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Hace muchos años lo normal era lo contrario: que las películas saltaran a los videojuegos. ¿Quién no se acuerda de aquellos títulos adaptados de El Rey León, Aladdín o Tarzán? Hoy es al revés: las películas de videojuegos inundan los cines.
Los estudios se han pispado de que poner a Sonic correteando por la pantalla o a Lara Croft explorando islas perdidas del Pacífico es muy muy rentable. Ya dan igual cosas como el guion o el reparto. Lo que importa es la marca y la popularidad.
De hecho, lo normal es que las películas de videojuegos se lleven varapalos de la crítica y lloren sangre en IMDb o FilmAffinity, pero que luego lo peten en recaudación. "¿A quién le importa ya la calidad cinematográfica?", se preguntaría Boyero.
A nosotros la verdad es que muy poquito. Al final te metes a ver la película de Uncharted esperando pasar un rato divertido y poco más. Nadie espera encontrarse con "Her" cuando sale de ver Detective Pikachu. Y así es como tenemos que medir la calidad de estas películas de videojuegos.
¿Te divierte? Genial. Pues vamos a ver cuáles son más entretenidas. En las dos últimas décadas se han estrenado muchísimas pelis adaptaciones de juegazos, así que puede que eches en falta alguna. 🎮🎬
Era otro tiempo y había otras sensibilidades. Cuando Final Fantasy VII: Advent Children llegó a las salas de cine ni siquiera se había lanzado todavía Final Fantasy XII. Square Enix seguía saboreando el éxito de la novena y décima entrega de la saga y los fans todavía no se habían dividido. Al remake de la historia de Cloud ni se le esperaba, por eso la adaptación en 2005 de aquel videojuego fue tan bien recibida por los fans. ¿Qué tenemos aquí? Un CGI loquísimo para la época y una historia bastante fiel (con peleíta frente a Sephirot incluida); una medicina perfecta para curarse de la decepción de La Fuerza Interior.
El famoso erizo azul de Sega tiene el honor (o la vergüenza) de contar con la primera adaptación de videojuego al cine que sucumbe a la comunidad gamer. Paramount lanzó en 2019 un primer tráiler de la película de Sonic creyendo que iba a enamorar a los fans, y lo que se encontró fue una de las mayores oleadas de hate de la historia. Tal fue la presión que el estudio se vio obligado a retrasar el estreno y rediseñar al protagonista. Por suerte el resultado final fue más que entretenido y la cinta lo petó en recaudación. Hoy Sonic no es solo una de las películas de videojuegos más aclamadas, sino también una de las que más futuro tienen.
Sal del refugio en el que hayas estado viviendo si no has oído hablar de esta cinta. No sabemos si es por el rollito de Ryan Reynolds, por el tipo de animación furro o porque siemplemente se basa en Pokémon, pero Detective Pikachu es una de las películas de videojuegos más entretenidas y redondas de la historia. Por eso mismo está en lo más alto de nuestra lista. Es una adaptación perfecta del spin-off de la saga, que se guarda suficientes ases en la manga como para tener muchas secuelas en el futuro. Y esperemos que las tenga. Por el bien del mundo meme.
No hay saga de películas de videojuegos más famosa y reconocible que la que creó Paul W. Anderson a principios de siglo. Pueden decir todo lo que quieran del culebrón amoroso del director con Milla Jovovich, pero la primera Resident Evil es una de las mejores adaptaciones que se han hecho. Las secuelas se van diluyendo, pero siguen siendo igual de disfrutonas. ¿Quieres acción, zombies y un buen puñado de referencias? Huye del fiasco de la reciente Resident Evil: Bienvenidos a Raccoon City y quédate con este clásico.
