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Tu teléfono móvil no hace magia. Entre bambalinas están los sensores. Pero ¿qué son exactamente y para qué sirven? Pues algunos fijo que los conoces, como tu GPS o la función NFC para hacer pagos desde la app de tu móvil.
¡Te los descubrimos todos!📲
Tu teléfono cuenta con numerosos sensores que son indispensables para que pueda funcionar correctamente. Sin ellos, no podrías hacer cosas tan básicas como orientarte cuando te has perdido o jugar a algunos videojuegos que requieren que gires el móvil. Algunos de ellos son:
Este sensor del móvil permite conocer en todo momento la posición de la pantalla del teléfono. Como mencionábamos antes, te ayudará a rotar hacia todos los lados tu pantalla si por ejemplo estás jugando a un videojuego de coches y tienes que girar el volante.
Además, el giroscopio es ideal para la realidad virtual. En cuanto al apartado anterior, hay muchos más juegos de realidad aumentada que necesitan de esta herramienta. Cualquiera de tus movimientos podrá ser detectado por tu móvil.
Lo mismo ocurre con las fotos panorámicas y vídeos 360º. Esta tecnología te permite grabar y visualizar este tipo de contenidos. Eso sí, aprende a hacerlos bien y saca el máximo partido a tu teléfono.
Incluso te hará falta para navegar por Google Maps. Jamás imaginaste que un sensor del móvil podía ser taaan importante, ¿eh?
No, tu móvil no irá más rápido con el acelerómetro.🤣 En realidad, el acelerómetro va unido al giroscopio. Sirve para que el móvil detecte la orientación del teléfono. Es un sensor muy pequeñito y con tres ejes (X, Y, Z). De esta forma, si colocas el móvil en horizontal, la pantalla podrá girar.
Salvo que actives la opción de "Bloquear orientación", la pantalla girará. Además, con esta herramienta podrás hacer cosas como calcular la velocidad a la que caminas o corres, la distancia recorrida o cuántas calorías has quemado.
El Sistema de Posicionamiento Global, más conocido como GPS, es otra app que no puede faltar en tu móvil. Sobre todo, si pierdes el norte (y el resto de coordenadas geográficas) nada más salir de casa.
Esta aplicación viene instalada en todos los teléfonos móviles. Tanto si utilizas tu ubicación exacta como aproximada, el GPS te ayudará a llegar a cualquier sitio. Además, podrás decirles a tus amigos dónde estás en tiempo real. En pleno siglo XXI, ya es difícil hasta perderse.
De hecho, hay videojuegos que funcionan con GPS. Minecraft, Pokémon GO o Zombies, Run! son solo algunos ejemplos.
Si no te basta con el GPS, puedes convertir tu móvil en una magnífica brújula magnética.🧭 Esta función utiliza un sensor electrónico, que utiliza una aguja imantada y se vale del magnetismo terrestre.
Algunos teléfonos ya vienen con esta herramienta instalada. En otros móviles tendrás que descargarte una app específica. Algunas incluso tienen GPS incluido. Si lo prefieres, entra a Google Maps... ¡y verás!
Te aparecerá la opción de calibrar el sensor, para que la medición sea correcta. Más completito, imposible.
Tanto para iOS como Android, NFC es el sistema de pago contactless que te permite pagar desde el móvil con tu tarjeta, solo abriendo tu app bancaria. También lo puedes utilizar para intercambiar datos (fotos, vídeos, música) o acceder a recintos con este identificador.
Muy rápido, fácil y cómodo de utilizar. Solo tienes que activarlo en tu móvil, en "Ajustes" o deslizando la parte superior de tu pantalla. Entre todas las opciones, como datos móviles o Wi-Fi, encontrarás la función NFC.
La mayoría de móviles ya tienen sensor de proximidad. Es una de las principales novedades de los teléfonos de última generación. Con este sensor, podrás detectar objetos o personas cercanas a través de infrarrojos. De esta forma, puedes encender y apagar la pantalla del móvil con tu rostro.
De hecho, se activa de forma automática. No tienes que instalar ningún programa específico para que funcione. Para evitar que tu móvil se active cuando lo guardes en el bolsillo, algunos teléfonos tienen la opción de bloqueo automático. Dependiendo de tu modelo de móvil, tendrás que configurarlo en los ajustes.
Con este sensor, el teléfono detectará la intensidad de luz ambiental. Así, la luz de la pantalla se ajustará automáticamente. Te ahorrarás tener que cambiarlo tú mismo cada dos por tres.
Te recomendamos no poner el brillo de la pantalla al máximo, ya que gastarás más batería. Por otro lado, en lugares muy oscuros o por la noche te ayudará a proteger tu vista de los destellos.
Hoy en día, ¿qué móvil no tiene un sensor de huella dactilar? Reforzar la seguridad de tu teléfono es muy importante y qué mejor que hacerlo utilizando tu propia huella. Seguro que tu smartphone ya incorpora este tipo de sensor llamado biométrico.
En biometría también se incluyen los detectores faciales y de iris. Solo tienes que seguir las instrucciones que te indique el móvil y configurarlo. Es más seguro que utilizar un código PIN o contraseña.
Hay más: el podómetro o contador de pasos, el sensor cardíaco o el sensor de espectro de color para mejorar tus fotografías son otros que deberías incluir en tu teléfono. Así que ya sabes: toma nota de todas estas cositas que no dejarás de utilizar en tu móvil.
