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Tanto si buscas la estatura de Pau Gasol como el año en el que se separaron The Beatles, tendrás que ir a parar a un motor de búsqueda. Casi todos acabamos en Google, porque contar sus beneficios es como contar lo bueno que está el jamón en Jabugo. Y es que el 90% de los usuarios usa la gran G para sus dudas existenciales.
¿El secreto de su éxito? Potentes algoritmos e inteligencia artificial, el Dúo Dinámico de la tecnología, gracias al cual se consigue una experiencia incomparable y personalizada. Si a esto le añadimos un asistente de voz que nos entiende y podemos usarlo tanto en el móvil como en Google Home o Google Home Mini, entendemos perfectamente por qué es el rey del mambo.
Los contras, los sabemos de sobra. Tanta personalización y respuestas a medida conlleva una cesión de datos y de privacidad que muchos consideran abusiva.
Pero el mundo de los motores de búsqueda es mucho más amplio. Si buscas alternativas, aquí tienes unas cuantas.
Bing es el segundo motor de búsqueda más usado, pero muy por detrás de Google, ya que apenas un 3% de los usuarios de Internet lo utiliza. Es propiedad de Microsoft, por eso al abrir Internet Explorer siempre nos aparece mirándonos con ojos de cachorrillo para que le demos una oportunidad. ¿Acaso no se la merece?
A nivel visual, sus fondos de pantalla cambian cada día (como los doodles de Google) y pueden inspirarte si le temes al buscador en blanco. Además, cuenta con un acceso rápido en la parte superior a Outlook y al paquete Office Online.
En móviles está disponible solo para Android. Su app permite búsquedas a través de una foto o escaneando un código QR y, además, puedes pasar sus fondos de pantalla a tu móvil en un solo clic. Por contra, la búsqueda por voz es bastante limitada, ya que de momento Microsoft no ha incorporado a su asistente virtual, Cortana, en español.
Se anuncia como el buscador que no te rastrea, y esa es su mayor virtud, la privacidad. Además, no incluye anuncios. Este motor de búsqueda funciona por defecto en modo privado, con todo lo positivo y negativo que eso conlleva.
Tus datos estarán a salvo, sí, pero los resultados que encuentres no estarán personalizados. Tampoco se guardan las búsquedas por lo que, si quieres volver a visitar aquella web que te alucinó tanto la semana pasada, tendrás que tirar de memoria. Ah, y deja un poco de espacio en el coco porque también tendrás que recordar todos tus usuarios y contraseñas. Como para recordar también el cumpleaños de tu padre.
Está disponible para iOS y Android y, en su versión móvil, DuckDuckGo te dice el grado de privacidad que tiene cada página, catalogándola de la A a la F. Si la protección de tus datos es tu mayor preocupación, sin duda este es tu navegador.
También es una gran alternativa Qwant, el motor por defecto de Mozilla Firefox. Decir que se ha creado en París, siendo el único navegador europeo de la lista.
Como DuckDuckGo, también se anuncia como “el motor de búsqueda que respeta tu privacidad”, ya que no trackean al usuario con cookies ni ofrecen resultados personalizados pero Qwant no lo centra todo en eso.
Para los hiperconectados, en su interfaz podemos ver noticias y personalidades destacadas en función del momento, para que sepamos qué pasa en el mundo sin necesidad de buscarlo. Además, su motor está muy enfocado a la música, por lo que si buscas una canción o artista te sugiere escucharla en tu servicio de streaming musical, te ofrece información sobre conciertos y noticias, todo en una página con un diseño agradable e intuitivo. .
Está disponible para Android e iOS, pero en dispositivos Apple la app se anuncia en inglés y apenas tiene opiniones.
Ecosia es un buscador cuyos beneficios en publicidad van a financiar programas para reforestar el planeta. Y es que, siempre según Ecosia, por cada 45 búsquedas aproximadamente, ayudarás a plantar 1 árbol. ¡Por fin tu curiosidad sin límites tiene premio!
Tras la barra de búsqueda destaca ese número de árboles que llevan plantados hasta la fecha, y ojo porque ya van por 38 millones. La única deforestación que les gusta a los de Ecosia es la de historiales, ya que tampoco almacena tus búsquedas ni comparte tus datos con anunciantes.
Por si esto fuera poco, los servidores de Ecosia funcionan al 100% con energías renovables, así que ya no tienes excusa para no estar comprometido con el planeta.
Entonces, ¿tiene algún pero? Si tuviéramos que decir algo, sería que su algoritmo no es tan preciso como el de Google. La prueba de que están haciendo bien las cosas es que en formato móvil, donde está disponible para iOS y Android, es de los buscadores que mejores puntuaciones tiene.
Como ves, hay vida más allá de la barra de búsqueda de Google, aunque también es verdad que, si no te obsesiona el asunto de la privacidad, difícilmente encontrarás a alguno más completo.
