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Ha necesitado menos de tres años para convertirse en una de las referencias más importantes del mercado. OPPO llegó a España en 2018 como lo hicieron antes y después otras marcas del grupo BBK: con una carta de presentación en miniatura de lo que manejaban en China.
Ese catálogo se inscribía originalmente en un concepto claro de precio-calidad potente y unos diseños convencionales para los estándares de la industria, pero muy bien acabados y remachados.
Poco a poco el planteamiento se iría diversificando. No segmentando por gamas, como la competencia, sino discriminando sus productos por prestaciones y filosofías. Así, tanto en la familia de modelos A, como en la de Find o en Reno, existen propuestas de todos los colores.
Es verdad que hay precios más bajos en la primera línea genealógica y que los OPPO Find, muy celebrados en 2019 y 2020, explotan con fuerza la parte media de la cancha. No obstante, los acabados de cada modelo abren mucho el abanico de posibilidades para todos los bolsillos.
Basta con recordar cómo el OPPO Find X3 Pro sorprendía a todos como buque insignia de la compañía este mismo 2021, con su pantalla de récord y una de las mejores cámaras del mercado.
Por eso no sorprende que ahora sea Reno el apellido premiado con una joya puntera. Así la firma presentaba este septiembre la sexta generación del OPPO Reno, una tradición que se inició en 2019 con el Reno4, y que ahora entrega su mejor receta hasta la fecha.
El OPPO Reno6 entra en escena con dos terminaciones; la estándar y la Pro (a la espera de una más humilde Z). Sin embargo no hay duda de cuál es la más aspiracional y completa.
El OPPO Reno6 Pro 5G es todo un cúmulo de intenciones que abogan por la fotografía y el entretenimiento a través de la potencia y la elegancia. Se trata de un planteamiento muy competitivo que ataca a la parte más alta del mercado desde un escalafón previo.
Esto último es lo que dota a la propuesta asiática de verdadero interés: ofrecer prestaciones premium con precios de la gama alta. Y no, OPPO no se ha dejado fuera ninguno de sus juguetitos por ello.
| OPPO RENO6 PRO 5G | |
|---|---|
| DIMENSIONES Y PESO | 160,8 x 72,5 x 7,99 milímetros |
| PROCESADOR | Snapdragon 870 a 3,2GHz GPU Adreno 650 |
| PANTALLA | AMOLED de 6,55 pulgadas |
| CÁMARA DELANTERA | 32 megapíxeles f/2.4 |
| CÁMARA TRASERA | Principal: 50 megapíxeles f/1.8 OIS |
| ALMACENAMIENTO | 12GB/256GB |
| SO | Android 11 |
| BATERÍA | 4.500 mAh |
| CONECTIVIDAD | 5G/4G |
| BIOMETRÍA | Lector de huellas en pantalla |
Pocas primeras impresiones se traducen en sensaciones reales como la que ofrece el OPPO Reno6 Pro 5G. A diferencia de su hermano menor, este acabado viene coronado por un panel suavemente curvado que se integra de forma natural con la parte anterior.
A nivel general, nos topamos eso sí con un continuismo notable respecto a la quinta generación. El terminal presenta unas dimensiones alargadas derivadas de sus 160,8 mm de longitud, y sus más menudos 72,5 mm de anchura.
Es un modelo que crece respecto a la generación anterior un centímetro de altura, pero que decrece la misma cantidad en anchura. Eso hace que las sensaciones de “móvil grande se mantengan”, y que aumente la perspectiva general alargada del diseño.
Tales pretensiones, al menos, las compensa con un peso correcto de 188 gramos. Mirando la ficha técnica nos damos cuenta de que son 15 gramos más que el OPPO Reno5 Pro. ¿De dónde sale el sobrepeso?
Pues tanto del mayor grosor (unos 0,3 milímetros) como de la renovación de componentes interiores. En cualquier caso, es una cifra que se mantiene en el margen competitivo de este percentil, y que no molesta en absoluto de cara a la experiencia diaria.
