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Classic. Estás navegando por Internet y quieres descargarte una imagen, pero al abrirla el PC no la reconoce. Rebuscando ves que está en formato WebP. ¿Ahora qué hacemos? ¿Cómo abro esto? ¿Me la habré descargado bien? ¿Es un virus?
Relax. Se trata de un formato innovador que está promoviendo Google para el uso de webs y apps. Y, aunque el ordenador no la reconozca, puedes cambiar el formato para poder utilizarlo como tenían pensado con toda tranquilidad. 😌🙌
Si no conoces el problema, ¿cómo vas a buscarle una solución? WebP —que para tu info se pronuncia “weppy”— es un formato cada vez más habitual entre las imágenes que nos encontramos en Internet.
Está impulsado por el gigante Google, que trabaja para convertirlo en el nuevo estándar de imágenes, bajo la licencia BSD —Berkely Software Distribution—, una licencia de software libre permisiva.
Este tipo de imágenes son especialmente utilizadas por los programadores para ilustrar las plataformas digitales o aplicaciones porque se caracterizan por ocupar poco espacio.
De hecho, tienen un peso de entre un 25% y un 34% menos que la misma imagen en otro formato, ¡y sin perder calidad en ningún momento! Esto hace que la navegación sea ágil y fluida, sin que tarden en cargar los archivos. Pura dinamita SEO.
Las imágenes en WebP tienen una composición diferente frente a otros formatos con el fin de que mantengan una alta calidad y peso bajo.
Como todo en esta vida, el formato de imágenes WebP cuenta con beneficios y con inconvenientes, que les proporcionan ventajas y desventajas frente a los demás formatos.
Puede que tenga numerosas ventajas, pero están muy enfocadas a la configuración de una web o de una aplicación, no tanto al uso habitual de cualquier usuario. En caso de querer cambiar el formato al estándar que tenemos actualmente, un JPG o un PNG, entonces hay alternativas.
Lo primero en lo que pensarás al descargarte una imagen“weppy” seguro que es abrir Photoshop, cambiarle el formato, y tirar millas. Sentimos decirte que esa opción no está contemplada, al menos sin un plug-in.
La suite fotográfica no está disponible para este tipo de formato. Así que aquí van algunas opciones distintas:
¡Sí, lo que lees! Uno de los programas más sencillos de Windows te lo pone fácil a la hora de obtener tu JPG —o tu PNG—. Basta con que abras la imagen WebP descargada con Paint.
Luego solo tienes que seleccionar “Archivo”, el “Guardar como” de toda la vida, y ahí elegir el formato que más te guste, o que necesites. ¡Rápido y sin complicaciones! Ojo si tiene transparencias, que puede que exportes en formatos que las eliminen.
Desde la actualización a Big Sur (y ya han llovido casi 2 años) los dispositivos de Apple soportan sin problemas el formato WebP. La aplicación Vista Previa, ya predeterminada en los macOs, permite abrir y exportar sin intermediarios la imagen.
La alternativa gratuita a Photoshop: sí que da la posibilidad de transformar las imágenes WebP en formatos más comunes. Vale que no te mole nada Gimp —a nosotros tampoco nos gusta mucho—, pero para convertir WebP a JPG es muy útil.
Tampoco hace falta que conviertas Gimp en tu herramienta de edición principal. La puedes tener como apoyo para este tipo de situaciones y chau. Con el tiempo le cogerás el rollo.
Si no te convencen ninguna de las opciones anteriores, no pasa nada. En Internet está (casi) todo inventado. O lo que es lo mismo, que hay mil y un webs y herramientas gratuitas para convertir WebP a JPG sin necesidad de descargarse nada.
Sube tu archivo, introduce la URL de tu archivo, exporta desde Dropbox o desde Google Drive, y convierte WebP a JPG.
Esta herramienta online viene además con multitud de funciones. Permite ajustar la calidad y el peso de los archivos, variar formatos relacionados con el tamaño y controlar otros parámetros. Recuerda que más calidad = más peso.
Puedes cambiar el tamaño de la imagen eligiendo la anchura y la altura, además de aplicar un filtro de color, y otras cosillas interesantes para adaptar la imagen a tus necesidades. Muy práctico para saltarse pasos de edición posteriores.
¿Quién no ha escuchado nunca hablar de ILovePDF? Pues que sepas que existe la plataforma homóloga para imágenes. En una interfaz muy sencilla selecciona tu imagen a transformar, súbela a la plataforma, y espera unos pocos segundos a que cambie el formato.
Lo interesante de IloveIMG es que tras la conversión cuenta con opciones de guardado ya redirigidas a las nubes más típicas. Véase Dropbox o Google Drive. A eso, suma la posibilidad de recortar la imagen, girar la imagen, añadir marca de agua, comprimir o redimensionar el archivo.
No vas a encontrar herramienta más sencilla para convertir WebP a JPG que esta. Entra en EzGIF, selecciona el archivo de tu ordenador o copia la url de la imagen, y haz clic en “Upload!”.
Obviamente, funciona a la velocidad del rayo e incluye opciones para recortar, redimensionar, optimizar, darle algún efecto, ponerle un texto, etc. Cuando la tengas a tu gusto, simplemente podrás descargarla y ¡listo!
Y ahora que sabes que no es ningún virus y que el proceso es tan sencillo, solo queda empezar a ponerlo en práctica. Pilla imágenes de donde quieras sin miedo a estos formatos extraños.
Por cierto, si vas con prisas y no te sirve nada de lo anterior, y si no te importa mucho la calidad, simplemente puedes hacer una captura de pantalla desde cualquier dispositivo, y ya estaría. Fácil y para toda la familia. 😎 😎 😎
