No apto para hipocondríacos: siete aplicaciones para detectar enfermedades

Te ha salido una mancha en la piel y quieres saber qué es. En lugar de acudir al médico, has decidido irte a tu tableta y revisar Google para que te solucione la duda. Si lo haces de manera muy esporádica, no te sientas un “bicho raro” porque es una práctica de lo más habitual.

De hecho, cada vez son más las personas que usan sus dispositivos inteligentes para hacer consultas médicas, además de gestionar enfermedades crónicas y encontrar hábitos de vida saludables.

No es algo que debemos criminalizar, apunta la Doctora Natalia Herrera, pues “el uso de aplicaciones ahorra grandes costes sanitarios, hasta 100.000 millones de euros en la Unión Europea”. Lo que sí está claro es no deben estimular la automedicación. Siempre se pueden utilizar de manera informativa, pero nunca elegir medicamentos o terapias en función de ellas.

App de salud: ¿son de verdad útiles?

La salud no es ningún juego. De hecho, cada vez más los médicos están tomando conciencia de que la tecnología puede ser un aliado perfecto en la prevención y el tratamiento de las enfermedades. Tanto es así que los profesionales de la salud prescribirán algunas aplicaciones como si de un fármaco se tratara.

Pero hay bastante indefinición sobre qué puede ir bien y qué no en la actualidad. Así lo considera Carme Carrión, profesora e investigadora del eHealthLab de la UOC: “Las aplicaciones pueden ser útiles para los pacientes y para los profesionales”. Cuenta Carrión que “los pacientes no suelen comentar con los médicos las aplicaciones que usan, porque consideran que no forman parte de la estrategia terapéutica, del mismo modo que hay profesionales que recomiendan aplicaciones que no han sido validadas”.

Estamos en un proceso en el que todo irá cambiando, poco a poco, y encontraremos apps de salud cada vez más personalizadas en su servicio con el fin de mejorar su eficacia. Pero aún hoy está en pañales.

“Hoy en día muy pocas personas siguen usando las aplicaciones tres meses después de haberlas descargado”, afirma la doctora Carrión. Apunta que aún queda mucho por hacer para aumentar su eficacia, como incluir gamificación, crear redes sociales asociadas, añadir notificaciones personalizadas, etc.

Del mismo modo, falta una regulación más exhaustiva en relación al mundo de las apps sobre salud, con el único fin de que esa app en concreto sea válida, se consolide y garantice su eficacia, “siguiendo el mismo protocolo que se sigue para validar un fármaco, por ejemplo”, apostilla la investigadora.

¿Y si hablamos de apps?

Aplicaciones hay muchas, millones. El problema está en saber cuáles nos interesan de todo el mogollón existente. Las enfermedades relacionadas con el cáncer, enfermedades cardiovasculares y degenerativas son las consideradas “enfermedades” del futuro. Además, se convertirán en el 80% de las enfermedades, según augura Ramon Gomis, director de los Estudios de Ciencias de la Salud de la UOC.

Por ello, hay que hablar de qué enfermedades prevalecerán y qué aplicación ayuda a identificar sus síntomas. Por ejemplo, ya hoy en día las enfermedades cardiovasculares suponen una de las principales causas de muerte.

Del mismo modo, la diabetes, la ateroesclerosis, la hipertensión o la obesidad, todas ellas relacionadas de alguna u otra forma con aspectos nutricionales y de hábitos de sueño, pueden provocar problemas con el corazón y los vasos sanguíneos.

Kardia, la app de corazón

El primer caso lo tenemos con Kardia, una app que permite realizar electrocardiogramas médicos de forma instantánea a través del teléfono móvil. Kardia hace que sea más fácil que nunca trabajar juntos hacia la mejora de la salud del corazón.

Hay que reconocer que es una tecnología puntera que hace más fácil la asistencia sanitaria de los médicos y que ayuda a los pacientes a controlar su salud cardíaca. Pero los expertos reconocen que en todo caso el paciente debe ir al médico para confirmar esos datos que le ofrece la app. El hecho de que le avise hace que pueda actuar más rápido y pueda prevenir.

SocialDiabetes, toma el control de tu diabetes

En este mismo contexto, en el de controlar para prevenir, surge esta app que ayuda a controlar la diabetes tipo 1 y 2. Víctor Bautista es su creador, que reconoce que la idea de esta app surge tras su diagnóstico de diabetes tipo 1 en 2008 cuando vivía en Londres.

Con esta app se trata de desarrollar una plataforma integral para el control de la diabetes y llevar los beneficios de la tecnología a todas las personas con esta enfermedad, que ya alcanza a 400 millones de personas en todo el mundo.