Lo que sí marca la diferencia es lo que vemos tanto por delante como por detrás del modelo. La marca ha desarrollado una tecnología con más de 20 patentes llamada OPPO Glow, con la que dicen ofrecer un brillo permanente desde todos los ángulos y repeler las marcas de huellas.
¿Cuál es la realidad? Tras más de una semana de uso podemos reafirmar ese tratamiento oleófugo. El tacto es metálico y algo resbaladizo, pero a cambio ofrece una protección total contra la suciedad (certificación IP54).
OPPO asegura que con dicha la composición elegida de Gorilla Glass 5 con capas de grafito y acero mejoran la rigidez general y ayudan a la disipación del calor general. Algo certero que hemos puesto a prueba llevando la RAM y el procesador hasta el extremo.
Es verdad que el calor llega a acumularse si pasamos muchos minutos consumiendo recursos a gran ritmo, pero esa temperatura se va tan rápido como aparece. Al coger el móvil con las manos la notable ergonomía siempre contrasta con el frío de la carcasa.
La superficie de colores cambiantes está coronada por el módulo de la cámara; una protuberancia muy discreta de formas funcionales que engloba los cuatro objetivos punteros del modelo. Vamos, todo un acabado inmejorable.
Cerrando filas la entrada tipo USB-C centrada en el perfil inferior, junto al slot para SIM, o dual SIM, pues acepta ambas configuraciones. Como pega principal no tenemos ranura para almacenamiento con tarjeta microSD, aunque como veremos, tampoco lo necesitaremos.
En estas altitudes de mercado lo importante no es tanto incorporar una u otra tecnología, sino ofrecer un rendimiento impecable. En ese sentido el OPPO Reno6 Pro 5G no muestra ninguna debilidad.
Tenemos el desbloqueo tradicional con el botón situado en la parte derecha del borde, el dactilar ofrecido mediante un sensor situado bajo la pantalla, y el facial (descontamos el PIN, que ha y está presente).
Vayamos uno por uno. El desbloqueo táctil nos ha sorprendido gratamente por el elevado nivel de sensibilidad que presenta. No sería la primera vez que vemos un móvil de gama alta teniendo problemas con la suciedad, pero aquí eso no sucede.
El facial por su parte, pese a quedarse en blanco frente a momentos de mucha oscuridad, sirve de complemento a la perfección. Casi siempre desbloquearemos con el dedo, pero en más de una ocasión ahorraremos tiempo con esta otra tecnología.
Al final la sexta generación cumple en términos de biometría, pero tampoco sorprende con innovaciones extrañas. Viendo el resultado de sus anteriores modelos no llama la atención que los Find y la serie A sigan los mismos esquemas.
El OPPO Reno6 Pro 5G y su hermano menor vienen igualmente equipados con todos los sensores funcionales del mercado —geomagnético, proximidad, gravedad, óptico— así como con un acelerómetro. Máxima precisión con todos ellos.
Más y mejor; así de fácil es resumir lo que nos trae este OPPO Reno6 Pro 5G con su pantalla. El display crece de las 6,43 pulgadas de la quinta generación a las 6,5 pulgadas de esta. No es un cambio muy notable que deja la ratio de pantalla en un increíble 92,10%.
Ahora bien, si tuviéramos que nombrar un apartado de este frente para explicar por qué nos ha enamorado, lo último que diríamos sería el tamaño. El panel AMOLED suave deslumbra principalmente por su tasa máxima de refresco de 90 Hz y su resolución Full HD.
No son cifras espectaculares si lo comparamos con lo mejor de la industria (estamos viendo ya tasas de hasta 144 Hz y definiciones que casi doblan el FHD), pero rinden de manera más que notable y permiten abaratar ligeramente el precio.
Las animaciones, por su parte, fluyen con muchísima suavidad y las transiciones son de las más naturales que hemos encontrado últimamente.
Esto último se lo debemos a una tasa de muestreo táctil de 120 Hz / 180 Hz, que predispone a la pantalla a cualquier interacción casi incluso antes de ser tocada. Si vamos a utilizar el móvil para jugar, lo agradeceremos en títulos con una gran demanda de FPS y reflejos.
