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Da igual que no te mole el género o que ni siquiera tengas una consola en casa: en las últimas semanas habrás oído hablar de Elden Ring. Es normal, se trata del último juego de FromSoftware, el estudio responsable de la leyenda ya histórica de los Souls.
En este caso Hidetaka Miyazaki daba un salto de fe al llevar su fórmula al mundo abierto, manteniendo eso sí la narrativa omnisciente, los jefes terroríficos y la jugabilidad rolera y cruda. ¿El escenario? Las mitológicas Tierras Intermedias.
Este mundo respira la iluminación de Dark Souls 3 y lo combina con toques medievales propuestos por el propio George R.R. Martin (Juego de Tronos). ¿Cómo no iba a petarlo algo así? Para muchos ya es el GOTY de 2022. 🔥🔥🔥
En un abrir y cerrar de ojos Elden Ring sumaba 12 millones de copias vendidas en todo el mundo. Se ha mantenido 6 semanas consecutivas en el número 1 de ventas de Steam, y sigue copando casi todos los canales más famosos de Twtich. PRAISE THE SUN.
El caso es que muchos usuarios se han quedado de piedra al ver lo vastísimas que son las Tierras Intermedias. ¿Cómo sobrevivir en un mundo así? Aunque no tenemos el mismo frenetismo de Sekiro, en Elden Ring sí que se mantiene la dificultad 10000.
Por eso en este artículo queremos ayudarte con una miniguía de supervivencia para el Sinluz. Aquí van algunos consejos vitales para triunfar durante las primeras horas en Elden Ring. SIN SPOILERS.
O bueno, en realidad deberíamos decir que las estadísticas no son definitivas. Al igual que ya pasa en otros Souls, los puntos que vas distribuyendo entre tus atributos condicionan la fuerza, la resistencia y otras virtudes de tu personaje.
Al ir derrotando enemigos conseguirás runas, que luego puedes convertir en mejoras en los lugares de Gracia. Hay algunos objetos que te permiten conseguir estos puntos sin derrotar enemigos. Hasta ahí todo bien, lo normal de la saga.
Pero ¿qué pasa si te has equivocado? Lo notarás al llegar a cierto punto de la partida; no puedes usar las armas que quieres, o te matan de dos golpes. Pues bueno, no te preocupes, porque tras superar una zona "mágica" de Liurnia, podrás hacer reset.
Sin adelantar nada, te recomendamos que guardes como oro en paño las Lágrimas Larvarias, porque son las que te permitirán acceder a esta posibilidad.
Olvídate de ir directamente a por los Elden Lords. El juego está diseñado de tal forma que tengas que explorar y farmear un poco en cada intermedio, para poder acceder a la siguiente zona. Esto aplica a los primeros pasos en las Tierras Intermedias.
Tras salir a la luz, verás a lo lejos un castillo. Bueno, pues no te dirijas a él. Familiarízate con los controles y, sobre todo, con los ritmos del juego. Luego ve a la Iglesia de Elleh al norte de donde estás, y habla con el mercader Kale para comprar cosillas.
Ahí te recomendamos que pilles el Kit de Creación y Manuales (estos te desbloquean crafteos más adelante) y la Antorcha. Aunque Elden Ring es más luminoso que otras entregas, las zonas importantes siguen siendo oscuras. Ah, y hay cuevas.
Más cositas antes de ir al Castillo de Velo Tormenta: explora Ruinas de la Puerta y haz una visita a la gracia que está cerca para que Melina te entregue el Silbato de Corcel Espectral, el objeto con el que podrás invocar la montura Torrentera.
En cualquier caso, la exploración en Elden Ring siempre premia. Piérdete, consigue runas y ve probando objetos. La esencia está más en la inmersión del mundo que en la propia historia principal. Ah, no te olvides de ir marcando localizaciones en el mapa.
Llámalo "potis" o como quieras. En Elden Ring vas a necesitar curarte (y mucho). Al principio pensarás que es más fácil que otros juegos porque el mapa está lleno de lugares de Gracia y porque te dan cargas al limpiar campamentos.
