca problemas con su móvil y la tarjeta SIM? Es algo bastante habitual (y molesto). Piensa que te deja totalmente fuera de combate: no podrás conectarte a la red, enviar mensajes o, por ejemplo, realizar llamadas.
Que no cunda el pánico. Como hablamos de un elemento externo que introducimos en el teléfono, las soluciones para evitar que dé fallos son bastante sencillitas. No llames a ningún servicio técnico, tranquilo: lee esto primero.
Por muy grave que parezca, no hay que alarmarse. De hecho la tarjeta SIM está más que respaldada en estos casos. Pero, antes de aplicar una posible solución, tenemos que saber cuál es el motivo por el que falla.
Antes de alarmarte, comprueba si tienes línea y cobertura o se ha cortado por algún motivo. Puedes acceder a la aplicación de tu compañía (si tienes conexión wifi) o llamar al servicio de atención al cliente (desde otro terminal).
En caso de que te hayan cortado la línea por algún motivo extraño, presenta las facturas demostrando cuál ha sido tu consumo y gasto.
Pueden darse diferentes situaciones cuando la SIM falla. Una de ellas es que sea la propia tarjeta la que está dañada. Esto se puede deber a que la has introducido con demasiada fuerza, el móvil ha recibido un golpe...
Si la culpa es de tu compañía que tiene un fallo en el servicio, entonces es fácil, pero si es el cuerpo de la SIM el que está dañado, tendrás que pedir un duplicado de tarjeta o reconfigurar el teléfono.
Además, algo que debes probar casi lo primero es sacar la SIM y meterla en otro móvil para ver si la reconoce. De la misma forma, también sería útil introducir una tarjeta en tu dispositivo.
Así conseguirás saber si la que está estropeada es la SIM o es el móvil que tiene un problema en el lector de tarjetas. Esperamos que esto no sea así, porque entonces ya sería algo relacionado con el hardware y podría ser más grave.
Si, por lo que sea, no has conseguido con lo anterior resolver el problema, aquí te daremos unos consejos para que te pongas manos a la obra y realices los métodos que te pueden ayudar.
Chill, porque todo lo que tiene que ver con la tarjeta SIM es bastante intuitivo. Ve descartando sospechas hasta quedarte sin opciones (y haberlo reparado antes, claro).
Síííí, ya sabemos que está trilladísimo, pero es que funciona. ¿Has probado a reiniciar el móvil? Esto puede apañar incluso los problemas relacionados con la tarjeta SIM.
Lo ideal es que dejemos unos 20 o 30 segundos el dispositivo apagado. Por muy básico que te pueda parecer, la mayoría de veces los errores de detección se dan porque el software ha sufrido un fallo temporal.
Con el reinicio esto debería desaparecer. Pulsa el botón de encendido durante unos segundos y comprueba que al encender de nuevo el smartphone ya reconoce la SIM y tienes señal.
Es solo una probabilidad, pero está ahí: actualizas el móvil a una versión superior y te encuentras con problemas de la tarjeta SIM. En ese caso debes comprobar si han lanzado algún parche de seguridad y funcionamiento para corregirlo.
Los datos que se almacenan en la memoria del smartphone pueden jugarnos malas pasadas y acaban siendo los culpables de que el sistema no funcione de forma correcta. No es lo más habitual, pero cosas más locas se han visto.
Cada móvil es un mundo, pero borrar el caché suele ser parecido en todos los smartphones. Lo único que tienes que hacer es acceder a la configuración y buscar en almacenamiento la parte de la caché.
En el caso de que no aparezca esta opción en tu móvil, seguro que puedes descargarte una aplicación de limpieza que te permita eliminar archivos basura de tu almacenamiento.
De esta forma tendrás la caché limpia y solo te quedará apagar y encender de nuevo el móvil.
Puede que, quizá por el país del que procede el teléfono o la configuración que tiene de fábrica, venga preseleccionada la red automática a la que conectarse. Es posible que esto provoque errores en la lectura de SIM y te deje incomunicado.
Ante esta situación, lo que tendrás que hacer es leer el libro de configuración de tu modelo de móvil para saber cómo configurar el modo automático para que tu móvil reconozca cualquier red de forma automática.
Un método sencillo, pero más útil de lo que crees. En la mayoría de ocasiones, el móvil viene configurado con unos ajustes de red que no son válidos para tu SIM. Accede a los ajustes y borra esta configuración.
Tranquilo, no pasa nada, no borrarás todos tus datos, fotos, aplicaciones y demás archivos. Con este método, únicamente eliminarás la configuración de la SIM que tiene tu dispositivo.
Ojo, también se borrarán todas las claves wifi y los dispositivos que tenemos conectados por Bluetooth.
Llegamos al punto final, el último recurso que tenemos para intentar que nuestro móvil reconozca la SIM antes de llevarlo al servicio técnico.
Es cierto que al realizar esto perderemos todo lo que hay en el móvil, por lo que mejor pasar todo lo importante al PC u otro teléfono.
Esto debería funcionar porque borra completamente todo, todito, todo, desde la configuración hasta las actualizaciones que hemos instalado. Vamos, que quedará como cuando lo compramos.
Con esto se puede solucionar algún problema de software que haya quedado tras instalar algún parche o nueva versión que dé fallos en tu Android o iPhone.
El procedimiento no suele variar mucho independientemente de la marca o del modelo, solo tienes que acceder a los ajustes y escribir en el buscador interno "Restablecer", te aparecerá la opción de borrar todos los datos.
En el caso de que ninguno de estos métodos te sea de ayuda, lo que te recomendamos es que lleves tu dispositivo a un técnico porque el problema puede venir del hardware. Y ya sabes, si el coste se va de madre, piensa en renovar móvil.
