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Ya no es solo una promesa de la serie. El OPPO Reno8 Pro lleva la fotografía y el entretenimiento a un nivel completamente nuevo. Lo hace con un diseño premium y alguna que otra sorpresa a nivel de Sistema Operativo.
No es un despliegue excesivo si pensamos que con este terminal la marca asiática apunta a uno de los segmentos más complicados del mercado. A eso sumemos que ofrecer prestaciones altas a precios contenidos es un malabarismo complejo.
Es diferente dar rienda suelta al poderío tecnológico sabiendo dónde te mueves, como ya pasó en el bestial OPPO Find X5 Pro tope de gama, que andar con matices más sutiles a nivel de perfil y público.
Por eso la séptima generación pasó sin hacer mucho ruido, y por eso también en Bloygo seguimos relamiéndonos los dedos con el maravilloso OPPO Reno6 Pro. ¿De qué lado cae la nueva apuesta? Por suerte del bueno.
La gama media-alta recibe uno de los candidatos más sólidos del año. Diseño, cámara, rendimiento; todo nos ha gustado de este OPPO Reno8 Pro, y por aquí te lo contamos.
| OPPO RENO8 PRO 5G | |
| DIMENSIONES Y PESO | 161,2 x 74,2 x 7,39 milímetros |
| PROCESADOR | MediaTek Dimensity 8100-MAX octacore |
| PANTALLA | AMOLED flexible de 6,7 pulgadas |
| CÁMARA DELANTERA | IMX 709 de 32MP |
| CÁMARA TRASERA | Principal: IMX766 de 50MP ; f/1.8; FOV: 86º |
| MEMORIA RAM | 8GB |
| ALMACENAMIENTO | 256GB |
| SO | Android 12 |
| BATERÍA | 4500 mAh |
| CONECTIVIDAD | 5G/4G |
| BIOMETRÍA | Lector de huellas en pantalla |
Con el paso de las generaciones OPPO se ha ido separando de los materiales más mundanos para aferrarse a las cotas premium. Este OPPO Reno8 Pro da un salto de gigante respecto a la sexta generación y roza la perfección del unibody.
Podemos decir que en apariencia y tactos nos ha dejado sensaciones muy parecidas a las que ya tuvimos con el OPPO Find X5 Pro. Aunque el modulo de cámaras es llamativo, su integración con resto de la trasera es muy fluida.
Nos topamos con aluminios de gran acabado y una superficie acristalada con bordes redondeados. OPPO dice que sigue un proceso de forja en caliente de 800ºC y ocho pulidos nanométricos para conseguirlo. Nos lo creemos.
El diseño no tiene absolutamente nada que envidiar a los móviles más premium del mercado. De hecho, somos habituales de iPhone, y el OPPO Reno8 Pro nos ha dado el mismo feeling al sostenerlo y tocarlo que esos terminales.
Si podemos ponerle alguna pega esa es que la caja no incluye una carcasa (como sí hacen otros modelos de la marca) y este no es un móvil que puedas llevar "a pelo". Lo decimos porque resulta bastante resbaladizo hasta sobre superficies.
Nosotros hemos probado la versión en negro y hay dos cosas que debemos destacar: los efectos de color son increíbles (parece casi un espejo), pero las huellas se quedan bastante marcadas.
¿Qué hay de la botonera? El tacto tanto del bloqueo como del volumen es agradable, aunque el ratio deja estos botones algo alejados si sostenemos el móvil con una sola mano. Por debajo cierra el soporte para la SIM y la entrada USB-C
Sin mucho misterio pero con bastante solvencia. La pantalla del OPPO Reno8 Pro cumple con los estándares de calidad en los que quiere moverse por gama, y entrega un resultado muy equilibrado. Algo, que por cierto no es nuevo en la marca.
En principio esta serie está más centrada en el apartado fotográfico, pero lo cierto es que su octava generación iguala con creces lo que hemos visto en la pantalla del OPPO Find X5. Basta con mirar los números para darse cuenta.
Estamos ante un panel de 6,7" con tecnología AMOLED reforzada a nivel de brillo que aprovecha bastante bien los marcos. No contamos con bordes de pantalla, lo que personalmente nos alegra, ni tampoco con notch aparatoso; es un pequeñísimo orificio.
Curiosidad 💡: el sensor de huella desbloquea el móvil en apenas 0,2 segundos. Es un 44% más rápido que la tecnología anterior, según la marca
Si estás dudando entre la versión normal y la Pro, es aquí donde vas a encontrar las diferencias clave. Primero, por un ratio de pantalla superior (93,4% frente a 90,8%), y segundo por la tasa de refresco.
