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En el año 2020 ya no se entiende un mundo sin tecnologías. Diversos dispositivos llevan años colándose en nuestra vida diaria de manera que no concebimos estar sin ellos. Y es que hay que decirlo: los avances tecnológicos nos han mejorado la vida.
Y ese es, precisamente, uno de nuestros mayores problemas. La superpoblación es una realidad, y todo el mundo quiere vivir una vida con la mayor comodidad posible. Cuanto más se desarrollan dispositivos y gadgets, mayor es la contaminación del planeta, algo que, obviamente, pone en riesgo nuestra supervivencia.
Por suerte, la conciencia por proteger el medio ambiente comenzó a despertarse hace unos años y parece que ahora vive uno de sus grandes momentos. Los jóvenes del mundo están más que convencidos de luchar por proteger el planeta, pero no solo eso. Los desarrolladores también llevan tiempo trabajando para crear aparatos tecnológicos que sean respetuosos con el medio y que nos ayuden a preservar en precioso lugar en el que vivimos.
Llevamos años oyendo hablar de términos como polución, residuos, contaminación ambiental, etc. pero pocas veces se habla de datos concretos que nos hagan abrir los ojos y ser realistas ante lo que pasa: nos estamos cargando el planeta y a la especie humana.
Hace 100 años se llevaron a cabo unas investigaciones a nivel mundial para analizar los compuestos químicos y sustancias diversas que había en el cuerpo de las personas. Pues bien, esos estudios realizados a día de hoy demuestran que albergamos entre 300 y 500 compuestos químicos que antes no había en nuestro cuerpo.
Por países, China es, sin duda, el más contaminante, siendo responsable de un total del 28,1% de las emisiones de dióxido de carbono. No obstante, podemos afirmar que Estados Unidos es el país que más contamina ya que, con un 5% de la población mundial, es responsable de un 30% de toda la basura del mundo. Y hay más.
Tal y como revela el último informe del Fondo de la Naciones Unidas para la infancia (UNICEF), para los niños, el agua contaminada en Asia es tres veces más peligrosa que la guerra. Entre los años 2014 y 2016, UNICEF reportó 85.000 muertes infantiles por diarreas relacionadas con la poca disponibilidad de agua potable. Pero la amenaza no está solo ahí sino también en el aire.
La contaminación del aire en Bombay, por ejemplo, es tal que respirar allí un día equivale a fumarse 100 cigarrillos. En realidad, todos estamos afectados ya que una de cada ocho muertes que se producen en el mundo tiene que ver con la contaminación del aire.
Por suerte ya hay avances tecnológicos que nos permiten reducir este impacto de la industria sobre el planeta. ¿Has oído hablar de la fotocatálisis? Se trata de un proceso que elimina las sustancias nocivas de la atmósfera, como el óxido de nitrógeno o los compuestos orgánicos volátiles, por medio de un proceso de oxidación que se lleva a cabo con la energía solar. Para multiplicar su eficacia, se debe realizar en la superficie de un catalizador o sustrato, es decir, un material semiconductor que acelera la velocidad de reacción.
La fotocatálisis no solo puede mejorar la calidad del aire que respiramos sino que además elimina los agentes contaminantes de las ciudades. En la actualidad ya se usan pinturas, mobiliario urbano y hasta las envolturas del pavimento, las fachadas y las cubiertas elaborados con materiales fotocatalíticos.
Sin ir más lejos, la Gran Vía de Madrid ya cuenta con diversos edificios revestidos con pintura fotocatalítica. Por su parte, el Ayuntamiento de Barcelona pone como requisito básico que las nuevas construcciones que se hagan en la ciudad cuenten con este tipo de materiales.
La tecnología nos brinda la posibilidad de vivir rodeados de comodidades pero esto no siempre tiene que ir de la mano de un aumento de la contaminación. La empresa LG ha diseñado un invernadero inteligente que se ha presentado en el CES 2020 y que ayudará a que las personas se alimenten de forma saludable desde casa y protegiendo el medio ambiente.
“Cada vez son más los usuarios que se preocupan por su alimentación y deciden tener un ritmo de vida equilibrado siempre ayudando al planeta y cuidando el medio ambiente. Nuestra primera solución en invernaderos inteligentes representa un nuevo modelo de electrodomésticos para LG y una nueva forma de disfrutar de la cocina para el usuario”, explicó Song Dae-hyun, presidente de la división de Home Applience & Air Solution de LG Electronics a través de un comunicado.
De esta manera, los propietarios tendrán 24 maceteros que se ubicarán en un costado de la nevera. El invernadero dispondrá de un sistema de luz, de control de temperatura y agua y de unos módulos flexibles que podrán reproducir las mejores condiciones para que crezcan las frutas y verduras. Al comprar el electrodoméstico se incluirán semillas, fertilizante y todo lo que se precisa para plantar un huerto en casa. De hecho, los paquetes iniciales del invernadero de LG contarán con 20 variedades de vegetales, entre los que encontraremos albahaca o rúcula.
Esta forma de cultivar nuestros propios vegetales y frutos en casa no solo aboga por la comodidad y el ahorro económico, sino que supone un gran paso para la protección del medio ambiente. Adiós a los pesticidas y al uso de químicos, entre otras muchas cosas nocivas para el planeta, de las grandes plantaciones.
Quienes superen la treintena recordarán que hubo un tiempo en que los contenedores de colores no estaban en todas las esquinas de las ciudades y en que los cubos de basura domésticos tan solo tenían un compartimento para desechar los residuos. La concienciación sobre el reciclaje ha sido un trabajo intenso que ha ido calando poco a poco en todos, y que a día de hoy forma parte de nuestro día a día.
Pues bien, las novedades tecnológicas nos presentan a un robot que se va a convertir en el máster del universo del reciclaje. Se llama ROCycle y ha sido desarrollado por los Investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT). ¿Cuál es su punto fuerte? Que distingue los residuos él solito.
El robot ROCycle ha sido desarrollado por el Computer Science and Artificial Intelligence Lab (CSAIL) del MIT. Se trata de una máquina capaz de distinguir entre papel, metal y plástico. De esta manera, se consigue que los trabajadores no tengan que estar clasificando a mano la basura que pasa por las cintas transportadoras, lo que supone un aumento de productividad y una mejora en las condiciones de los trabajadores. Además, con ROCycle se podrá optimizar el proceso de reciclaje y acelerar la descomposición de los deshechos en favor de nuestro medio ambiente.
Existen infinidad de avances tecnológicos que cuidan el medio ambiente, como hemos podido comprobar. Pero otra gran idea es la de aprovechar los gadgets con los que ya contamos para hacer algo en pro de la naturaleza y ayudar a protegerla. ¿Has oído hablar de los drones que reforestan?
CO2 Revolution es la startup que lucha contra la deforestación y el cambio climático a través del big data, el uso de semillas inteligentes y los drones. Estos dispositivos las lanzan de manera que pueden reforestar cinco hectáreas en tan solo 10 minutos.
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