Te decimos lo mismo que con Resident Evil: es más entretenida y fiel a la saga la adaptación de 1995 que la estrenada en 2021. Mortal Kombat siempre ha vivido muy pegada a las salas de cine. Muchos directores de Hollywood la han querido llevar a la gran pantalla, pero ninguno lo ha conseguido. En el recuerdo nos queda aquella aventura noventera, con pocos efectos especiales y tanto cariño que cocinó, ¡oh, sorpresa!, Paul. W. Anderson. Tiene ese aire casero cutrillo de todas las películas de videojuegos de la época, pero es un gustazo para los fans de de Sub-Zero y compañía.
Blizzard llevaba años flipando a la gente con sus tráileres. El mundo de WoW y de Starcraft es casi tan famoso por sus cinemáticas como por sus campeonatos competitivos. Por eso cuando en 2016 se estrenó Warcraft: El Origen, muchos fans se deshicieron en hype. Duncan Jones, todo un friki de los videojuegos, tenía que clavarlo, ¿verdad? Bueno, la cosa no salió exactamente como se esperaba, y aun así fue notable. De todas las películas de videojuegos de los últimos años, esta es sin duda la que mejor apartado visual tiene. Lo de la trama de Azeroth... es otro tema.
Para los que crecieron jugando a la PS2, Príncipe de Persia no era una saga más, era LA SAGA. Las dos primeras entregas —y un poco la tercera— lanzadas por Ubisoft en aquellos años (nos olvidamos de lo que pasó después) fueron auténticos bombazos de jugabilidad y gráficos. En 2010 Jake Gyllenhaal protagonizó su primera y única adaptación con más o menos acierto. Tiene buenos efectos especiales, es entrtetenida pese a que se inspire de más en El Rey Escorpión, y lo más importante: no pisa la imagen de los videojuegos.
¡Ojo! Nos referimos a la versión más reciente y no a las clásicas protagonizadas por Angelina Jolie. Aquellas eran buenas cintas de acción, pero pésimas adaptaciones como películas de videojuegos. En 2018 Alicia Vikander protagonizó una Tomb Raider que se inspiraba directamente en los aclamados videojuegos de Crystal Dynamics. Es decir, que aquí no tenemos ni sexualización ni habilidades sobrehumanas: solo una chica aventurera interesada en la arqueología del mundo asiático y precolonial. La peli es entretenida pese a los clichés y tiene una secuela en marcha.
A Jed Kurzel le habían dado hasta en el carnet de identidad con Macbeth pero estaba dispuesto a volver a intentarlo. El fregado era importante, pero ahí estaba de nuevo Michael Fassbender para salvarle la papeleta. Así nació una de las películas de videojuegos más comentadas de los últimos años: Assassin's Creed. Vale que los fans esperaban ver a Ezio correteando por Venecia y un poco de Industrias Abstergo, pero la aventurilla de Callum Lynch en la España del siglo XV fue un buen intento de adaptación. Es divertida, tiene mucho politiqueo y las coreografías son de primer nivel. ¡Check!
Hay sagas que nacen directamente con el destino sellado. Hitman, con sus asesinatos de ambientación soviética, sus tramas y sus conspiraciones, lo tenía todo a su favor para acabar en la gran pantalla. Y efectivamente, en 2007 el Agente 47 llegó a las salas con una adaptación protagonizada por Timothy Olyphant. Es una de las películas de videojuegos que más chapa ha recibido de la crítica, pero no deja de ser lo que parece: una pastillita de acción sin mucho sentido, muy bien rodada y ambientada. La secuela de 2015 es potable, así que pruébala también.
Llámalo mala suerte o imposibilidad química, pero la realidad es que a día de hoy sigue siendo complicado hablar de las mejores películas basadas en videojuegos. Salvo Detective Pikachu, casi todas han recibido críticas lamentables.
Por eso cada vez que se anuncia un nuevo proyecto, la reacción más inmediata es desconfianza. ¿Conseguirá remediar eso a medio plazo la adaptación de Uncharted? Todavía es complicado decirlo, pero habrá que estar atentos.
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