En Bloygo nos hemos quejado mil veces con que algunas marcas premium sigan sin ofrecer la fluidez de pantalla que debieran. No tenemos nada que criticar aquí. Si bien el modelo estándar se queda en la media, el OPPO Reno8 Pro abraza los 120 Hz. ¡Yas!
Es verdad que supone un aumento en el gasto de batería, pero apenas afecta al rendimiento. El móvil se adaptará a según qué contextos, aunque durante más de una semana de pruebas apenas lo hemos visto bajar de 90 Hz. Peca con el scroll de Twitter, eso sí.
En cuanto a contraste y demás parámetros, ColorOS sigue cumpliendo con las opciones de ajuste: brillo adaptativo, regulación del color con gradación, opciones Ultravisión 01 para vídeo, reposo adaptativo, etc.
A mejorar según nuestra experiencia es el tema del brillo en exteriores, cuando te da la luz del sol directamente, y ciertos efectos de la configuración, que se quedan algo sutiles en el día a día. Por lo demás es sobresaliente.
No es un apartado del que solamos hablar en las reviews porque en general es raro encontrar opciones concretas. Pero es que el OPPO Reno8 Pro se ha reservado un par de ajustes especiales para mejorar su ya de por sí excelente sonido.
Nos ha llamado bastante la atención la potencia de los altavoces, que en configuración máxima son capaces de sobrepasar hasta el volumen del portátil. Y eso sin perder calidad ni distorsionar las pistas.
Hay que decir que este modelo no cuenta con entrada Jack, y eso hace inútil todos los cascos de cable que tengas por casa. Sí ofrece un puerto USB-C (el mismo de la recarga), que se puede utilizar con cualquier adaptador baratillo.
OPPO de hecho incluye en la propia caja del terminal un adaptador a USB tipo OSG que flexibiliza el tema conectividad tanto con los periféricos como con el movimiento de archivos o incluso la conexión a red vía Ethernet.
Volviendo al tema audio, el ecualizador es bastante completo (y efectivo con los bajos). Y si no quieres meterte en ajustes tan concretos, siempre puedes apostar por los perfiles del apartado "Tecnología Real Sound".
Cada vez es más complicado superar las altas esferas de rendimiento por las que se mueven los móviles de gama alta. Hasta ahí todos estamos a una. Pero más difícil es llegar hasta esa liga desde planteamientos "algo" más humildes.
Y lo entrecomillamos porque el OPPO Reno8 Pro tiene uno de los despliegues técnicos más bestias de la marca en los últimos años. Esto tiene doble mérito porque es el primer terminal de su serie que abandona el paraguas de Qualcomm.
Así es, este móvil no lleva un Snapdragon como sí lo hacía la sexta con enfoque similar, y la séptima orientada a otra gama. Ni siquiera el OPPO Find X5 Pro se salta el monopolio de chips de la firma. ¿Qué hace el que tenemos entre manos?
Pues irse a la competencia. Aunque estamos acostumbrados a ver SoC de MediaTek montados en terminales de OPPO de la serie A, nunca nos lo habíamos encontrado en las ligas superiores. Y aquí tenemos un MediaTek Dimensity 8100-MAX.
¿Mala o buena decisión? Buenísima. Este chip es una auténtica bestia que ya ha demostrado en algunos benchmarks estar incluso por encima del poderoso Snapdragon Gen 1. Ya te puedes imaginar en qué se traduce a nivel de rendimiento.
Con sus 8GB de RAM el OPPO Reno8 Pro se mantiene sobre las nubes incluso en los entornos gráficos más exigentes. La marca china todavía no se ha atrevido a lanzar su propio SoC pese a andar desarrollándolo, pero por el momento no lo achaca.
Curiosidad 💡: Es buena apuesta para el gaming, con tasas de 90Hz en multijugadores, vibración adaptativa con un motor linear X-Axis, actualizaciones en segundo plano y modos específicos de ColorOS.
El MediaTek Dimensity 1300 que monta su hermano menor sí que se queda algo más justo para acompasar a la pantalla, pero no es el caso del Pro. Y no solo eso. Esta versión además incorpora MariSilicon X.
