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¿Utilizas el ordenador solo para navegar por Internet, mirar las redes sociales y comerte unos cuantos vídeos de YouTube al día? Entonces lo más seguro es que te interese comprar un Chromebook, la alternativa optimizada de Google para el mundo del PC.
En el mercado te va a costar diferenciarlos de los portátiles normales porque tienen el mismo diseño y dimensiones parecidas. Lo que pasa es que por dentro son completamente distintos. Y eso tiene una explicación muy sencilla que se remonta a una década atrás.
Hoy te queremos poner un poco de contexto para que entiendas qué es un Chromebook, para qué sirve, y por supuesto, cuáles son los modelos más interesantes a comprar este año. Si nunca has oído hablar de ellos, toma nota porque vas a flipar.
Corría el verano de 2009. En apenas 9 meses Google Chrome había conseguido más de 30 millones de usuarios diarios y los desarrolladores sabían que debían ir un paso más allá, y convertir la filosofía del navegador en un sistema operativo.
La idea era simplificar la experiencia digital hasta el extremo, para que un mismo software se encargara de las tareas más básicas diarias. Nada de programas, edición o cosas exigentes; solo música, vídeo y redes sociales. Ahí estaba Chrome OS (Google Chrome Operating System).
"Es un SO ligero open source que inicialmente se destinará a los netbooks", explicaban en su blog. "A finales de este año abriremos su código, y los netbooks con Google Chrome OS estarán disponibles en la segunda mitad de 2010". Dicho y hecho.
El Google I/O de 2011 acogía el anuncio de los primeros Chromebooks. Se vendían como ordenadores portátiles para usuarios básicos. Es decir, equipos mucho más baratos pero igual de útiles en el día a día. ¿Tablets sin ser tablets? Hay quienes los ven así.
En junio de ese mismo año comenzaron a llegar al mercado los primeros modelos de Acer y Samsung. Poco a poco se irían sumando Sony, Dell, Lenovo y el resto de marcas. Hasta Google lanzaría su propio modelo en 2013: Chromebook Pixel.
Surgieron las diferentes gamas, mejoraron las prestaciones, y eso sí, se mantuvieron los precios. La fiebre del Chromebook se esfumó hace un par de años, pero la pandemia y todo lo que ha venido después los ha vuelto a poner en el centro de la diana.
Hay una cosa supermegaimportante que hay que aclarar antes de comprar un Chromebook: estos portátiles no aceptan aplicaciones de Windows. Ojito con esto, porque es mucho más relevante de lo que pueda parecer.
Que Chrome OS sea de código abierto no significa que sea compatible con todos los programas. Esto implica que todas las empresas pueden desarrollar apps para el SO, pero no al revés. Vamos, que te olvides de uno de estos si necesitas, por ejemplo, trabajar con él.
El Chromebook vale para lo que vale: navegar por Internet, ver vídeos de YouTube, utilizar las apps que ya conoces de la Play Store, y utilizar los distintos servicios de Google: Maps, Gmail, etc.
Puede parecer un punto muy negativo, pero gracias a esto se consiguen dos cosas: abaratar el precio del portátil hasta la franja de los 300-500 euros y mejorar el rendimiento ejecutando programas.
Así pues, lo que debes tener en cuenta a la hora de comprar un Chromebook es lo mismo que ya conoces de un PC, pero rebajando las expectativas de cara al uso que le vas a dar (incluso más básico que el de una tablet):
Dicho todo esto, vamos a ver qué Chromebook comprar este año. ¿Cuáles son los mejores portátiles Chromebook? Te seleccionamos los que a nosotros nos parecen más interesantes.
Para muchos es el mejor Chromebook de 2021. La marca da en el clavo con el Lenovo IdeaPad Duet Chromebook, un ordenador portátil que presume de tener una pantalla IPS de 10,1 pulgadas con resolución FullHD, una batería con hasta 10 horas de autonomía y el solvente procesador MediaTek Helio P60 T trabajando a 2GHz con 4GB de RAM respaldando. Sus 128GB de almacenamiento dan para rato y sus menos de 600 gramos de peso le dan flexibilidad. El teclado, eso sí, requiere adaptación porque es muy compacto.
No es el Chromebook de gama más alta de la marca, pero sí el que ofrece mejor relación calidad-precio. Si quieres lo más top te puedes ir a por el Z7400FF-E10109, aunque el presupuesto se disparará por encima de los 1000 euros. Y si quieres algo más potente, siempre puedes optar por el Z1500CN-EJ0400 (sin pantalla táctil). ¿Nuestra recomendación? Este ASUS Chromebook Flip Z3400FT-AJ0111, con pantalla de 14 pulgadas y resolución FullHD, procesador Intel Core m3-8100Y, RAM de 8GB, almacenamiento de 64 GB y batería de 7-10 horas de autonomía. Pesa menos de 2 kg.
Para nosotros es el más equilibrado de la gama por encima del barato 311 y por debajo del premium (pero carete) 711. El Acer Chromebook Spin 514 tiene todo lo que necesitas para usarlo con soltura y comodidad en la universidad: pantalla de 14 pulgadas con FullHD, procesador Athlon N3050C, de 4 a 8GB de RAM, 64GB de almacenamiento interno y 12 horas de autonomía con su batería en modo reposo. Estas especificaciones se acogen a un diseño futurista y menos de 2,5 kg de peso.
La marca coreana dice que esta versión está pensada para empresas y autónomos, aunque según lo vemos nosotros, también es bastante interesante para un entorno educativo algo exigente (universidad y por encima). Samsung Chrombook 4+ presenta lo mejorcito de la familia hasta la fecha en este mercado: Procesador Intel N4000 (1.10 GHz - 2.60 GHz 4 MB L2 Cache) en pantalla FHD LED de 15,6 pulgadas, 6GB de RAM y 64 GB de almacenamiento. Destaca por su touchpad de casi 6 pulgadas (mucho más que la media).
Es el Chromebook de apariencia más aparatosa de toda la lista. Ojo, porque tras esa carcasa de portátil tradicional se esconde un modelo más que apto para desenvolverse en el trabajo y la universidad. Mucho cuidado con elegir tu HP Chromebook 14B, porque hay terminaciones distintas. Nosotros nos referimos al na0004ns, que viene con pantalla de 14 pulgadas Full HD, el procesador Ryzen 3-3250C de AMD, una RAM de 8GB y almacenamiento de hasta 128GB. Destaca por llevar equipada la famosa tarjeta gráfica AMD Radeon Integrated Grpahics.
Deja de sufrir por los más de 1000 euros que cuesta flexear en clase con un Mac, y déjate seducir por la relación calidad-precio del chromebook. A la hora de comprar uno recuerda que no tiene por qué cubrirte todas y cada una de las necesidades diarias. Piensa solo en clase o el trabajo y acertarás.💥💥💥
