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La resolución de la pantalla es muy importante para la experiencia visual. Una baja calidad en tu pantalla de PC afecta a la calidad de imagen, la legibilidad de texto, la claridad de los colores en los vídeos... Por eso es vital cambiar ciertos parámetros.
Seguro que te ha pasado: cambias el monitor del ordenador por otro más nuevo y con mejor calidad, pero sigues con una resolución muy baja. El motivo suele ser que cambias la pantalla pero no la configuración. ¡Y esto es crucial!
No te preocupes si no sabes cómo cambiarla: aquí te indicamos los pasos para hacerlo en Windows, Mac y Linux.
Ajustar la resolución de la pantalla en Windows 11 no es complicado ni requiere un esfuerzo considerable. Solo asegúrate de seguir los pasos que detallamos a continuación.
En primer lugar, dirígete al escritorio de Windows y haz clic derecho en cualquier espacio vacío. Luego, selecciona la opción "Configuración de pantalla".
En caso de que esta acción no te lleve directamente al apartado de configuración de la pantalla, tendrás que buscarlo manualmente en la configuración.
Una vez dentro de la sección de pantalla, deslízate por las diferentes opciones disponibles hasta que encuentres el apartado de "Escalado y diseño".
A continuación, accede a la opción de "Resolución de pantalla", lo cual te presentará una lista de alternativas. Generalmente, Windows te sugerirá la resolución de pantalla más adecuada para tu monitor, aunque siempre puedes modificarla manualmente.
Escoge la resolución deseada y confirma los cambios. Es recomendable llevar a cabo este ajuste de resolución al iniciar el ordenador, antes de abrir cualquier programa, para evitar que el redimensionamiento afecte al diseño de los elementos visuales.
Si utliizas un ordenador con sistema operativo macOS, también puedes cambiar las configuración de la resolución.
Haz clic en el logotipo de Apple en la esquina superior izquierda de la pantalla y elige "Preferencias del Sistema" en el menú desplegable. En el panel izquierdo de la ventana, selecciona "Pantalla".
En el panel derecho de la ventana, verás una serie de opciones de resolución para la pantalla, presentadas como miniaturas.
Selecciona la opción que mejor se adapte a tus necesidades haciendo clic en ella. Las miniaturas a la izquierda de "Predeterminado" aumentan el tamaño del texto, mientras que las de la derecha hacen lo contrario.
También puedes posicionar el cursor sobre las miniaturas para visualizar la resolución exacta en píxeles. Al seleccionar una nueva resolución, el sistema te pedirá confirmación. Haz clic en "Cambiar resolución" para aplicar los cambios.
En sistemas operativos Linux, el proceso puede variar según la distribución y el entorno de escritorio utilizado. A continuación, te proporcionaremos los pasos para llevar a cabo este procedimiento en un entorno GNOME, que es común en muchas distribuciones.
Para cambiar la resolución de la pantalla en Ubuntu, primero debemos abrir el menú de aplicaciones ubicado en la parte inferior izquierda de la pantalla. Luego, en la lista de aplicaciones, seleccionamos "Configuración".
Esto abrirá el panel de Configuración de Ubuntu, donde encontraremos varios apartados y opciones para personalizar el comportamiento del sistema operativo. Para ajustar la resolución de la pantalla, nos dirigimos al apartado llamado "Dispositivos" en el menú de la izquierda.
Dentro de este apartado, veremos otro subapartado denominado "Monitores". Aquí es donde podemos modificar la resolución de la pantalla, que es nuestro objetivo principal.
Hacemos clic en el apartado de "Monitores" para desplegar una lista con las diversas resoluciones disponibles que podemos elegir. Es importante tener en cuenta que las opciones mostradas en esta lista dependerán del hardware que tengamos instalado.
El sistema operativo nos muestra únicamente las resoluciones que son compatibles con la tarjeta gráfica y la pantalla conectada a la computadora, lo que evita problemas de compatibilidad que podrían afectar a la visualización de la interfaz.
Seleccionamos la resolución deseada y confirmamos haciendo clic en el botón "Aplicar". De esta manera, la nueva resolución de pantalla en Ubuntu se aplicará a todo el sistema.
Al ajustar la resolución de pantalla, ten en cuenta que una resolución más alta puede darte una imagen más nítida y detallada, pero también puede hacer que los elementos en pantalla sean más pequeños.
Por otro lado, una resolución más baja puede hacer que los elementos sean más grandes y legibles, pero la calidad visual podría disminuir. Además, si estás usando una pantalla externa, asegúrate de verificar la resolución óptima admitida por esta.
Hecho esto, habrás visto que cambiar la resolución de la pantalla en tu PC es una tarea sencilla, y además también tiene ventajas significativas para mejorar tu experiencia digital en general.
Ajustar la resolución te brinda la libertad de adaptar la calidad visual y la usabilidad de tu pantalla según tus necesidades específicas, ya sea que estés trabajando, navegando por la web, jugando o disfrutando de contenido multimedia.
Así que no dudes en explorar y experimentar con diferentes resoluciones para encontrar la configuración perfecta que se adapte a tus preferencias y gustos. ¡Un placer ayudar! 😉
