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Las redes sociales se han convertido en la vía más fácil y cómoda de conectar con la gente. Y no hablamos sólo de relaciones personales con conocidos, motivo principal por el que nació Facebook. Nos referimos a conectar con un público amplio, sin fronteras, lo que en el mundo de los negocios lleva años llamándose público potencial.
Y es que al romperse las barreras físicas, internet es un enorme escaparate para todo aquel que tenga algo que vender. La oferta es muy amplia y la competencia infinita, sí. Pero si se tiene claro cuál es el nicho de mercado y el producto a comercializar, las redes sociales son un expositor efectivo y gratuito.
Uno de los colectivos que ha detectado su oportunidad de negocio en Instagram y que ya usa la red social para promover sus creaciones es el de diseñadores de moda.
Si cada vez más adquirimos ropa a través de internet y tenemos las facilidades de hacerlo con un solo click a través del móvil o de la tablet, ¿cómo no buscar diseños de creadores de prendas en el entorno digital?
Cuando el diseñador japonés Tomo Koizumi empezó a publicar sus creaciones en un perfil de Instagram, no sabía que estaba activando el resorte que le llevaría directo a la Semana de la Moda de Nueva York.
Pero gracias a sus publicaciones, un vestido logró despertar el interés de Katie Grand, estilista y editora de LOVE, y la propuesta se materializó a través de las redes.
“[Grand] me envió un mensaje directo y empezamos a hablar”, explica en una entrevista a Vogue y añade: “Ella dijo, ¿qué tal un desfile?”. Con un mes de tiempo como margen, Koizumi preparó todo lo necesario para que sus diseños tuviesen hueco en la prestigiosa pasarela sin saber que modelos como Bella Hadid lucirían sus vestidos en la tienda de Marc Jacobs ubicada en la neoyorkina Madison Avenue.
Obviamente, la cuenta de Instagram de Tomo Koizumi ha pasado de lograr un par de centenares de likes en cada publicación a conseguir miles y a tener casi 60.000 followers. Historias como esta no son habituales, claro, pero evidencian que Instagram se ha convertido en una plataforma muy poderosa para la promoción de los talentos emergentes.
Así lo explica la directora de compras de Net-A-Porter, Elizabeth von der Goltz, en declaraciones a Vogue España: “Lo usamos para buscar nuevas marcas, incluyendo Attico, Staud y Alanui [en el último par de años]. Cuando haces clic en el perfil de una marca y ves que tienen menos de 100 seguidores, tienes esa emocionante sensación de descubrimiento”.
Cuando estás iniciándote en un sector profesional en el que no eres conocido, cualquier ayuda es de agradecer. Y si quien te echa una mano es un personaje famoso, has triunfado.
Que un artista o personaje público luzca un diseño en una gala, una presentación o una actuación es, sin duda, el empujón con el que todo diseñador de moda sueña. Y sino, que se lo digan a A Sai Ta, un joven británico que ha seducido a la mismísima Rosalía con una de sus creaciones: un bolso.
Tal y como podemos ver en la fotografía, Rosalía posa con el complemento de color blanco que lleva un estampado de serpiente de color azul (y que además combina a la perfección con las sandalias que lleva puestas). Es cierto que el creador ya había hecho sus pinitos en el mundo de la moda con la colección que presentó en su graduación en la escuela Central Saint Martins en el año 2014.
De hecho, aquel reconocimiento le sirvió para encargarse durante un pequeño periodo de la línea femenina de Yeezy, la marca del rapero Kanye West. Pero sin duda, que Rosalía haya lucido una de sus creaciones en el momento en que es una de las mayores estrellas internacionales del momento, es un impulso de lo más destacable.
Otra artista que también apoya a los diseñadores emergentes es Bad Gyal. La catalana, un referente en el género urbano de nuestro país, usó prendas de Lye Lysianne en el rodaje del videoclip Internationally.
Marta Royo, una española trasladada a Londres, es la diseñadora que se encuentra tras esta firma de moda. Su cuenta de Instagram no llega a los 2.000 seguidores pero el vídeo musical de Bad Gyal supera las 2,7 millones de reproducciones. ¡Casi nada!
Los casos en los que un diseñador novel logra hacerse famoso a través de las redes sociales, ya sea Instagram, Pinterest o Facebook, no son muy comunes. Pero lo que sí es más habitual es que todos aquellos que quieren sumergirse en el mundo de la moda se apoyen en estas herramientas para dar a conocer su trabajo.
Ese es el caso de Loana Clowe, una joven uruguaya de 24 años que hace doce llegó a Palma de Mallorca, y que ahora acumula seguidores interesados en sus diseños. Aunque su negocio empezó, prácticamente, por casualidad.
“La primera persona que se interesó por una de mis prendas fue porque me la vio puesta en una discoteca. Me preguntó dónde la había comprado y le dije que la había hecho yo. Quiso saber si podría venderle una y, un poco aturdida, le dije que sí. Ahí empezó todo”, nos explica.
Desde ese momento, sus diseños, tanto de ropa como de lencería y chockers, se han hecho más que conocidos en la isla donde vive. “El boca a boca, sumado a Instagram, me ha ayudado muchísimo.
Tras aquel primer encargo empecé a recibir más pedidos de personas que le habían visto puesto algo mío a otra persona, y así he llegado hasta hoy”, comenta pocos días después de haber inaugurado su tienda online, Clowe Designs.
Loana lleva toda la vida viendo a su abuela coser. Su inquietud artística la llevó a estudiar Diseño de Moda pero lo dejó a medias porque no acababa de sentirse a gusto.
Y a pesar de los elogios que recibía tanto de compañeros como de profesores, prefirió buscar su camino por otra lado hasta que la moda volvió a ella de la forma más inesperada.
Si hay algo que caracteriza a los diseños de Clowe Designs es que todo está hecho a mano. El trabajo es laborioso pero se cuida hasta el más mínimo detalle. Los pedidos llegan a casa en la fecha acordada por Loana, y se acompañan de un delicado envoltorio que representa la sensibilidad con la que esta chica trabaja en sus diseños.
Además del boca-oreja, otro de los empujones que han hecho que Loana pueda empezar a vivir de sus creaciones es que Amarna Miller, ex actriz de cine para adultos y activista en defensa de los derechos de las trabajadores sexuales, haya lucido algunos de sus diseños.
“Una amiga en común le mostró mi perfil de Instagram y a través de mensajes privados acordamos hacer una colaboración. El vestido de terciopelo con el que posó en su cuenta es el modelo que más vendo”, revela la diseñadora.
La fórmula del éxito es algo que se desconoce a ciencia cierta pero en el escenario actual en el que nos encontramos, todo pasa por vendernos. ¿Y qué mejor lugar para hacerlo que las redes sociales? Además, dichas plataformas no sólo sirven para promocionar objetos sino también para concienciar a las personas.
Con relación al mundo de la moda, hay que destacar el proyecto Slow Fashion Next, fundado por Gema Gómez y que se encarga de promover la sostenibilidad dentro de la industria textil (la segunda más contaminante del mundo).
Otro caso que nos encanta es el de Timpers, una marca de zapatillas diseñadas por ciegos, hecha en nuestro país y con modelos de máxima tendencia, que podrás encontrar en Instagram. Una opción que sin duda has de tener en cuenta si te gusta vestir a la moda y, también, vestir con sentido.
Si quieres saber más acerca de sus proyectos de divulgación, su forma de trabajar y los cursos que ofrecen (tanto presenciales como online), no dejes de darte una vuelta por su perfil Instagram. ¡Seguro que te impresiona!
