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Si eres una de esas personas que pasa su tiempo de camino al trabajo cazando criaturas en el Pokémon Go, explorando los mundos del Clash Royale o luchando por acabar con todos tus enemigos en el Fornite, entonces te interesará conocer si el móvil que utilizas te está ofreciendo las mejores condiciones de jugabilidad posibles.
De normal, la calidad de la pantalla, los gigas de memoria interna y el consumo de la batería son factores que siempre tenemos en cuenta a la hora de elegir un nuevo teléfono. Pero si, además, a esta ecuación le añadimos nuestra predilección por las apps de videojuegos entonces esa búsqueda se intensificará. Para hacer la selección más rápida, aquí te mostramos una lista con los mejores móviles para jugar a videojuegos que hay en el mercado.
El iPhone XS y el iPhone XS Max cuentan con pantallas OLED, que permiten que cada píxel esté iluminado por separado, que los niveles de negro mejoren y que la pantalla sea flexible. Las pantallas llegan hasta 5,8 y 6,5 pulgadas respectivamente lo que permite ensanchar y mejorar la visión.
Ambos cuentan con el nuevo procesador Apple A12 Bionic, que mejora el funcionamiento y agilidad de versiones anteriores, cuentan con memoria RAM de 3 y 4 GB y con una carga de batería rápida, según webs especializadas como Xataka.
Los dos móviles de la marca surcoreana, el Samsung Galaxy Note 9 y el Samsung Galaxy S9 Plus, ofrecen características similares pero francamente muy óptimas. Los dos tienen una pantalla casi idéntica -6,4 y 6,2 pulgadas respectivamente- y una capacidad RAM ligeramente superior que la del sello Apple: 6 GB y hasta 8 GB en algunos modelos del Note 9.
Sin embargo, presentan algunas diferencias reseñables: mientras que el primero cuenta con una capacidad de batería mayor con 4.000 mAh, el segundo se queda en 3.500 mAh.
La mejor cualidad que viene con el Galaxy Note 9, que por cierto puedes conseguir en Yoigo por 29 euros al mes, es el S Pen. El concepto de este modelo es claro: facilitar la autonomía y aumentar la productividad; y con el S Pen esos objetivos están asegurados.
Aparte de facilitar la movilidad y asegurar la agilidad a la hora de hacer movimientos con el teléfono, viene con capacidad Bluetooth por lo que permite convertir el dispositivo en un mando a distancia.
A este modelo del fabricante chino vale la pena prestarle atención porque el Xiaomi Black Shark está pensado expresamente para los gamers. El terminal está armado con el potente procesador Snapdragon 845, que ofrece un incremento del 30 % del rendimiento gráfico, un descenso del 30 % del consumo de batería y una velocidad de transmisión de información al dispositivo de visualización hasta un 250 % superior comparado con modelos anteriores.
Por si fuera poco que su memoria RAM se aumente hasta los 8 GB, permite la opción de añadirle un mando extraíble para tener comandos físicos como un joystick, el gran reclamo de los jugadores. A ello cabe sumar que la pantalla tiene 5,99 pulgadas en formato 18:9, la potencia de carga de la batería es de 4.000 mAh e incorpora FullHD+.
Por si cabe alguna duda de que está ideado para jugones, el Xiaomi Black Shark tiene refrigeración líquida, lo que permite enfriar la CPU hasta 8 grados. Asimismo, el chip ‘Pixelworks’ posibilita una imagen más nítida y el tercer micrófono al frente del dispositivo potencia los chats de voz y las llamadas para el modo multijugador.
El secreto del Motorola Moto Z3 es su correcta solvencia: 6 pulgadas, procesador Snapdragon 835, 4 GB de RAM y una batería de 3.000 mAh.
Además como sucede con otro modelos tiene un aspecto con formato 18:9 que da pie a la útil pantalla alargada para los jugones. Ciertamente, es el primer teléfono compatible con conexiones 5G pero eso solo es posible gracias a sus Moto Mods, accesorios modulares.
De todos ellos, el complemento que más nos interesa es el relativo a los videojuegos: el Moto Mod Gamepad. Al acoplar este módulo, el teléfono se convierte en una consola portátil y, aunque esto no es nada nuevo, Motorola destaca por apostar por un complemento de gran calidad.
Su apariencia recuerda a los mandos clásicos de la PlayStation o Nintendo y proporcionan una buena efectividad: cruz direccional, cuatro botones de acción, cuatro altavoces y juegos precargados. Se puede comprar en Amazon por un precio que oscila los 75 y 95 euros.
La compañía Razer es conocida en el mundo del juego por su gran catálogo de complementos y el año pasado por fin lanzó su propio teléfono, el Razer Phone, dirigido claramente a los jugones. Este dispositivo de gama alta cuenta con una pantalla de 5,7 pulgadas, el procesador Snapdragon 835, 8 GB de memoria RAM, altavoces frontales y una batería potente con 4.000 mAh que permite jugar horas y horas.