Y hablando de juegos, la representación de colores de este panel no tiene nada que envidiar a lo que obtenemos con una televisión media-alta. Para empezar porque dispone de una capacidad de brillo de 800 nits capaz de superar hasta los reflejos del sol más intensos.
El OPPO Reno6 Pro 5G consigue algo que muy pocos rivales logran: seducir a través de las imágenes. Con una intensidad de píxeles de 402 ppi y una relación de contraste 5.000.000 a 1, al panel no le cuesta ningún trabajo hacer una representación “tropical” de los colores.
Es decir, que las intensidades cromáticas son hipnóticas y que fotos y vídeos pasados de otros terminales los veremos con muchísima más calidad de conjunto. Y esto a pesar de que nos hemos movido siempre con el modo de color sRGB (71% NTSC), con unas tonalidades más naturales.
Los ajustes también permiten seleccionar un modo P3 (100% DCI-P3) más intenso que aumenta la luminosidad de los colores y los contrastes de las imágenes. OPPO nos recomienda más esta configuración, pero luce tanto un modo como el otro.
Si nos mola ir con el brillo al máximo —algo que no recomendamos por el bien de tus retinas—, la marca nos concede el beneplácito de protegernos con un ajuste de confort visual. De todas formas, y aquí viene lo más interesante, la intensidad del brillo es inteligente.
¿A qué nos referimos? Pues a un sensor de luz de 360 grados situado en el módulo trasero de las cámaras, que capta en todo momento la iluminación ambiental y lo cruza con el sistema para ajustar automáticamente un brillo siempre complementario y confortable.
OPPO sabía que sin renunciar al atractivo del precio nunca podría rivalizar con los topes de gama de la competencia. Por eso, para perfilar uno de los apartados más esperados del Reno6 Pro 5G, ha apostado por la diferenciación.
Este móvil incorpora cuatro cámaras de alta prestancia, pero no sobrevuela las cifras que ya maneja el mercado prémium. En cambio, posee un empaque único y unas cuantas sorpresas tecnológicas que van más allá de lo anecdótico.
Si nos quedamos en los números, no encontraremos prácticamente ninguna novedad respecto a la quinta generación: los megapíxeles, sensores y aperturas son similares.
Sony sigue firmando la tecnología principal con gran resultado. La magia del OPPO Reno6 Pro 5G es algo más sutil.
Simplificando mucho todo este batiburrillo de números, el protagonista del conjunto es la IMX766 de Sony, una lente que ya hemos visto en otros móviles premium de Realme y en bastantes Vivo y OnePlus, siempre con un gran resultado.
Viendo la calidad que demostró en el OPPO Find X3 Pro —terminal con el que el Reno6 Pro comparte muchas similitudes externas e internas—, no sorprende en absoluto que la marca haya decidido repetir.
Es una lente que en este OPPO Reno6 Pro 5G nos ha sorprendido muy gratamente por el estabilizador óptico que lo acompaña (mediante un sistema electrónico) y el rango dinámico que entrega en prácticamente cualquier momento del día.
Este pack nos permite hacer fotografías improvisadas con efectos de nivel casi profesional. Aunque si hay algo que le pone el toque atractivo a las fotografías eso es el procesado general de las imágenes que entrega el sensor de temperatura.
Sí, esta es la sorpresa de la que hablábamos.
Es una de las particularidades más interesantes de las cámaras del terminal: el software es capaz de adaptarse en todo momento para asegurar una cierta regularidad en el resultado de cada fotografía. Al menos en cuanto al color.
Podríamos echar en falta algo de naturalidad en el cromatismo, pero la verdad es que la intensidad de los tonos dota a las capturas de un componente viral muy interesante; situaciones anodinas de nuestro barrio hasta nos parecerán trendy.
Le tenemos que dar las gracias a la IA incorporada en la app de la cámara. Es capaz de identificar hasta el escenario más extraño y ajustar los parámetros al milímetro; un jardín, un edificio, el cielo, el tráfico. Lo que sea.
