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Internet y los buscadores han cambiado muchísimo desde que aparecieron: la interfaz, el lenguaje de programación… Seguimos apuntando hacia el futuro y todo apunta a que las PWA (Progressive Web Apps) van a ser cada vez más comunes.
Las páginas web están enfocadas en que sintamos comodidad y lleguemos a lo que queremos sin problemas. Es lógico, si intentas comprarte unas zapatillas y no sabes cómo, lo más probable es que te quejes y abandones el sitio sin llevarte nada.
Con las PWA se consiguen varias cosas, una de ellas es mejorar la experiencia del usuario. Gracias a este nuevo formato, las webs serán mucho más parecidas a las aplicaciones que tenemos en el móvil y te harán la vida un poquito más fácil.
Lo bueno que tienen las aplicaciones móviles es que son muy intuitivas y los desarrolladores pueden hacer que se comporten como quieran. Esto implica un montonazo de funciones exclusivas y oportunidades de innovación.
El mayor problema que tienen es que es necesario descargarlas y que ocupen un espacio en el móvil. Por el contrario, las webs están siempre en la nube y no nos tenemos que preocupar de que nos quiten almacenamiento del dispositivo.
¿Qué pasaría si mezclamos estos dos formatos? Tendremos como resultado a una Aplicación Web Progresiva (PWA), que junta lo mejor de ambos mundos y nos trae muchas ventajas.
Las PWA por tanto son como páginas web que se adaptan a las nuevas tendencias y se acercan a las aplicaciones. Esto se nota especialmente en sus diseños y en algunas funciones.
Este tipo de páginas web son muy complejas y necesitan de varias tecnologías para que funcionen como es debido. Algunas son muy conocidas, como el famoso protocolo de seguridad HTTPS, y otras son menos famosas.
Los trabajadores de servicio o service workers cumplen una función muy importante, ya que son los encargados de que estas PWA puedan ejecutarse en segundo plano.
Este tipo de JavaScript tiene que instalarse en el navegador y hace que la PWA se pueda usar sin conexión. Esto sucede gracias a que se almacena toda la información online, dentro del caché.
El archivo de manifiesto es el apartado encargado de la estética final que ven los usuarios. Es un JSON en el que se almacenan muchos datos, como los iconos, los colores que se usan o las configuraciones de pantalla posibles.
Como te puedes imaginar, si hemos hablado tan bien de las PWA es porque tienen muchas ventajas interesantes. Las que queremos resaltar son las siguientes:
También hay algunas ventajas que son propias para las empresas y que ayudarán a que mejoren la relación con sus clientes: son indexables, enlazables, necesitan pocos recursos, se adaptan a cualquier dispositivo…
No todo iba a ser bueno, las PWA también tienen algunos puntos negativos que deberías saber si estás pensando en montar una. Son pocos y tampoco es que te vayan a tirar por tierra todo el trabajo, pero nunca está de más conocerlos:
Puede que no caigas ahora mismo en ninguna web de este tipo, pero lo más probable es que uses alguna de ellas en su modo web de toda la vida. Sin ninguna duda, la más famosa de ellas es Twitter (ahora X).
Esta red social ha sido de las primeras en unirse a las PWA. Si te la descargas podrás usarla como si fuera una app normal, en el momento que te quedes sin batería, podrás seguir navegando, pero sin actualizar el contenido.
No es la única Aplicación Web Progresiva que tenemos ahora mismo, hay otras como Skyscanner, Youtube o Trivago que seguramente te vendrán bien en algún momento.
¿Nunca has usado una PWA? Pues quizás es el momento de darle una oportunidad y bajarte la que más te llame la atención. Te recomendamos que te descargues una que uses bastante, ¡ya nos contarás! 😉
