Las mejores frases del cine para sobrellevar un confinamiento de película
24 Abril 2020 - Actualizado 07 Julio 2021
Además de para poder rescatar, oportunamente, las ficciones más letales sobre virus y pandemias, y también las más atinadas en sus proféticas visiones, el cine sigue y seguirá siendo un excelente compañero para acompañarnos en esta rutina confinada y poder asomarnos con más optimismo a las ventanas y balcones de esta realidad propia de una película made in Hollywood.
Porque no todo van a ser revisiones del Contagio que Steven Soderbergh propagó en pantalla grande, y que está a punto de cumplir el décimo aniversario desde su estreno, ni de ese Estallido que protagonizaron, entre muchos otros, Dustin Hoffman, Rene Russo, Morgan Freeman y Kevin Spacey hace ya 25 años, y en la que un mono le roba el papel de villano de la función al pangolín.
Con el permiso del Dúo Dinámico, el séptimo arte nos quiere ayudar a seguir resistiendo rescatando los momentos más inspirados de sus protagonistas: expertos y más que experimentados en enfrentarse y afrontar innumerables batallas, caerse para volver a levantarse las veces que hagan falta... y con tantas ganas de tirar para adelante que, muchos de ellos, se crecen y expanden con sus correspondientes y respectivas secuelas, sagas y franquicias.
Como les diría Harry Callahan, AKA el Sucio (Clint Eastwood), a una panda de malhechores a los que se enfrenta en Impacto Súbito (1983), para terminar de caldear el ambiente y pasar a la acción: “Go ahead, make my day”. O lo que es lo mismo, “Alégrame el día”. Vamos a por ello.
“Teléfono. Mi casa”. Las pocas palabras que llegó a pronunciar E.T., el extraterrestre, en la cinta homónima de 1982 dirigida por Steven Spielberg se han convertido en la consigna y escudo vital de nuestro día a día. ¿Quién nos iba a decir que el marciano más inofensivo de la galaxia cinematográfica se acabaría convirtiendo en todo un Nostradamus vaticinando, desde nuestra infancia, los dos pilares en los que a día de hoy estaríamos construyendo nuestra rutina de encierro?
Aquellos sin más compañía física que la suya propia, cada vez se sentirán más identificados con Tom Hanks en Náufrago. A estas alturas, estarán muy cerca de crear su propia versión del señor Wilson, con el que poder convertir sus monólogos en una conversación, y es más que probable que muchos, solos y acompañados, ya se hayan transformado en una versión 2.0 del balón de voley, coprotagonista de la película de Robert Zemeckis, gracias al oportuno y correspondiente filtro de Stories en Instagram “Wilson”.
Aunque haya días en los que nuestra isla se nos quede pequeña, hoy más que nunca... “There’s no place like home”. Ya lo advertía Judy Garland en El mago de Oz (1939), “Se está mejor en casa que en ningún sitio”. Nada como recurrir al descubrimiento de la aventurera Dorothy, quien tras su escapadita a ese lugar Over the rainbow solo deseaba volver a sentir el calor de su hogar y abrazar ese “Quédate en casa”.
Y si, por el contrario, ya lo tienes interiorizado y lo que necesitas es dar una vuelta: el clásico de Victor Fleming es pura fantasía para tus ojos ávidos de nuevos escenarios con lo que aderezar de colores y brillantina tu propio reino.
El libro de autoayuda cinematográfico es más que ideal para aquellos Robinson Crusoe que no tengan más remedio que entonar el Me, myself and I de Beyoncé. Protagonistas únicos y absolutos de esta trama que estamos viviendo, sin personajes secundarios o extras a su alrededor, llegará el día en el que ante la imagen de su propio reflejo en el espejo, gratamente sorprendidos, responderán a ese nuevo y bienvenido inquilino con aquella frase tan icónica pronunciada por Travis Bickle/Robert De Niro en Taxi Driver: “You talkin’ to me?”.
Tira de la disciplina del Señor Miyagi (Karate Kid) o del legendario maestro Pai Mei (Kill Bill Vol.1 y Vol.2) para ejercitar tanto el cuerpo como la mente. Porque tu cabeza pensante puede marcar la diferencia: “An idea is like a virus. Resilient. Highly contagious. Once an idea has taken hold of the brain it’s almost impossible to eradicate. An idea that is fully formed - fully understood - that sticks; right in there somewhere”. ¿El parásito más resistente? Las ideas. Este es un consejo de todo un experto en la arquitectura de nuestra mente: Dom Cobb (Leonardo DiCaprio), también conocido como El extractor, en la inmersiva Origen de Christopher Nolan.
De todas formas, si por momentos patinas con tus pensamientos, no te preocupes: a veces es necesario e incluso más sano perder un poco la cordura para terminar volviendo a nuestro eje y reencontrarnos con nuestra esencia más pura y genuina, con lo que realmente (nos) importa. Palabrita de alguien con muchos pájaros en la cabeza a la que, y pese a todo..., nunca le termina yendo nada mal: “Sometimes the only way to stay sane is to go a little crazy”, asegura Harley Quinn. “So, what if I’m crazy? The best people are”.