El algoritmo también es el que ha llevado el bokeh hasta otro nivel. La precisión a la hora de contrastar la figura con los fondos es descomunal. Aquí el HDR no marca tanto la diferencia como en otros rivales, pero no le hace falta al OPPO Reno6 Pro 5G.
Algo también destacado es el modo noche, que interpreta las escenas con bastante elegancia y no quema las luces (¡bien!)
Igualmente, la app es lo suficientemente versátil como para resolver todas las encrucijadas con la suficiente holgura. Qué vamos a decir: es una auténtica delicia propia de un tope de gama con muchos juguetitos. Del autoenfoque Flash Snapshot a la AI Palette para generar álbumes.
Solo tenemos que poner dos “peros”. El primero para la cámara macro, que no está al nivel de sus hermanas y deja sabores algo agridulces con el enfoque. Podría pasar si la apuesta por este apartado no fuera tan evidente.
El otro punto débil que hemos detectado en la cámara es el ruido que aparece a partir del aumento X15. El granulado se hace bastante más evidente que en el Find X3 Pro y en otros terminales de la competencia. Aún así resulta suficiente para un uso intensivo.
Como curiosidad podemos cerrar este apartado dándole las gracias a OPPO tanto por el modo Extra HD (que aquí sí marca una diferencia interesante en el recorte de siluetas), como por la posibilidad de capturar con la resolución completa de 50 MP (luego te tocará editar).
No lo solemos hacer, pero el OPPO Reno6 Pro 5G se lo merecía. El fabricante chino ha hecho aquí un trabajo descomunal. Se percibe rápidamente por la definición y los colores de la imagen, y a largo plazo por la estabilización de la misma.
La combinación del OIS y el EIS funciona muy bien y nos deja hacer todo tipo de virguerías de movimiento sin perder la calidad de la captura. Ahí entra en juego el Focus Tracking para fijar objetos de enfoque, y sí, de nuevo el efecto bokeh.
La marca se nota que ha trabajado mucho en mejorar lo visto generaciones atrás. Así no hemos dejado de sorprendernos por lo fiable que es pese a la velocidad de los paneos que hiciéramos. Fliparás con el modo ultraestable, de verdad.
Cierran filas el HDR dinámico, que rinde algo mejor que en estático, y un modo Ultra Night, que resuelve las clásicas escenas imposibles de grabar. Con la función Dual-View se puede capturar a cámara lenta con la lente trasera y delantera al mismo tiempo. Curioso pero anecdótico.
Nada de todo lo que hemos contado funcionaría como lo hace de no ser por él. La elección de OPPO en cuanto al chip ha sido la más acertada a juzgar por el rendimiento del terminal, pero no solo por eso.
Si pudiéramos crear un móvil de gama alta sin presupuesto límite, todos probablemente nos iríamos a por la joya de la corona de Qualcomm, el Snapdragon 888+. Sin embargo, si lo que quisiéramos fuera atacar por debajo a los titanes que dominan esa primera liga, ¿qué haríamos?
La respuesta se llama Snapdragon 870. Esta versión “lite” del procesador buque insignia llegó al mercado a finales del año pasado, y la marca asiática no ha dudado en escogerlo para el OPPO Reno6 Pro 5G. ¿Buena o mala elección?
En la quinta generación, el MediaTek Dimensity 1000+ se mostraba solvente pero no daba la talla al compararlo con los rivales superiores. Con el tiempo y la llegada de nuevos modelos el chip fue mejorando, hasta que el Reno5 Pro+ rozaba el objetivo con el Snapdragon 865.
Para proseguir esa evolución técnica era imprescindible hacerse con el subcampeón de Qualcomm. Primero, porque solo así se daría la gasolina necesaria al conjunto, y segundo porque encajaba a la perfección con la filosofía del Reno6 Pro 5G: prémium a precio de gama alta.
