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Si eres de los que le ha pedido a un amigo o a su comunidad de Twitter, que le pase esos vídeos filtrados que han sido un boom esta semana, o si los has enviado tú, que sepas que un solo clic puede arruinarte la vida, ya que la difusión de contenidos sexuales y/o violentos vía Internet es un delito sujeto al código penal.
La Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) ha presentado esta semana la campaña "Un solo clic puede arruinarte la vida", dando continuidad a su lucha por un Internet más seguro y con la intención de dejar muy claro que cuando difundes un contenido (fotos o vídeos, principalmente) de contenido sexual o violento, te haces más daño a ti mismo que el que piensas que puedes hacerle a quienes aparecen en el vídeo.
"¿Y esto cómo puede ser?"
Fácil, porque dar like, tuitear, buscar, comprar o compartir imágenes, audios, vídeos o comentarios de carácter sexual o violento es un delito descrito en el código penal y te puede meter en un buen lío que te deje con antecedentes penales para toda la vida.
Actualmente, según el Instituto Nacional de Estadística (INE) se estima que más del 90% de la población con edades entre 16 y 74 años, se conecta a Internet de forma frecuente -y tanto, sobre todo estos últimos meses- y de tooooodos los que usamos Internet, casi el 65% interactúa con redes sociales como Instagram, Facebook, Twitter o YouTube.
Esto se convierte en el escenario perfecto para que veamos, aunque en principio sea accidentalmente, algún contenido violento o sexual y tengamos la tentación de compartirlo.
Sobra decir que compartir estas cosas, aunque a veces en algún grupo de Whatsapp o red social o foro pueda parecer divertido y que se hace "de cachondeo", no es una broma ni es mero "salseo". Si recibes material así, elimínalo y pide que no te lo envíen más.
"Ya, pero es que todos lo hacen y no quiero ser el aguafiestas..."
Que lo hagan muchos, no lo hace legal. De hecho, precisamente la normalización de estas prácticas es lo que ha llamado la atención de las autoridades y ha generado la necesidad de crear campañas como la de "Un solo clic puede arruinarte la vida". La frase, por cierto, es genial porque es muy fácil que se te quede grabada a fuego para que no metas la pata.
Muchas personas deciden de común acuerdo hacer una grabación de carácter más íntimo y darle un uso dentro del ámbito privado. Si es tu caso, que sepas que siempre puedes hacer valer tus derechos y que puedes cambiar de opinión si quieres que un vídeo de esas características no siga existiendo. El consentimiento siempre es revocable.
Tienes derechos como la intimidad y el derecho al olvido y, por encima de eso, si un material en el que aparece tu imagen, tu voz o formas concretas para identificarte, se difunde sin tu permiso, puedes tomar acciones legales para protegerte.
La AEPD tiene un servicio de denuncia para comunicar cuando un contenido sexual o violento se difunde sin permiso de sus participantes. Seas o no quien aparece en el contenido, puedes denunciar su existencia y pedir su retirada a través del Canal Prioritario, que existe específicamente para dar prioridad a estos casos.
A día de hoy, más del 85% de las denuncias que recibe la AEPD con relación a la retirada de contenidos violentos o sexuales tiene éxito y estos materiales desaparecen en un lapso breve.
Internet te da poder, ¡úsalo para hacer cosas buenas! Participa activamente en el Pacto Digital para la Protección de las Personas. Como ciudadano, puedes ayudar a velar porque Internet sea más seguro para todos.
Piensa que casi el 60% de las niñas y adolescentes sufren algún tipo de ciberacoso y que tú puedes ayudar a detener esta violencia digital haciendo lo siguiente:
Por eso, siempre que veas que algo violento o sexual, como está pasando desde hace varios días con los vídeos filtrados de un programa de televisión, empieza a correr como la pólvora, no lo dudes y actúa para cambiar esos mensajes por otros que no hagan daño a nadie. Te explicamos cómo:
Como ves, ayudar a cambiar el mundo es muy fácil cuando eres consciente de lo que está bien y lo que no. Recuerda que en Internet todos estamos expuestos en cierta medida y que esas personas que aparecen en esos contenidos tienen padres, hijos, amigos, son gente como tú y como todos, así que no lo dudes y échales una mano. A ti te gustaría que entre todos te ayúdasemos.
