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Te vas de vacaciones, sacas el teléfono para hacerle una foto a la playa de turno y ¡zás! Descubres que no se abre la aplicación de la cámara. Ni reiniciarlo ni dejarlo descansar funciona. ¿Qué está pasando?
Aunque los fabricantes se aseguran de que todos los componentes de sus terminales funcionen correctamente durante al menos los dos o tres primeros años (bendita obsolescencia), en muchos casos el uso que se le da y los factores ambientales cambian la hoja de ruta.
Se suele hablar más de baterías fritas que de cámaras rotas, pero eso no significa que Android se libre de un mal bastante frecuente y de solución particular. En algunos casos hablaremos de fallas en el software y en otras en el hardware.
Sí, aunque sea en lo primero que pensarás cuando se te rompa la cámara, la avería no siempre viene de una lente rota, sucia o rallada. A veces es el propio Sistema Operativo —y la gestión que hace de la información— lo que provoca los dolores de cabeza.
Sea cual sea el motivo, si has tenido la mala suerte de toparte con este problema, sigue leyendo porque te vamos a dar algunos consejos que te permitirán arreglarlo. Eso sí, no te aseguramos de que te vaya a salir completamente gratuito.
Si intentas abrirla y directamente el móvil no responde, efectivamente es que no funciona. Ahora bien, hay otros casos más sutiles en los que también podrían estar fluctuando ciertos errores.
Por ejemplo que la cámara no sea capaz de enfocar o que tarde mucho en hacerlo, que las fotografías se muestren borrosas, como con cierta neblina aunque el tiempo esté soleado, o incluso que las imágenes no se guarden como deberían.
Para todos esos casos Android expone las mismas soluciones. Al fin y al cabo el mal suele ser el mismo, pese a que lo que se vea en superficie sea ligeramente distinto.
Antes de cambiar de modelo o de ir a un servicio técnico a que te sangren por la reparación, prueba lo siguiente.
Suena a Perogrullo pero es bastante habitual que los usuarios se olviden de limpiar la cámara cuando sanean su teléfono. Hay algunos que esto último no lo hacen directamente nunca. No hace falta que te digamos porque es un grave error.
“Para limpiar la lente y el sensor láser de la cámara, pasa un paño limpio y suave por ellos con cuidado”, explican desde Google. Lo recomendable es un algodón y algo de alcohol. Eso sí, hay que hacerlo con mucho cuidado.
Dejar residuos o pasarse frotando podría deteriorar aún más el cristal y estarías haciendo un pan con unas tortas. Ah, y antes de hacerlo te aconsejamos que desactives los avisos de lente sucia para que el sensor no se vuelva loco.
Entra en la app de la cámara, toca la flecha de la parte superior de la pantalla y después entra en Ajustes. Desde “Avanzado” podrás desmarcar esta opción en el apartado para desarrolladores. Recuerda volver a activarla cuando termines.
En caso de tener un móvil con sensor láser —un Píxel, Nexus 6P o Nexus 5X— también es importante que no olvides limpiarlo siguiendo los mismos consejos que acabamos de explicar.
Lo colocamos aquí aunque seguramente ya lo habrás hecho. Reiniciar el teléfono suele servir para solucionar casi cualquier cosa y no es distinto con el tema de la cámara. Puede que no te funcione, pero siempre hay que intentarlo.
Te recomendamos que lo hagas con el cargador conectado y que, si tienes tiempo, pruebes directamente a apagarlo para dejarlo descansar. Con el móvil encendido podrías dedicarte a cerrar todas las aplicaciones en segundo plano, sin embargo esto es mucho más rápido.
Además es probable que muchas funciones y procesos “invisibles” sigan corriendo después de hacer la limpieza. De ahí que siempre se indique necesario reiniciar el terminal antes de continuar con otros pasos más específicos. ¿Nada? Pues seguimos.