Para poder disfrutar con más fluidez, el Razer Phone cuenta con 120 Hz de frecuencia, lo que equivale a lo que utiliza el iPad Pro y ciertas televisiones. Si esta característica se ha convertido en algo esencial en el mundo de los videojuegos, la gran pega es que el brillo máximo del teléfono no cumple en exteriores. Además la gran potencia de los altavoces permite disfrutar del mejor sonido mientras estás con la partida empezada.
Otro terminal creado para satisfacer las necesidades de los jugones. El ASUS ROG Phone cuenta con el Snapdragon 845, al igual que el Xiaomi Black Shark, la unidad de procesamiento gráfico (CPU) Andreno 630 optimiza al máximo la experiencia con el videojuego y cuenta con 8 GB de memoria RAM.
A todo esto hay que añadir que su pantalla lleva incorporada la tecnología AMOLED con soporte HDR, que otorga flexibilidad, más pureza a los negros y un consumo menor de energía. Incluye también sensores táctiles ultrasónicos, 90 hz de refresco y 1ms de tiempo de respuesta.
La gran revelación de este teléfono es que tiene incorporado un sistema de refrigeración de vapor que impide que el grafismo quede dañado. La cámara GameCool 3D Cooling System, compacta y de mínimo volumen, ha permitido incrementar hasta dieciséis veces la disipación de calor, un 60% la eficiencia refrigerante y multiplicar por cinco la vida útil de su sistema en chip (SoC).
El Huawei P20 Pro, que lo puedes conseguir por 6 euros al mes en Yoigo, viene con algunas diferencias respecto a su predecesor, el Huawei P20, que lo hacen una elección a tener en cuenta. Pantalla OLED de 6,1 pulgadas, 6 GB de memoria RAM y una potenciación máxima del FullHD+. Este apartado es el que más puede interesar a un jugón medio ya que permite sacar el máximo provecho de temperatura, viveza de colores y disposición.
Entre sus contras se encuentran las pérdidas de brillo y la degradación a verde cuando se abre el ángulo de visión pero, en principio, no es algo que nos puede llegar a molestar en nuestra experiencia con el juego.
La firma de Huawei también cuenta con el Honor Play pensado, como es fácil de intuir con este nombre, para jugar y jugar. Con una pantalla de 6,3 pulgadas y su procesador Kirin 970 con ocho núcleos y GPU Turbo, la satisfacción de nuestras partidas están garantizadas. Aparte de los 4/6 GB de RAM y la buena batería, su precio asequible de 300 euros lo hace un teléfono muy atractivo para el consumidor medio.
El teléfono cuenta con un diagonal grande que permite que el terminal quede seguro en la mano y sea fácil de manejar. Además cuenta con una resolución FullHD+ y un panel LCD con brilla estándar. En el día a día, este panel ofrece un resultado positivo pero lo vídeos con muchos negros pueden llegar a quedar deslucidos.
Poco, la marca secundaria de Xiaomi, ha llegado pisando fuerte presentando su PocoPhone F1. El terminal, que apenas llega a los 400 euros, quiere hacerle la competencia a las grandes firmas y ha puesto en el mercado un producto con una pantalla de 6,18 pulgadas, con el grandioso Snapdragon 845, entre 6 y 8 GB de RAM y con 4.000 mAh de batería.Todas ellas son características muy valoradas en teléfonos destinado a jugones.
El PocoPhone F1 no ofrece sensación de lujo ni de teléfono minimalista pero desde luego es una opción a considerar si tu presupuesto es reducido y buscas algo más asequible.
Con incontables versiones diferentes de este producto, el Xiaomi Mi 8 apuesta por la apreciada pantalla AMOLED, 6 pulgadas y el Snapdragon 845. Destaca por su carga rápida a pesar de quedarse en 3.300 mAh. Sin embargo, en contraposición con otros modelos que hemos incluido en esta lista, se puede quedar un poco rezagado si lo que buscamos en un móvil para jugar.
Bordeando los 935 euros, su diseño es indiscutiblemente atractivo. Cuenta con 4 GB de memoria RAM, Snapdragon 835, resolución de 1440p, brillo elevado, 3.520 mAh de batería y una pantalla que según marcan las críticas abusa de azulado. Destaca por su buen funcionamiento pero hay otras opciones más baratas y con resultados más potentes en cuanto a juego se refiere.
Otros móviles a tener en cuenta pueden ser el Samsung Galaxy S9 y S9+, el LG G7 ThinQ, el OnePlus 6 y el iPhone X.
Inspeccionando la lista y poniendo en la balanza las características que cada modelo ofrece entre los primeros puestos de esta carrera se encuentran el Xiaomi Black Shark, el Samsung Galaxy Note 9 y el ASUS Rog Phone. Sin embargo, muy de cerca se encuentra el Motorola Moto Z3 con el Moto Mod Gamepad, un complemento útil que enriquece la experiencia del juego.
Si no tenemos un gran presupuesto, las opciones de PocoPhone F1 y de Huawei P20 Pro se convierten en unas que habría que tener en cuenta.
En general, con todos ellos la experiencia de jugar nos dará una gran satisfacción, aunque el grado de ese cumplimiento quedará subordinado a las especificaciones técnicas que se han enumerado.
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