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Instagram es la red social del postureo absoluto. Tanto compartir que al final acabas sabiendo más de la vida de otros que de la tuya propia. Pero ¿qué pasa si quieres tener un poco de intimidad?
Por defecto cuando te creas una nueva cuenta en Instagram esta se configura como pública. Así cualquier persona que esté en la aplicación puede ver el contenido que subas a la plataforma.
Por eso, si pretendes que lo vea solo tu círculo cercano, mejor configúrala como privada. De esta manera, a menos que aceptes su solicitud de seguimiento, no podrán acceder a tus fotos o vídeos del perfil.
Ten en cuenta que si tu perfil está destinado para empresas, no podrás convertirla en privada. Para eso tendrás que configurarla como personal. Aunque no te lo recomendamos porque las métricas de Instagram siempre vienen bien.
Dicho esto, ¿cómo se configura la cuenta privada de Instagram? La cosa es bastante sencilla si sabes moverte por los ajustes tanto de la app como de la versión web. A cotillear. 👀
Si aún tienes dudas acerca de mantener tu cuenta como pública o configurarla como privada aquí te dejamos una breve explicación.
Con la cuenta configurada como privada solo podrán ver quienes tú aceptes el contenido que publicas. Tanto en stories, como en el feed o cualquiera de los otros formatos de Instagram.
¿Qué pasa si utilizas un hashtag muy popular? Pues bien, nadie podrá verlo a menos que te siga —con tu previa aprobación—. Lo mismo pasa con la ubicación; no todos los que pinchen en ese lugar te verán, solo tus seguidores.
Si es la cuenta es pública, tanto tu perfil como las publicaciones serán visibles para todos los usuarios. Podrán verlas incluso sin tener cuenta en Instagram. Vamos, al desnudo completamente.
Instagram solicita que indiques tu edad al registrarte, por lo que si eres menor de edad, aunque tengas la opción de elegir entre perfil privado y público, de forma predeterminada se configura como privada.
Meta siempre pone las cosas fáciles y más cuando hablamos de cosas de privacidad. Por eso poner la cuenta privada de Instagram es casi tan sencillo como crearse un perfil o darle like a una publicación.
Abre la app y toca tu foto de perfil que aparece en la parte inferior derecha y luego vete a la esquina superior derecha para entrar en Configuración. Hasta aquí ninguna novedad porque lo hemos hecho ya mil veces.
Dentro de la lista de opciones que te ofrece, busca la de "Privacidad" y dentro quédate con lo primerito que veas: "Cuenta privada". Basta con tocar el switch para cambiar por completo la visibilidad de la cuenta y sus políticas de privacidad.
Cómo poner la cuenta privada de Instagram desde el ordenador
¿No tienes un móvil a mano? Aunque la versión de escritorio está capada en bastantes cosas, este no es el caso. Si prefieres quieres poner la cuenta privada de Instagram, ya sabes: abre la página web e inicia sesión.
Una vez dentro haz clic en tu foto, que en este caso está colocada en la parte superior derecha. Ahí entra en "Configuración" para repetir el proceso que hemos explicado más arriba.
Cuando veas tu perfil busca la parte de configuración y presiona el botón de Privacidad y Seguridad; es el homólogo al de la aplicación, solo que con las opciones incluidas en el escritorio (no todas).
Por último, haz clic para marcar la casilla que está situada junto a "Cuenta privada". Ten en cuenta que los cambios que apliques en esta versión se verán reflejados al instante en móvil.
Si no tienes Instagram instalado en tu dispositivo móvil puedes hacer un mix y cambiar la privacidad desde la web en Chrome, Safari o el buscador que utilices usualmente.
Toca la foto de perfil que sale en la parte inferior derecha y accederás a tu perfil. Ahora busca "Configuración" (está en la parte superior izquierda). Presiona "Privacidad y seguridad" y marca la casilla que está al lado de "Cuenta Privada".
Todos los usuarios pueden ver tus publicaciones privadas si las compartes en redes sociales. En esos casos deberás configurar la privacidad de esas redes. Si al subirla la compartes en Twitter también por ejemplo, se verá si tu perfil no es privado.
Ahora que tienes la cuenta solo visible para quien tú quieras, cada vez que alguien nuevo quiera seguirte deberá enviarte una solicitud de seguimiento para ver tus publicaciones, tu lista de seguidores y a quién sigues.
Ahora que ya sabes cómo tener una cuenta privada en Instagram te vamos a explicar cómo aceptar a la gente que quiere seguirte (y tú quieres que te siga, claro).
Para aprobar o rechazar una solicitud de seguimiento debes abrir la app e irte de cabeza al apartado "Actividad". Este es común en todas las versiones de Instagram, así que no te preocupes.
Dentro ya solo queda confirmar o eliminar para aprobar o rechazar la petición. Ten en cuenta que si rechazas una solicitud tendrás que pedirle a la persona que te la vuelva a enviar.
Antes de cambiar tu cuenta, si tienes seguidores piensa si quieres que continúen ahí o por el contrario los quieres eliminar. Puedes "echarlos" de tu cuenta sin que se enteren entrando en su perfil y seleccionando "Eliminar seguidor".
Te decimos esto porque cuando configuras tus publicaciones como privadas los seguidores que tenías antes de hacerlo mantienen el acceso a tus fotos y vídeos. Así que toca reconsiderar quién quieres que te cotillee y quién no.
Ahora que ya sabes cómo poner tu cuenta privada de Instagram, una advertencia: esto es un arma de doble filo. Perderás engagement, poder social e interacciones. Claro que la privacidad a veces es más importante que todo eso. Las redes siempre con 🔒.
