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Desde que empezó a funcionar Instagram, la app ha sido minuciosamente analizada por sus efectos en las personas que la usan, especialmente en los más jóvenes. El sistema que promueve esta app se basa principalmente en la rapidez del contenido y en la aceptación por parte del resto de los usuarios, de ahí que el impacto en la sociedad se haya producido a distintos niveles.
Los ya famosísimos ‘likes’, que aparecieron por primera vez en Facebook pero que lograron su mayor éxito en Instagram, son el motor principal de la red social. Con ellos, los usuarios pueden saber qué grado de aceptación tienen sus publicaciones entre sus seguidores y, en el caso de los instagramers, funcionan casi como herramienta de trabajo.
Pero igual de rápido que su popularidad, llegaron las críticas a su funcionamiento y en los cambios de las conductas sociales de quienes se mueven por la app. Los usuarios en edad adolescente son quienes más cambios han experimentado en sus relaciones y en su manera de comunicarse a raíz de la aparición de las redes sociales y, aunque algunos especialistas en salud mental destacan efectos positivos para el desarrollo de habilidades sociales, son muchos los psicólogos y psiquiatras que han puesto de manifiesto un impacto nocivo en los jóvenes, dando lugar a inseguridades, casos de bullying y en casos graves a diferentes trastornos de la salud mental.
Para luchar contra estos problemas, los ejecutivos de Instagram han decidido dar un paso adelante y proponer una nueva medida que ya está en boca de todo el mundo y que reste y que restará importancia a los tan codiciados ‘likes’. Se trata de eliminarlos, pero al menos de momento no será por completo. Lo que han hecho es borrar el número total de ‘Me Gusta’ que alcanza una publicación de cara a quienes lo ven, pues el propietario del perfil puede seguir viendo esta cifra.
La compañía anunciaba su medida a través de un comunicado publicado en Facebook, otra de las redes sociales en propiedad de Mark Zuckerberg. Por el momento, se trata simplemente de un test, una prueba que lleva ya un par de meses en funcionamiento en algunos países. Usuarios de Australia, Brasil, Italia, Japón y también España ya han visto desaparecer ese número de la barra informativa que aparece bajo las fotos y videos que vemos en nuestro móvil. En su lugar, lo único que aparece ahora es un espacio en blanco. Sin embargo, la persona que ha subido el post sí podrá conocer esa cifra simplemente pulsando en dicho espacio en blanco.
Y tal y como han expresado desde Instagram, el objetivo principal que persigue este cambio es que los usuarios de la app se centren más en los contenidos que ven publicados en lugar de fijar toda su atención en esos ‘likes’, que a menudo han llevado a muchos a una obsesión peligrosa para la salud emocional y psicológica.
Por el momento, todavía estamos a la espera de conocer los resultados de la prueba en casos reales. Una vez se hayan hecho públicos, la compañía decidirá por fin si aplica definitivamente estos cambios a nivel generalizado en el mundo entero o si, por el contrario, da un paso hacia atrás y se queda con la dinámica que ha tenido hasta ahora la aplicación y que claramente ha ido funcionando muy bien, al menos de cara a los beneficios de la empresa.
Eso es lo que muchos se preguntan tras descubrir los planes de Instagram. Resulta extraño imaginarse la red social así teniendo en cuenta que este es uno de los detalles que la han llevado a ser una de las más populares del mercado en los últimos años. El impacto de este posible cambio podría ir más allá de los temas emocionales y psicológicos que los especialistas han comentado estos años atrás. Y es que como sabemos, estos ‘Me Gusta’ son una de las fuentes de ingresos de los llamados influencers e Instagramers. Ya sea de manera directa o indirecta, estos logran buena parte de sus beneficios a través de las colaboraciones con las marcas interesadas en publicitarse para conseguir llegar a un público más amplio. Como mínimo, observaremos un gran descenso de las interacciones que se producen en la app.
Pero esto no quiere decir que los influencers vayan a desaparecer o dejar de ganar dinero. Lo que esto podría suponer es un cambio en cuanto a la selección que las marcas hacen de sus anunciantes en la app y de sus embajadores, que probablemente ya no tendría tan en cuenta el alcance de las publicaciones, aunque sí el del número de seguidores.
La comunicación también viviría un giro radical. Si hasta ahora una persona podía recibir un mensaje de aprobación en forma de ‘Me Gusta’ por parte de sus seguidores y amigos, con la desaparición de este botón el usuario que publique un contenido deberá interactuar directamente con sus seguidores para saber si sus publicaciones están gustando de verdad, ya que no podrá seguir comparando su impacto con el de otras personas.
Por otro lado, también podría producirse un aumento del número de publicaciones, o más bien del tipo de publicaciones, y es que muchos creen que al desaparecer la presión que genera tener más o menos ‘likes’ que nuestros amigos o que ese influencer que tanto gusta, los usuarios se sentirán mucho más libres para mostrar lo que verdaderamente quieran y se lanzarán con publicaciones más reales y honestas.
Lo que sí desaparecería será la compra y venta de ‘likes’ que tanto se le ha criticado a algunos famosos y contra la que han intentado luchar los creadores de Instagram desde el principio, ya que refuerza de manera negativa esa obsesión por la aceptación del resto y que en ocasiones puede conducir a diferentes trastornos psicológicos.
¿Significa todo esto que la desaparición de los ‘Me Gusta’ abocará a Instagram a un estrepitoso fracaso? No está nada claro. Sin duda alguna, este posible cambio supondrá un antes y un después en el mundo de las redes sociales y en el uso que hacemos de ellas. Hay quienes consideran que podría incluso desencadenar una desintoxicación de la app, eliminando el factor más adictivo de la red social. Y aunque podría llevarnos un tiempo acostumbrarnos a un nuevo enfoque todo parece apuntar a que, en última instancia, generaría una mejora de la calidad a diferentes niveles.
A los usuarios no parece entusiasmarles esta idea que cambiaría por completo el uso que hacían hasta ahora de la app y se preguntan si tiene algún futuro esta nueva dinámica, ya que no les convence la propuesta de un Instagram sin esas cifras.
Lo que está claro es que no es probable que Instagram acabe llevando a cabo esta idea si sus primeras pruebas muestran un impacto negativo en los beneficios de la empresa y eso tiene que ver directamente con la aceptación que reciba la medida entre los usuarios, así que de momento solo nos queda esperar al próximo comunicado de Instagram en el que revelen cuál es su decisión final sobre el tema.