Te lo explicamos en el apartado de la cámara, pero la NPU propia de OPPO ayuda en el procesamiento de imágenes y vídeos; algo por otra parte fundamental para sustentar la principal apuesta del modelo
Como terminal más moderno de la marca, incorpora la arquitectura más depurada de los modelos vistos hasta ahora en la serie. Siguiendo números de OPPO, eso se traduce en un 12% más rendimiento para la CPU, un 175% más para la IA y un 29% más para la GPU.
De base el OPPO Reno8 Pro viene con 8GB de RAM; un alimento más que sobrado para que el chip funcione con todo su potencial. Es una cifra que no sorprende si atendemos a lo que está haciendo la competencia en esta franja de mercado.
La cuestión es que, como ya viene haciendo en sus últimos modelos, OPPO también ha incluido en el Reno8 Pro la RAM virtual. Con ello puedes utilizar parte de los 256GB de memoria interna en este otro almacenamiento.
De esta manera pasas de tener 8GB a trabajar con 10GB, 11GB o incluso 13GB dependiendo del ajuste que selecciones. Esto siempre y cuando dispongas de espacio suficiente en la ROM, cosa no muy difícil con semejante espacio.
No hemos echado en falta la ausencia de soporte para SD, la verdad. Más teniendo en cuenta que es una opción en peligro de extinción, cuando no ya desaparecida en el mercado.
No vamos a negar que nos ha decepcionado no encontrarnos de primeras Android 13. OPPO ya lo tiene previsto en su ruta de navegación, y se espera la llegada de ColorOS 13 al OPPO Reno8 Pro y otros hermanos de la familia en este mismo 2022.
Es un salto importante que introducirá la filosofía Material You de Google en el mismo ADN del SO. Pero por el momento (en su salida) hay que conformarse con el ya depurado ColorOS 12.1. Un software que destaca por su personalidad respecto a Android puro.
Sí que es cierto que preserva el minimalismo de los menús, los bordes redondeados y las opciones de ajuste a nivel de personalización y de eficiencia energética y de rendimiento. Pero al mismo tiempo mantiene un aire muy "oppoizado".
Ojo, porque que no sorprenda no quiere decir que decepcione. Este SO es increíblemente completo. En el OPPO Reno8 Pro algunas cosillas que ya conocíamos: Modo cajón, diseños de pantalla, notificaciones inteligentes, etc.
Las opciones de privacidad van igual de bien que siempre, especialmente el tema permisos. Y luego están las funcionalidades especiales con pantalla dividida, ventanas flexibles, inicio rápido, espacio infantil, barra lateral inteligente, o modo simple.
¿Qué tenemos como novedades en el SO del OPPO Reno8 Pro? Nos han gustado mucho los Air Gestures, aunque todavía tienen mucho que mejorar, el antiespionaje para notificaciones, el apagado con contraseña y la privacidad del multitasking.
Los números son los que son, ni más ni menos. Esto lo decimos porque el OPPO Reno8 Pro ofrece justo lo que se espera de su módulo de cámaras. Las cifras anticipan lo que luego hemos visto en nuestras tomas: una auténtica bestia.
Pero hemos echado en falta quizás más presencia de MariSilicon X en los resultados, teniendo en cuenta que es el distintivo frente a la versión normal y lite del modelo. Logra buenos resultados a nivel de rango dinámico y poco más. Un NPU discretito.
Y ojo, que quitando esto nos ha flipado la versatilidad de las cámaras del OPPO Reno8 Pro. Donde más destaca la principal trasera es en entornos con luz de día. Ahí configurada con los 50MP podemos conseguir locuras con tonos bastante naturales.
Sorprende cómo en diferentes contextos de luz el sensor siempre encuentre el punto intermedio en contraste y colores. A veces hay que dejarle que calibre para tomar la foto. De hecho verás cómo van cambiando los tonos en el proceso hasta clavarlos.
Con el modo Pro manual te ahorras todo esto. Pero tampoco es que hayamos encontrado diferencias tremendas al toquetear la exposición y los demás parámetros. Se agradece su presencia, claro.
¿Qué pasa con el gran angular? No vemos demasiada evolución respecto a la sexta generación (lo que ya estaba muy bien). Buen campo de visión, cierta distorsión de bordes y algo de pérdida de rango dinámico y definición. Si puedes, tira la foto con el sensor principal.
Eso sí, donde más flaquea este OPPO Reno8 Pro es en su cámara macro. Echamos mucho en falta la estabilización mecánica al intentar buscar el detalle. La resolución de este sensor tampoco es la mejor, y los colores son algo blandillos.
