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Cuando un shooter táctico como Valorant llega al mercado, todos los gamers del mundo coinciden en algo: quieren que la competición sea limpia. No importa que jueguen desde PC o desde consola, ni desde qué plataforma lo hagan. Lo último que quieren es que llegue un rival y le pegue un tiro en la cabeza desde Mordor porque su personaje está chetado hasta las cejas. Los desarrolladores de los títulos lo saben, de ahí que la actualización de invierno haya traído consigo un buen número de cambios en el sistema antitrampas de Valorant.
¿Que cuáles son? Atentos al post de hoy, ¡que os lo contamos todo con pelos y señales!
Al contrario de los que ha ocurrido con Rust o Free Fire, juegos con cierta trayectoria en el mundo gaming que han alcanzado el éxito tras años en la brecha, Valorant es un título reciente. Concretamente fue lanzado al mercado a mitad de 2020, en plena pandemia de coronavirus y en medio del estallido de la burbuja gamer. Estábamos sedientos de entretenimiento que no implicase pasar demasiado tiempo fuera de casa, pero que además nos garantizase algo de vida social. De ahí que, a pesar de tratarse de un mercado con muchas alternativas, Valorant consiguiese hacerse un hueco entre los jugadores habituales de shooters del estilo.
El problema es que a día de hoy ya no basta con desarrollar un buen juego. O un buen juego que además sea entretenido. Ahora, en plena explosión del mundo de los e-Sports, es importante que el modo online lo pete. Y que haya torneos bien armados y bien controlados en los que podamos demostrar todas nuestras habilidades. Y no, no nos referimos a que los enfrentamientos sean más o menos justos, que también, sino a que la gente no pueda hacer trampas. De ahí que el primer torneo internacional de Valorant, First Strike, fuese una auténtica prueba de fuego para el título de Riot Games, creadores de League of Legends.
Había que demostrar que el sistema antitrampas de Valorant era robusto. Que la comunidad podía confiar en que el juego estaba por encima del bien y del mal y era capaz de ofrecer una experiencia satisfactoria. ¿Y sabéis qué? Que Matt "K3o" Paoletti, del equipo antitrampas de Valorant, no podría estar más contento con el resultado. No, el desarrollo de First Strike no fue perfecto, pero sí bastante digno. Hubo muy pocos tramposos, ¡y en la segunda edición habrá todavía menos!
Currarte unas clasificatorias de escándalo para llegar a los niveles más altos de Valorant y ver que se han colado unos cuantos tramposos diría mucho de Valorant, pero nada bueno. Si como desarrolladora de un videojuego no controlas que los niveles más altos de tu modo competitivo estén blindados contra ese tipo de gente es que algo estás haciendo mal. El equipo antitrampas del título lo tienen muy claro, por eso han implementado en la actualización de invierno algunas modificaciones que nos aseguren una limpieza máxima.
Según Paoletti, los efectos de un tramposo son aún peores de lo que nos pensamos.
En definitiva, ser permisivos (o incapaces) con las trampas da muy mala imagen y hace que la comunidad gamer se busque otro título con el que andar entretenida. Eso sí, hablamos de los creadores de LoL, uno de los MOBAs más exitosos del mundo, ¡seguro que algo se les iba a ocurrir!
Según los responsables del sistema antitrampas de Valorant, han tenido la fortuna de haber podido controlar muy bien este aspecto del videojuego. Las partidas con algún tramposo son pocas en comparación con el resto, pero no estarán contentos hasta erradicarlas por completo. De ahí que se hayan centrado mucho en ello en la actualización de invierno de Valorant, y de ahí que aseguren que el Episodio 2 vaya a ser más complicado aún que el anterior. Quieren que el que llegue a la cima lo haga porque de verdad lo merece y nosotros queremos lo mismo. ¿No es hermoso cuando todas las partes están de acuerdo en algo? ¡Valorant va a volver a ser un must-have esta temporada!
Cuando los creadores de un juego no toman medidas contra los tramposos, los servidores se vacían de gamers. El éxito de un juego, a día de hoy, se basa en la competitividad del mismo, de ahí la importancia del sistema antitrampas de Valorant. Como ya hemos dicho, no basta con expulsar a la persona que utiliza los cheats, también había que buscar una forma de castigar a los gamers que, de forma indirecta, también se beneficiaban de ellos. Esto será posible gracias a la mejora de la analítica del juego y la ingeniería de datos.
Al final, la única forma de cazar a los malvados es analizar las partidas, y en esto el big data y cómo se trabaje con él es crucial. Vale, bien, ya sabemos cómo piensan cazarlos, ¿pero tienen pensado algún tipo de medida contra ellos. ¡Por supuesto que sí!
Como veis, las novedades en el sistema antitrampas de Valorant en la actualización de invierno no son poca cosa. Eso sí, lo mejor es que no se quedarán ahí, que habrá más y mejores noticias, ¡y aquí estaremos para contároslas!