El tema es que hay que seguir haciendo una gestión correcta de estos objetos. Por un lado tienes el Vial de Lágrimas Carmesí (rojo) para recuperar vida, y por otro el Vial de Lágrimas Cerúleas (azul) para recuperar maná. Empezarás con cuatro cargas en total.
La cosa es que puedes distribuirlas como quieras, dependiendo de si vas a magia o si vas a fuerza. Acércate a un lugar de Gracia y en el menú selecciona "Asignar cargas de viales". Ahí podrás repartirlas dando más a un lado o a otro. Es gratis.
¿Y ya está? No, aquí también hay una progresión. Para aumentar el efecto de los viales vas a necesitar Lágrimas Sagradas y para aumentar las cargas (el número que puedes llevar), Semillas Doradas. Son objetos que están repartidos por el mapa.
Las lágrimas siempre se encuentran en iglesias y las semillas en los alrededores de los Árboles Ilusorios de las Tierras Intermedias (cuidado aquí porque te toparás con minibosses). Luego vete a una "hoguera", un lugar de Gracia, y selecciona en el menú:
Esto no cuenta como consejo de Elden Ring, sino como un añadido. Uno muy útil, por cierto. Vas a poder craftear tus propios viales con efectos especiales. Estos objetos se llaman Viales de Médika Milagrosa. Los desbloquearás en la Tercera Iglesia de Médika.
Cosas que necesitas saber sobre esto: el vial solo tiene una carga, por lo que tiene un uso único por combate. Al usarlo perderás el contenido pero no el recipiente (vial). Acércate a un lugar de Gracia y combina dos Lágrimas de Cristal para los efectos.
No llevamos años y años flipándolo con las habilidades de las armas para llegar a Elden Ring y olvidarnos de ellas. Exacto, aquí también están presentes estos atributos a través de lo que se han llamado Cenizas de guerra. (No confundas cenizas).
Resumiendo, solo puedes aplicar una por arma, y no en todas las armas. Las que son especiales y las que ya tienen habilidades asociadas cuando las recoges están lógicamente bloqueadas. ¿Qué necesitas para aplicarlas a tu equipamiento?
Pues el Cuchillo de Afilar. Lo recibirás en las primeras horas de la partida. Con este solo tienes que irte a un lugar de Gracia y seleccionar en el menú la opción "Cenizas de guerra". Cada una otorga un efecto único y ¡cuidado!: ofrecen un solo uso.
Vamos, que cuando la consumas esta desaparecerá de tu inventario. Por eso debes pensártelo dos veces antes de hacer nada con una espada que vas a dejar de lado a los pocos días. Las Cenizas de Guerra las sueltan siempre los escarabajos plateados.
También las puedes encontrar tiradas por el mapa, pero esas son ya más complicadas de conseguir. Ah, y que sepas que puedes duplicarlas si tienes Cenizas de Guerra Perdida. Vete al herrero de la Mesa Redonda y hazlo ahí.
Te las irás encontrando por ahí y tardarás en saber para qué sirven. Como en todos los Souls, en Elden Ring no tirar absolutamente ningún objeto es NORMA BÁSICA. Lo mismo aplica al tema de matar o no a los NPC. Quién sabe si te estás cargando tramas.
Esto lo decimos haciendo referencia a las Llaves de Espada Pétreas. Las puedes comprar a mercaderes, te las dan algunos personajes y ¡hasta puedes empezar con ellas! En la creación de personaje puedes elegirlas como Recuerdo, y no es ninguna mala idea.
A los pocos segundos de comenzar tu partida ya verás la primera puerta en la que puedes usarlas. Estos espacios se identifican por tener una estatua con forma de demonios (o parecido). De base hay que introducir siempre dos llaves. Ojo, se consumen.
Esa puerta te llevará a la Tumba del Héroe de los Aledaños, una mazmorra algo avanzada para tu nivel inicial. Hay otras puertas durante el juego que ya tienen una Llave Espada Pétrea insertada, y que solo requieren una más.
