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Es una de las principales referencias para toda una generación de jóvenes. Ibai Llanos se ha convertido por derecho propio en una las figuras más relevantes de todo el 2020 y probablemente del 2021. Lo ha hecho gracias a Twitch.
La plataforma de streaming nacida en 2007 vivió un crecimiento explosivo hace ya casi un lustro, y en los últimos años no ha dejado de fabricar auténticas leyendas del entretenimiento moderno. Personas que inspiran y sí, que se están enriqueciendo a espuertas.
RanbooLive, Auronplay, Sintica, TheGrefg, ElRubius; estos creadores han conseguido convertir la marca de Twitch en un sinónimo de éxito, atrayendo en el proceso a más creadores y usuarios. Una auténtica bola de nieve.
Esto también ha tenido un efecto colateral para Google, que ha visto cómo muchos de sus mayores youtubers se iban marchando a la competencia seducidos por unas condiciones de monetización mucho más atractivas.
Y es ahí a donde queríamos llegar. Con grandes ejemplos a seguir, y un mercado de más de 140 millones de usuarios activos, muchos adolescentes están apostando por la firma morada para tratar de despegar sus carreras como streamers.
¿Es tan sencillo cómo parece? En realidad no. Por eso en este post queremos profundizar en el sistema de monetización de la plataforma y tratar de entender cómo se gana dinero en Twitch. ¿Tienes ya una cámara y un micro? Pues sigue leyendo.
La respuesta a esta pregunta se llama Programa de Afiliados de Twitch. Es una plataforma de monetización similar a la que utiliza Youtube, con sus herramientas para generar beneficios y sus requisitos de entrada.
“El programa acerca un paso más a los streamers calificados a su sueño de poder vivir de lo que les apasiona”, explica la empresa. “Los Afiliados de Twitch podrán comenzar a ganar ingresos en Twitch a medida que forman su audiencia y trabajan para conseguir el codiciado estado de Partner de Twitch”.
Una vez se está dentro, empezar a generar dinero no es complicado. Pero claro, acceder a este programa no es nada sencillo. Los requisitos a cumplir son los siguientes:
Si cumples todos los requisitos solo tendrás que esperar a recibir el email de invitación (no se permite una solicitud proactiva). En apenas una semana deberías tener una respuesta definitiva para saber si estás dentro.
Ya dentro del Programa de Afiliados solo te quedará realizar unos pequeños ajustes y decidir qué herramientas vas a usar para generar engage y, claro, dinerito. Es importante entender que en Twitch se premia más la fidelidad que el SEO. Justo lo contrario que en Youtube.
Dicho eso, completa con tus datos personales el formulario que verás en la bandeja de mensajes firma el Twitch Affiliate Agreement y acepta los Términos y Condiciones. En ese momento tendrás que introducir tu cuenta del banco y otros conceptos financieros.
Tendrás que rellenar el formulario Tipalti y seleccionar el método de pago que más te interese:
Convertirse en afiliado ya supone un importante empujón de diferenciación respecto al resto de contenidos. Solo por eso y sin tener que cambiar nada de lo que estabas haciendo, comenzarás a atraer a más público.
Es en este momento crítico cuando tienes que encontrar la fórmula adecuada para iniciar el proceso de crecimiento (la mayoría de streamers se estancan aquí y no logran despegar). Para eso Twitch ofrece una serie de herramientas de monetización.
El usuario suscrito tiene acceso a tu contenido sin publicidad, así como a vídeos premium que hayas querido limitar. También incluye emojis, emblemas y chats exclusivos dentro del canal. Es una suerte de micromecenazgo dividido en tres rangos:
Cuanto más se paga más derechos se obtienen, obviamente. Y también crece el margen de beneficios que se lleva el creador: 50% en el nivel 1, 60% en el nivel 2 y 80% en el nivel 3. Sí, crece el porcentaje con lo abonado.
Dentro de Twitch también hay una moneda de curso legal. O bueno, más bien de curso digital. Se llama Bit y sirve para comprar todo tipo de artículos virtuales dentro de la plataforma (la adquisición mínima es de 100 bits, o 1,53 euros).
El uso principal de estos tiquetes son los Cheers, una suerte de animaciones que se pueden enviar en los chats de los directos para expresar emociones. Son exclusivos, claro, de los suscriptores.
