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En nuestro país existen algunos colegios que han implementado la robótica en sus planes educativos. Sin embargo, se trata de iniciativas bastante concretas, por lo que aun tendremos que esperar algunos años para que todos los alumnos pueden disfrutar de sus ventajas. ¿Quieres saber en qué consiste?
En la entrada de hoy vamos a hablar de la robótica educativa como método de enseñanza. Veremos sus características principales, los distintos ámbitos de aplicación y todos los beneficios que proporciona a los estudiantes.
Se trata de un entorno de aprendizaje que prioriza la iniciativa de los alumnos. El desarrollo del pensamiento lógico y la capacidad para solucionar los problemas por sí mismos. Sin olvidar la importancia del trabajo en equipo. Para alcanzar estos objetivos, se utilizan herramientas didácticas como los robots y disciplinas como la programación. Así como otros numerosos dispositivos y recursos tecnológicos, por lo que las posibilidades son casi ilimitadas.
La robótica educativa está estrechamente relacionada con el sistema educativo STEM, basado en las ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas. También con la gamificación. Es decir, utilizar los elementos propios de los videojuegos para facilitar el proceso de aprendizaje. Y en definitiva, hacer que las ciencias sean más divertidas para los alumnos.
En algunos países de Europa como Gran Bretaña o Alemania, la robótica forma parte del currículo de todos los alumnos. Por el contrario, en España solo ha llegado de forma puntual a algunas comunidades autónomas. Como es el caso de Navarra o Madrid. Que desde 2015 imparten la asignatura de Tecnología, Programación y Robótica en alumnos de 1º, 2º y 3º de ESO.
De esta forma, cuando acaben sus estudios tendrán la capacidad de crear apps para móviles, programar un sitio web o crear sus propios videojuegos. Así como conocimientos básicos de robótica que les permitirán desarrollar mejor su futuro profesional.
La robótica educativa tiene aplicación en todos los niveles de enseñanza. Es muy útil para que los más pequeños aprendan mientras juegan. Y también muy eficaz para estimular el interés de los alumnos mayores por las ciencias.
La robótica es una disciplina perfecta para potenciar la curiosidad innata en esta etapa de la enseñanza. Las tareas son divertidas y permiten la participación activa de toda la clase. Además de sacar a relucir la faceta más creativa de los estudiantes. Existen algunos kits de robótica educativa muy interesantes para educación Infantil, como por ejemplo Dash & Dot y Lego WeDo. El primero consta de dos mascotas que se pueden programar desde una app. Y el segundo por una serie de piezas para construir un robot.
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La robótica educativa en Primaria es esencial para dar los primeros pasos en el conocimiento científico. Nos permite centrar los procesos de enseñanza en la resolución de problemas y la realización de proyectos. Volviendo las clases mucho más amenas y atractivas. Además de aprender una serie de competencias básicas, desarrollarán capacidades sociales, de liderazgo o trabajo en equipo.
A partir de Secundaria, la robótica educativa evoluciona de una simple herramienta a un objetivo en sí mismo. Facilitando en gran medida el desarrollo de competencias del sistema STEM. Los alumnos ya tienen conocimientos y aptitudes previas, por lo que están capacitados para llevar a cabo sus propios proyectos relacionados con este campo. El robot más popular en secundaria es Arduino, que además de enseñar a programar es muy útil para aprender electrónica y los novedosos sistemas de domótica.
Para finalizar la entrada de hoy, vamos a hablar de las ventajas y desventajas de este método revolucionario.
Numerosos estudios han llegado a la conclusión de que la robótica es muy efectiva para reforzar los conocimientos aprendidos. Proporcionando excelentes resultados en alumnos de todas las edades. Observar de primera mano el comportamiento de estas máquinas supone una experiencia sumamente interesante. Que además de estimular la imaginación, ayuda a desarrollar las habilidades motoras y potenciar la confianza.
El proceso de ensayo y error para resolver problemas de tipo tecnológico o científico también se puede extrapolar al resto de situaciones cotidianas. Los errores forman parte de la vida y sirven para mejorar. Por lo que los alumnos estarán preparados para afrontar situaciones complicadas en el futuro. Y también se volverán más comprometidos, constantes y disciplinados. Cualidades indispensables para concluir con éxito los proyectos.
En cuanto a las materias, conocerán los elementos básicos de los principales lenguajes de programación, desarrollando en gran medida el pensamiento computacional y la abstracción de conceptos mediante algoritmos. También tendrán las primeras nociones del método científico y la cultura tecnológica. Sabrán dónde buscar la información, manejarla y finalmente exponerla.
Los robots educativos no tienen ninguna desventaja aparente, salvo que estés totalmente en contra de usarlos en la enseñanza. De hecho, las principales incertidumbres se basan en su seguridad o el cambio de paradigma que suponen. Así como el hecho de que las máquinas, al fin y al cabo, están fabricadas y programadas por personas. Por lo que no se garantiza que estén exentas de errores.
¿Es segura la información que almacenan estos dispositivos? ¿Puede llegar a manos de terceros? ¿Sustituirán los robots a los profesores en el futuro? Por el momento, se trata de un recurso didáctico que está dando excelentes resultados en otros países de Europa. Y que, según las estadísticas, facilita en gran medida el acceso a estudios superiores y la inserción al mercado laboral.