¿Merecen tanto la pena? Sí. En estos lugares Miyazaki ha escondido alguno de los objetos más poderosos de Elden Ring: bastones, espadas, escudos, armaduras y todo tipo de utilitarios de tipo legendario. Así que ya sabes.
Comenzarás con mucho miedo y poco a poco te irás confiando. En Elden Ring el daño por caída ha cambiado bastante respecto a Dark Souls 3. Ahora hay mucho más margen para hacer el cabra por las Tierras Intermedias sin morir. Pero cuidadín.
Que puedas tirarte de sitios más altos no significa que no haya daño por caída. De hecho, dependiendo de la altura (de menos a más) tendrás uno u otro efecto negativo sobre el estatus:
Hasta aquí todo normal. Nuestra advertencia tiene que ver con Torrentera. Y es que aunque el caballo tenga doble salto, ¡este no amortigua el daño por caída! El juego precalcula la distancia y aplica el daño indistintamente de la distancia en el rebote.
Eso quiere decir que morirás igualmente aunque estés cayendo medio metro tras hacer el doble salto, si vienes de un sitio mucho más elevado. Parece una tontería, pero morirás muchas veces al comienzo de tu partida si no lo tienes en cuenta.
Para anular el daño por caída puedes hacer dos cosas: equiparte el Talismán Gato de Cola Larga —anula todos los daños por caída, pero no la muerte por caída—, o utilizar Piedras Arcoiris. Basta con que tires una en la zona por la que quieres saltar.
Si brilla significa que sobrevivirás al salto y si se rompe, que morirás. Es una mecánica un poco tediosa pero te va a sacar de más de un apuro en zonas que generen dudas, y que vayan a asegurar tu supervivencia desde el último lugar de Gracia.
Ya sabemos que la true experience de los Souls es ir a pelo, tirar de habilidad y palmar doscientas veces delante del mismo boss. Pero si Elden Ring nos da una mecánica, vamos a utilizarla, ¿no? Las invocaciones no son chetos ni trampas, sino una ayuda legal.
Eso sí, a diferencia de otras entregas, no pueden utilizarse en cualquier momento. Para utilizar las Cenizas de Espíritu necesitarás la Campana de Invocación Espiritual que te da la bruja (👀👀👀) en la Iglesia de Elleh al comienzo de la partida.
Tranquilo porque no tienes que utilizar el objeto. Simplemente entras en la lista de objetos rápidos, y te las equipas ahí. Estas invocaciones se van consiguiendo durante la partida al derrotar enemigos, hablar con NPCs y explorar las Tierras Intermedias.
Consumen PC en función de lo poderosas que sean y están atadas a tu personaje hasta que mueran. Pero lo dicho, ten cuidado con lo que invocas, porque algunas gastan muchísimo maná.
Las Cenizas de Espíritu, al igual que las Cenizas de Guerra, armas, armaduras y viales, se pueden mejorar. Para ello necesitarás hablar con Roderika, la chica que está en la cabaña cercana a Castillo Velo Tormentoso.
Cuando te pases esa zona se irá a la Mesa Redonda, pero todavía seguirá sin ofrecerte la opción. Habla con el Maestro Herrero Hewg hasta convencerlo, sal de la zona y vuelve. Ahora Roderika tiene el comando "Afinar Espíritus". ¿Qué se necesita?
El tipo de planta exigido variará dependiendo del nivel que ya tenga la invocación. Funciona igual que las Piedras de Forja, con un número entre corchetes indicando la calidad de la Convalaria. En un punto del juego podrás comprarlas a las Doncellas Gemelas Quiescentes.
¡Y eso es todo! A pesar de todos estos consejos de Elden Ring, seguirás muriendo mucho durante las primeras horas. No es que seas malo o torpe; es el proceso natural de aprendizaje de todos los Souls. En un par de días lo tendrás totalmente pillado.👅