¿Qué se llevan los creadores? “Twitch ofrece una parte de los ingresos que recibe por los Bits, y que equivale a 1 céntimo por cada Bit usado para enviarles Cheers”, indica la compañía. No es mucho, pero tiene una progresión geométrica en relación con los suscriptores.
Es la herramienta más sutil de todas. Los juegos con los que hagas streamings aparecerán en forma de fichas informativas en la caja de descripción del vídeo. Esto en realidad es un enlace directo a la tienda.
Twitch cultiva un algoritmo capaz de detectar, no solo el título elegido, sino también todos los artículos y complementos relacionados. Todos se muestran en ese mismo espacio, generando un engage poderoso entre el creador, la plataforma y el estudio del videojuego.
En este caso el streamer se lleva un 5% de cada venta cerrada a través de dicha vía. Algo más suculento pero complicado de conseguir.
Nos hemos dejado lo más obvio para el final. Twitch, aunque depende mucho menos de los anunciantes que Youtube, también se debe a los anuncios para generar beneficios. En este caso hablamos tanto de pre-roll como de pausas regulares (a marcar por el creador).
Es complicado decir una cifra concreta de beneficios es complicada porque aquí entra en juego el CPM. Es decir, lo que se paga por cada 1.000 impresiones (veces que impacta el anuncio por cada entrega).
De media podemos hablar de un CPM de entre 0,25 y 1,50 euros. El mínimo de ingresos publicitarios está fijado en 0,002 céntimos y el máximo en 0,01 céntimos. Al igual que antes, cuantos más suscriptores se tiene, más beneficios se generan.
No nos olvidamos de mencionar las importantes donaciones, de las que dependen gran parte de los streamers (a través de Streamlabs). Estos son ingresos directos que el creador no comparte con la plataforma.
Tampoco de las cartas interactivas de Streamloots, con las que los suscriptores pueden comprar acciones determinadas para los directos, ni de la plataforma de publicidad Streamion, con la que se insertan bloques de anuncios automáticos.
La plataforma se lo debe todo a sus creadores, y por eso no deja de buscar fórmulas de fidelización. Ya sea mejorando márgenes, bonificando actividades, o aumentando la exclusividad de ciertas élites.
Con ese último propósito nació Twitch Partners, un programa más exigente y reducido que el de afiliados al que resulta mucho más dificil entrar. Esto, obviamente, a cambio de mayores beneficios.
¿Cuáles son los requisitos? Sujétate y toma nota:
Si logras entrar tendrás acceso a cosas como la función Squad Stream (directos a pantalla partida con cuatro creadores), 60, y no 14, días de almacenamiento de directos, delay de hasta 15 segundos, Stream Teams, creación de emoticonos animados o prioridad de de atención al cliente, entre otras cosas.
Aunque todas las facilidades que hemos visto hasta aquí apuntan hacia un camino laborioso pero factible, la realidad de Twitch es bien distinta. Y que su fama sea otra no es responsabilidad de los desarrolladores, sino de los medios de comunicación.
¿De quién se habla cada vez que aparece la plataforma en la tele? Exacto, de Ibai, Auronplay, TheGrefg y compañía. Solo captan la atención los streamers de más éxito. Pero estos no representan más que la punta del iceberg del fenómeno.
Con esto no queremos aguar ninguna ilusión o carrera prometedora, solo poner un poco los pies en la tierra. Para eso nos vamos a ayudar de los datos que compartió recientemente el streamer Kilian Arjona en Twitter.
El pasado enero 757.640 usuarios realizaron un total de 5.611.382 directos. En febrero esos indicadores fueron de 770.830 y 5.581.990 respectivamente. Hasta ahí todo bien. Ahora viene la cruda realidad:
Si miramos las cifras globales vemos que el 90% de todas las emisiones de Twitch en español tienen un total de 3 espectadores o menos de media. “Tener una media de más de 6 espectadores a lo largo del mes te coloca entre el 5% de los canales más populares”, explica.
Y más complicado aún: tener más de 29 —una cifra que sigue siendo ridícula para los requisitos que ofrece la plataforma a la hora de cobrar—, te mete en el percentil más exclusivo y alto formado por ¡el 1% de los creadores!
Como todo en la vida, ganar dinero en Internet no es nada sencillo. Ahora bien, que resulte complicado no quiere decir que sea imposible. La constancia ha llevado a Ibai a generar unos 125.000 euros al mes. ¿Por qué no intentarlo?