SocialDiabetes es la app más conocida y reconocida, pero no es la única. Esta app sirve concretamente para controlar tu azúcar y es util para aquellas personas que sufren también de diabetes.

Diabetes Pilot, la otra app para controlar el azúcar

Ésta es sin duda, también, una de las aplicaciones más útiles para aquellas personas que sufren esta enfermedad. La única salvedad es que solo está disponible para iOs. También para Mac y ordenadores con el sistema operativo Windows.

Eso sí, con Diabetes Pilot también es posible hacer un seguimiento detallado de los niveles del paciente. Del mismo modo, la app te permite registrar las mediciones de glucosa o insulina y tener un control exhaustivo sobre las tendencias de azúcar en sangre, entre otras muchas cosas.

Zensei App, para respirar mejor

Tos, falta de aire, dificultad al respirar, presión en el pecho, mucosidad, estornudos… ¿Te suena? Si has vivido estos síntomas, sabes lo horrible que es no poder respirar bien. La app Zensei nace precisamente prevenir problemas respiratorios gracias al control de los síntomas de enfermedades como el asma o la alergia.

Lo que hace concretamente es recopilar diariamente datos como el clima, los niveles de contaminación o la concentración de polen, y así puede avisar al usuario de los riesgos medioambientales que le rodean en función del problema que tenga.

eDerma, para las manchas de la piel

Si el problema se deriva de las manchas de la piel, que es una de las mayores preocupaciones de mucha gente, hay una aplicación que trata de dar respuesta. Se trata de eDerma, que analiza en tan sólo unos segundos el lunar que nos preocupa y evalúa el riesgo de que éste sea maligno.

Esta app, avalada por la Academia Española de Dermatología y Venereología, ha sido desarrollada por un paciente del Instituto Valenciano de Oncología, IVO. En todo caso sirve para ayudar a la autoexploración y la prevención del cáncer cutáneo, sobre todo del melanoma. El fin no es otro que el conseguir hacer que muchas personas se revisen sus manchas y acudan a su médico para realizarse un examen más exhaustivo.

Cancer.net Mobile, la app que nace para prevenir

Es cierto que el cáncer de cualquier tipo es de las enfermedades que más preocupan a todos. De hecho, vivimos en la era de la conectividad y tanta información a nuestro alrededor hace que podamos acceder información falsa o como poco, no verificada.

Para esto surge esta app, que ofrece información sobre tipos de cáncer específicos -de hasta 120 tipos de cáncer diferentes-, proporciona un lugar para anotar preguntas, escribir/registrar respuestas, hacer listas de medicamentos, registrar síntomas y mucho más. La app, eso sí, ha sido elaborada por la Sociedad Americana de Oncología Clínica (ASCO), por lo que la profesionalidad le avala.

iDoctus, el segundo “cerebro” de los médicos

Siete sociedades científicas médicas españolas lo avalan. Es una app que ha nacido específicamente para médicos y farmacéuticos, en su labor de diagnóstico y prescripción de medicamentos de forma segura. En su caso permite acceder de forma rápida a información sobre fármacos y patologías.

Ahí está una de sus funcionalidades más llamativas, relativa a la consulta de forma rápida de las características de cualquier fármaco. En cualquier caso, el objetivo que busca esta app es convertirse en una herramienta que facilite la práctica clínica diaria e incremente la seguridad en la toma de decisiones sobre los diagnósticos y los tratamientos.

No hay mejor prevención que cuidarse

La tecnología y las redes sociales nos han abierto un abanico infinito de posibilidades, aunque también han propiciado la aparición de nuevos trastornos psicológicos relacionados con su mal uso. Deprimirse por tener menos seguidores, buscar información compulsivamente en Google o enfadarse porque tu amigo no te contesta son algunos de los síntomas.

No te obsesiones por las enfermedades, y te creas todo lo que internet te cuenta. La clave está en acudir en cualquier caso a un especialista que determine si eso que te preocupa tiene motivos para hacerlo. Las apps son aliadas, pero no pueden formar parte de la decisión final, que corresponde al especialista.

Que ningún niño se quede atrás por culpa de la dislexia

En torno al 6% de los niños españoles tienen trastornos de lectoescritura relacionados con la dislexia. Si se diagnostica y se trata a tiempo con herramientas como DytectiveU, se pueden obtener buenos resultados académicos.

Luz Rello es la fundadora de Change Dyslexia, una empresa social que pone la ciencia al servicio de las personas para detectar y tratar la dislexia y así ayudarles a cumplir sus sueños:

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