Ya os hablamos en artículo anterior sobre la importancia de limpiar la caché del teléfono de vez en cuando. Aquí vuelve a surgir el mismo tema pero esta vez aplicado solo a la app de la Cámara de Android.
Entra de nuevo en los Ajustes, después selecciona “Aplicaciones y notificaciones” y ahí busca la opción “Ver todas las aplicaciones”. Esto desplegará un listado completo con todo lo que tienes instalado y lo que ya venía de fábrica.
Busca la Cámara y dentro de su ficha elige “Almacenamiento”. Aquí deberías ver el botón para borrar la caché. No tienes más que pulsarlo para limpiar la app y ver si así se soluciona el problema.
Antes de probar suerte vuelve a reiniciar el teléfono. Ya sabes que siempre es mejor prevenir que curar y más con todo lo que tiene que ver con la tecnología.
Aunque venga instalada de serie en el teléfono y nos parezca una extensión natural del mismo, la realidad es que la cámara no deja de ser una aplicación más del sistema operativo; sufre problemas como cualquier otra y necesita actualizarse de vez en cuando.
¿Es poco probable que el error se deba a esto? Sí, pero si estamos buscando la falla hay que pasar por todos los pasos para descartar dudas. Entra en la Play Store y ahí selecciona el menú con el botón de tres rayas horizontales situado en la esquina superior izquierda.
Entra en la lista de aplicaciones y comprueba que no haya una actualización pendiente para la cámara. Ah, y mucho cuidado con confiarse. A veces la revisión no depende de la app en sí, sino de todo Android.
Es decir, que lo que tienes que hacer no es actualizar la Cámara, sino todo el Sistema Operativo. Lo de retrasar estas notificaciones es bastante habitual, pero si estás en casa o conectado a una red wifi, es el mejor momento para hacerlo.
También es bastante poco probable, pero hay que mirarlo igualmente. Cabe la posibilidad de que hayas limitado el permiso de la aplicación en algún momento. A lo mejor estabas trasteando con la configuración y lo hiciste sin darte cuenta.
Si este es el problema estás de enhorabuena, porque la solución es bastante sencilla. Basta con entrar en Ajustes, después en Aplicaciones y ahí buscar “Permisos de las aplicaciones”. En el apartado de la Cámara tendrás que comprobar si está o no activado.
Esta solución por sí sola parece absurda, pero acompañada de las demás podría ayudarte a dar con el causante del mal que ha averiado tu móvil Android.
Es momento de valorar si te compensa sacrificar algunas cosas por recuperar la cámara. Nosotros entendemos que sí porque no hablamos de una aplicación secundaria como podría ser la calculadora o el calendario.
Con los almacenamientos en la nube, además, ahora se puede restablecer de fábrica sin perder prácticamente nada de información. Eso sí, ya te advertimos que el proceso el largo y algo tedioso.
Antes de hacer nada asegúrate de tener una copia de seguridad de todo lo que quieres mantener. Tras eso, entra en Ajustes, “Restablecer Ajustes” y después “Restablecer a estado de fábrica”. La duración de esto variará dependiendo de la cantidad de datos almacenados.
Cuando termine, solo tendrás que volver a recuperar las copias de seguridad, descargarte algunas aplicaciones si es que no las habías también protegido, y comprobar que la Cámara por fin funciona.
Esto debería solucionar también el problema de las imágenes que no se guardan en la galería. La memoria estará libre para volver a guardar fotografías sin ningún problema. Y si ni esto te funciona, entonces ya no habrá más que acudir al servicio técnico.
Te podríamos recomendar que instalases alguna aplicación de terceros que hace las veces de cámara. Son interesantes GCam, Camera FV-5 u Open Camera, entre muchas otras. Pero claro, estaríamos rehuyendo del problema.
Eso por no decir que muchas de estas apps operan sobre el software de la cámara nativa de Android, y que si esta está averiada, pues tampoco funcionarán. En definitiva, que si nada funciona, consultes a un técnico y valores si te merece la pena pagar o no por arreglarla.