Un personaje que al fin y al cabo es tan ordinario y común como todos nosotros y que, faltaría más, también practica este ejercicio rutinario que ahora se ha convertido en nuestra aventura más extraordinaria de la semana:
Ni tanto ni tan poco. Ni blanco ni negro. Es un buen momento para reflexionar y desacelerar ese ritmo frenético que hasta hace unas semanas nos tenía de aquí para allí. Proyéctate en un mañana en el que el punto medio es la virtud y vacía el peso de tu mochila aplicando uno de los tips del excéntrico mago Newt Scamander (Animales fantásticos y dónde encontrarlos): “Worrying means you suffer twice”.
Raciona tus visitas a la nevera y no lleves al extremo esa promesa de Scarlett O’Hara, rábano en mano, que ponía a Dios por testigo que su barriga nunca volvería a emitir ningún ruido a falta de aperitivos que llevarse a la boca. Planifica tu jornada, más o menos y sin llegar a convertirte en ese Bill Murray Atrapado en el tiempo por el Día de la Marmota, porque, ya lo hemos comprobado, que la vida siempre nos puede sorprender.
Los hay que, precisamente, centran su estrategia en no planificar nada en absoluto, dejandomargen para la improvisación, algo que, sin el debido control, se te puede ir de las manos, como a uno de los miembros del clan de ese fenómeno social llamado Parásitos. Papá Kim Ki-taek promete que: “You know what kind of plan never fails? No plan at all. No plan. You know why? If you make a plan, life never works out that way”.
Y si pese a todos estos bálsamos que nos regala el séptimo arte, acabas teniendo un mal día y no logras alcanzar ningún rayo de luz desde tu ventana, no desesperes: “After all, tomorrow is another day!”.
Recuerda que, tal y como sentenciaba hace ya más de 60 años el genial Billy Wilder en Con faldas y a lo loco: “Well, nobody’s perfect”.
We can be heroes
Si el propio Batman nos aseguraba en El Caballero Oscuro: La leyenda renace que “cualquiera pueda ser un héroe, incluso un hombre que hace algo tan sencillo y reconfortante como ponerle un abrigo en los hombros a un niño para hacerle saber que la vida sigue”, habrá que hacerle caso. Porque nadie como este caballero oscuro sabe tanto sobre el confinamiento y aislamiento: siendo uno de los superhéroes con más capacidad para caerse y volver a levantarse, y con fuerza de sobra para renovarse tantas veces como haga falta emergiendo de la penumbra de una (bati)cueva.
Encuentra tu superpoderalentado por esos optimistas e incansables del panorama cinematográfico que no decaen ante ningún contratiempo: desde el “Just keep swimming” de Buscando a Nemo hasta el “I’ll be back” de Terminator, pasando por el “Keep moving forward” de Rocky Balboa. Y cuando los ánimos flaqueen, abraza esa fuerza que siempre acompaña y ha arropado durante décadas al universo de Star Wars.
Y es que la felicidad también la podemos encontrar en los tiempos más oscuros. No te olvides de esta lección del docto en trucos y hechizos el profesor Albus Dumbledore: “Happiness can be found, even in the darkest of time, if one only remenbers to turn on the light” (Harry Potter y el prisionero de Azkaban).
Tal y como defiende una de las guerrera más populares de la gran pantalla: “Solo el amor podrá salvar el mundo”. Toma nota de estas palabras y tenlas presente día a día mientras esperamos el reencuentro con Diana Prince en la gran pantalla con su comeback vía Wonder Woman 1984.
Pero no solo los superhéroes cuentan con su decálogo para avivar nuestra capacidad de resiliencia. Elijah Price, un devorador de cómics también conocido como Glass, por la fragilidad de sus huesos, y el antihéroe enfrentado a Bruce Willis, en la realidad alternativa de M. Night Shyamalan, sabe que tanto creer en uno mismo como la suma de todos nosotros son dos de los poderes más determinantes para alcanzar con éxito la última viñeta de esta edición especial “Cuarentena”: “If everyone sees what just a few people become when they wholly embrace their gifts, others will awaken. Belief in oneself is contagious”.
A la espera de recibir noticias cada vez más optimistas, aprovecha este intermedio vital para decidir qué es lo que quieres hacer con el tiempo que se te ha dado y, en definitiva, con el resto de tus días. A Frodo Bolsón le funcionó esta reflexión de Gandalf cuando, hecho un lío por una encrucijada no menos peliaguda, apenas sabía qué camino tomar.
Es en estos momentos, después de este plot twist, cuando la esperanza deja de ser un concepto abstracto, y una palabra que no podría faltar en cualquier texto que se precie sobre la cuarentena, para pasar a convertirse en algo tangible, y sin riesgo de contagio. Leia Organa (Carrie Fisher) tiene las claves y te lo pone en bandeja: “Hope is like the sun. If you only believe in it when you can see it, you’ll never make it through the night” (Star Wars: Los últimos Jedi).
Todo va a mejorar. Porque de entre todas las patrullas y equipos habidas y por haber, nosotros contamos con la liga más numerosa y extraordinaria. Sin duda, seríamos la envidia del headhunter marveliano Nick Fury, y de cualquier superhéroe. Como bien saben Black Panther y todos y cada uno de los habitantes de Wakanda, no existe vacuna más efectiva que la suma de todos: “We all know the truth: more connects us than separates us. In times of crisis, the wise build bridges, while the foolish build barriers, we must find a way to look after one another as if we were one single tribe” (Black Panther).