Tenemos un chipset octacore de hasta 3,2 GHz fabricado en 7 nanómetros FinFET, con todas las compatibilidades que te puedas imaginar. Empezando por el 5G que da nombre al terminal, y siguiendo con Bluetoothh 5.2 y WiFi 6.
Es un procesador que mueve al OPPO Reno6 Pro 5G con muchísima soltura y que, de acuerdo con la marca, mejora respecto a la anterior generación un 12% el rendimiento de la CPU y un 10% el de la GPU (aquí Adreno 650).
Qué podemos decir. Las acciones son inmediatas, los menús se mueven de manera fluida y la multitarea despliega todo su potencial sin obstáculos. Durante más de una semana de uso intenso no hemos notado ni una pizca de lag. Nada.
Donde quizás mejor se perciba esta soltura de rendimiento es tanto en las animaciones continuas del modo Pantalla siempre activa, como en videojuegos del más alto nivel. Y en este punto tenemos que hacer una mención de honor.
De forma exclusiva y diferencial, OPPO ha elegido al Reno6 Pro 5G como primer modelo para su política de expansión en potencia. Nos referimos a los 7 GB de RAM que se pueden añadir a los 12GB que vienen de serie (en configuración LPDDR4x a 2133 MHz, 4 x 16 bits).
Son unos números de escándalo para un terminal que dice ir solo de “gama alta”, y que permiten correr cualquier título de última generación sin despeinarse. La memoria extra, eso sí, solo hace las veces de lanzadera para abrir apps y de repositorio de caché.
Completa la carta de presentación 256 GB de memoria interna. Por eso te decíamos lo de que no ibas a necesitar SD externa para almacenar nada.
O la odias o la amas. Bien es cierto que OPPO se esfuerza por que termines eligiendo lo segundo. ColorOS 11.3 sigue dando de qué hablar por ser una de las capas de personalización más distanciadas de lo que ofrece Android nativamente.
Dejamos claro desde ya que a nosotros nos apasiona. Sabe mantener la esencia del SO de Google sin renunciar a servicios, configuraciones e interfaces que dotan de carisma a los móviles de la marca.
En este caso, claro, el OPPO Reno6 Pro 5G no se deja en el tintero ninguno de los juguetitos vendidos por esta versión del software:
Una de ellas es O Relax, un servicio de enfoque mindfulness, que nos permite dejar el teléfono en reposo con una temática de relajación en pantalla y su sonido ambiente correspondiente. Nosotros nos hemos pasado unos días navegando por el espacio y surcando el mar en calma.
A nivel de personalización nos topamos con uno de los SO más interesantes. Dejando de lado la barra de notificaciones y lo habitual en Android, este Reno también puede vestir su barra flotante (situada en la curvatura de la pantalla), sus fuentes, menús y animaciones (fps).
Ahora bien, lo que más nos ha molado con diferencia de ColorOS 11.3 es su sistema de gestos. No, no hablamos de los clásicos para abrir el gestor de apps o cerrar ventanas. Este terminal es la librería de Alejandría de estos “atajos”.
Para hacer esta review, por ejemplo, nos ha venido genial poder deslizar tres dedos hacia abajo para hacer capturas de pantalla instantáneas. Pero eso es solo el principio. Si nos vamos al scroll lateral desde los bordes, tenemos un “back and forward” similar al de iOS.
Si hacemos deslizamos los tres dedos hacia arriba con una app abierta entraremos en la pantalla partida; pulsando y no deslizando, seleccionamos texto a traducir automáticamente en más de 16 idiomas con Google Lens.
Un scroll vertical ascendente nos agrupa las apps para llegar a donde sea con una sola mano; deslizar dos dedos en línea descendente vertical detiene y reproduce la música; dibujar una “o” abre la cámara y pintar una “v” abre la linterna.
Podríamos seguir así todo el día y no acabaríamos nunca. Además literalmente, porque se pueden hasta crear gestos personalizados con atajos únicos y movimientos configurados paso a paso.
