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La tablet Surface Go de Microsoft ha llegado a nuestras vidas haciendo mucho ruido, pero ocupando poco espacio. ¿Su objetivo? Ser la nueva diva de un sector en el que pocos logran triunfar. Pero, ¿cuáles son sus puntos fuertes? ¿Debería salir ahora mismo a la calle a comprarla? Pues mira, según lo que busques. Primero lee el artículo y luego ya decides.
La principal característica de este aparatejo es su reducido tamaño. Con tan solo 10 pulgaditas de nada y 522 gramos de peso, la Surface Go se presenta como la compañera perfecta para llevártela de viaje, al trabajo o incluso de cañas (y no, no como posavasos).
Pero, que no te engañen sus proporciones, porque el pequeñín de Microsoft esconde un sistema operativo de gigante, el Windows 10. De serie viene con el modo “S”, que solo permite instalar apps desde la Microsoft Store. Aunque, como sucede con toda la línea Surface, podrá actualizarse a su versión normal totalmente gratis.
Según dicen en la misma web de Microsoft, esta tablet te ofrece el rendimiento de un portátil, pero ya sabemos que no todos los portátiles son iguales. El procesador Intel Pentium Gold 4415Y que lleva y sus 1,6 GHz de velocidad nos dejan claro que, si tenías pensado utilizarla para un festival de Ilustrator y Photoshop, te tendrás que quedar con las ganas.
Microsoft también dice que este bichejo aguanta hasta 9 horas de batería, así del tirón. Como una jornada laboral pero sin parón para comer ni nada. Tendremos que ver si es cierto.
Como tablet cuqui que es, la Surface Go cuenta con unos complementos ideales para cada ocasión. Por ejemplo, añadiéndole un teclado y un ratón inalámbrico puedes convertir la tablet en un portátil, por si quieres usarla como tu herramienta de trabajo o simplemente por si te gusta aporrear letras y mover la flechita por la pantalla.
¿Que la quieres para estudiar? Pues seguramente te interese el Surface Pen para subrayar esos apartados que sí o sí van a acabar entrando en el examen. Y, ¿por qué no?, también hacer el cafre dibujando algún que otro garabato.
Para los que les gusta customizar sus gadgets están sus cubiertas personalizables más fashion y también puedes encajarla en un soporte de carga con puertos USB y Ethernet, por si te gusta rodearte de un buen puñado de cables a lo Mr. Robot.
En España salió el 28 de agosto, y podemos equiparla con 64 GB de almacenamiento y 4 GB de memoria RAM por unos 450 euros, mientras que si queremos 128 GB y 8 de RAM nos costará 600. Precios un poco por encima de lo que nos costaría, por ejemplo, un iPad.
Además, hemos de tener en cuenta que estos precios no incluyen ninguno de los accesorios que hemos comentado. Eso sí, también tienen descuentos para padres, estudiantes o profesores aunque, si eres las tres cosas, el descuento no es acumulable.
La Surface Go cuesta más o menos la mitad que su hermana mayor, la Surface Pro.
Aunque en líneas generales ambos productos son bastante parecidos en cuanto a aspecto, complementos o sistema operativo, donde notamos esa diferencia de precio entre uno y otro es en la potencia y rendimiento. Básicamente, la Surface Pro es una todoterreno perfectamente capaz de funcionar como un portátil para el trabajo diario, mientras que la Surface Go está más pensada para el ocio y para trabajar puntualmente, sirviendo más como apoyo o para tareas que no impliquen revolucionar demasiado el cacharrín. Excels y Words, los que quieras; programas de edición, los justos.
La Surface Go es una tablet muy completa para su tamaño y peso, que te permitirá usarla tanto para ver películas como para trabajar en tareas ligeras llevándotela cómodamente a donde quieras. Eso sí, no brilla por su fluidez precisamente, así que tampoco esperes maravillas.
A pesar de que el precio está un poco por encima del mercado, si tienes un trabajo que no requiere grandes rendimientos la Surface Go es una alternativa muy a tener en cuenta.