Algo mejor lo hace la cámara delantera de 32MP. Pese a dulcificar los tonos y quedarse algo corta de contraste, el sensor lo clava a nivel de definición. Se nota el autofocus con IA que ha metido aquí OPPO. Especialmente en selfies grupales.
El modo retrato no es tan agresivo como en cámaras de la competencia, y el procesado de imágenes tiende a acertar con el rango dinámico.
En oscuridad el OPPO Reno8 Pro saca sus dos ases bajo la manga: el trabajo conjunto del EIS con MariSilicon (en este frente con más peso), y el algoritmo Turbo RAW que elimina el ruido habitual de las tomas nocturnas.
Hemos de decir que aquí sí que se nota un salto respecto a lo que vimos en el OPPO Reno6 Pro. El trabajo del NPU es menos artificial y eso nos da un equilibrio de blancos menos agresivo. Hay que alejarse de las farolas porque tiende a anaranjarse.
Tampoco te recomendamos que uses el zoom óptico, porque arruina la definición; tanto en las capturas que hagas por la noche como en las que tires de día. En entornos muy oscuros, con buen soporte y sin mucho campo de visión esta cámara saca notable.
No se pueden poner los huevos en todas las cestas. El OPPO Reno8 Pro no hace ningún avance en el apartado de la batería. Vemos la misma autonomía y el ya conocido gestor de ahorro de energía que en el OPPO Reno6 Pro ¿Es malo? Ni mucho menos.
Sus 4500 mAh de capacidad (2 × 2250 mAh/17.50 Wh) pagan la falta de espacio que dejan los 7,34 mm de grosor, y abandonan así la idea de aspirar a redondear por arriba la cifra, como sí hace el OPPO Find X5 Pro.
La cuestión es que en más de una semana de prueba hemos notado a la batería de este terminal más que suficiente para el día a día. Dándole un uso normal la conseguimos alargar hasta aproximadamente las 40 horas de autonomía.
Es verdad que en cuanto le metimos un poco de chicha con YouTube, TikTok y algún que otro juego, el móvil se quedaba en el día de supervivencia. Es una media ligeramente inferior a lo que vemos en la competencia de igual gama, pero suficiente.
Ahora bien, la batería del OPPO Reno8 Pro no sería nada sin su gestor. Aquí el terminal hace auténticas maravillas, optimizando el consumo de forma inteligente y discreta. El modo ahorro puede ampliar un 5-10% la autonomía, y el superahorro casi un 40%.
Este último, claro, desactiva todas las funciones y te deja una pantalla sencilla con cuatro opciones; sin redes sociales, animaciones ni nada. Para sobrevivir lo vemos muy práctico. En nuestra opinión, claro, preferimos las optimizaciones recomendadas.
Son consejos de ahorro que desactivan ciertas funciones de las apps y del propio SO, y que te alargarán la batería sin casi notarlo. Reducir la tasa de refresco a 60 Hz, por ejemplo, nos da aproximadamente 30 minutos más de autonomía.
¿Qué otras cosas ofrece el OPPO Reno8 Pro? Pues un modo de alto rendimiento que eleva todos los ajustes al máximo, penando la autonomía, una sección para regular los permisos de las apps y una optimización en reposo para la noche.
Lo que más nos ha molado es la carga nocturna optimizada, una función que reduce la degradación de la batería personalizando la velocidad de recuperación de la batería por las noches.
👏👏👏 Un 10 aquí para la octava generación china. Si el terminal iguala la capacidad del OPPO Reno6 Pro, le da mil vueltas en el apartado de la carga superrápida con sus 80W SuperVOOC
Aceptamos barco con la ausencia de carga inalámbrica, pero es que el cargador que viene con el móvil lleva la batería al 100% en poco más de media hora. Si tienes prisa, en 15 minutos te lo puedes llevar con la mitad de la autonomía recuperada.
De fiabilidad no podemos hablar en tan poco tiempo, pero OPPO asegura que las celdas ofrecen hasta 1600 ciclos de carga, lo que se anda en la media del mercado.
El OPPO Reno8 Pro es un salto claro hacia adelante para la marca, que mejora todo lo visto en la sexta generación, y se acerca a los titanes del mercado. ¿Está al nivel de los Find? No, pero tiene personalidad suficiente como para no necesitarlo.
Vale que no tiene telefoto, que su NPU es demasiado discreto y que a la tasa de refresco le falta un empujoncito. Pero no se puede negar que estamos ante un terminal muy vistoso, con potencial suficiente como para liderar la gama media alta.
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