¿Eso es todo para este ColorOS 11.3? Por supuesto que no. Ni por casualidad nos íbamos a olvidar del potencial gaming del Oppo Reno6 5G. Y claro, ya te adelantamos que es un buen candidato para pegarse buenas viciadas.
Si el System Booster acelera el rendimiento general del terminal sacrificando un poco de batería, el Game Focus Mode hace lo propio con los juegos: nos elimina interfaces y crea controles directos de gran ergonomía.
Ya habíamos dicho que este smartphone mueve sin problemas cualquier título, sin embargo hay más. La sexta generación de Reno equipa el X-axis Linear Motor, una especie de pila vibradora háptica que reacciona a nuestras acciones dentro de los juegos.
A esta inmersión también contribuye el altavoz estéreo ultralineal que incorpora, compatible con Dolby Atmos. No somos muy fans de jugar en el móvil a según que títulos, pero con el OPPO Reno6 Pro 5G nos hemos tenido que tragar nuestras palabras.
Hablemos sin tapujos: esperábamos un poco más de batería para esta quinta generación. Los 4500 mAh se nos antojan escasos si tenemos en cuenta que es la misma cifra que maneja el Reno5 Pro+, y que se queda por detrás de los rivales a los que está retando.
No es una batería mala per se, pero sí poco llamativa. Por suerte OPPO sabe sacarle mucho partido con un gestor de energía sobresaliente que ofrece tanto un modo ahorro como un modo de superahorro. Este último nos da casi un 50% más de autonomía.
La IA aquí hace un trabajo espectacular detectando en todo momento configuraciones y hábitos que nos están haciendo perder duración. En nuestro caso, por ejemplo, era persistente el tema del GPS. La recomendación para desactivarlo (indica el tiempo que se gana).
Siguiendo las alabanzas hacia ColorOS, en este apartado encontramos un modo de alto rendimiento, un sistema de optimización en reposo y una carga nocturna optimizada (se aprende tus hábitos para controlar la velocidad de carga por las noches y así aumentar la vida útil de la batería).
Ah, pero nos hemos dejado lo mejor para el final. La batería del OPPO Reno6 Pro 5G solo se lleva el notable por la carga rápida que soporta el Snapdragon 870: la SuperVOOC 2.0 de 65W.
Esta permite cargar el 50% de la batería en tan solo 15 minutos, y el 100% en unos increíbles 36 minutos. Por eso decimos que el apartado de la autonomía encaja a la perfección con lo de “una de cal y otra de arena”.
¿Y qué pasa con la duración? ¿Para cuánto dan esos 4500 mAh? Dependerá del uso que le des al móvil, claro. A nosotros cada carga completa en uso intensivo nos duraba unas 6 horas y media. A un ritmo normal sobrepasaba el día justo, y con perfil bajo se extendía más de 3 días.
La versión más alta de la sexta generación de la familia Reno es versátil, potente y muy solvente. Son calificativos todos ellos que consigue sin apostar por los componentes topes de gama, gracias a la elegancia en la ejecución y el acierto en la elección de ajustes.
El OPPO Reno6 Pro 5G no es un buque insignia ni lo pretende, pero ofrece una relación calidad-precio a la que casi ningún rival de su segmento puede aspirar. Si no quieres dejarte más de cuatro cifras en un terminal, esta es tu mejor elección para no renunciar a nada.
Podrás moverte por el día a día con muchísima soltura, y dar rienda suelta a tu creatividad con una cámara y un procesador casi sobresalientes. No hay mucho más que decir que no hayamos mencionado ya.
Estamos ante uno de los 10 modelos más interesantes del año.
Por eso en Yoigo no podíamos dejarlo pasar. Da el paso y entra en nuestra tienda para hacerte ya con el OPPO Reno6 Pro 5G por tan solo 38 euros al mes con la tarifa de gigas infinitos. Si te decides antes del 30 de septiembre de 2021, te llevarás con tu compra dos regalos suculentos.
Por un lado, una Funda de Silicona valorada en 19,90 euros, y por otro, los auriculares OPPO Enco X valorados en 179 euros. ¿Es o no es una decisión inteligente?
