El ping es el dato con el que se determina la velocidad de nuestra conexión a internet cuando estamos jugando online. Se mide en milisegundos y, como es obvio, a menor ping, mayor fluidez a la hora de disfrutar de nuestro ratito de ocio. Si la vida fuera perfecta, el ping, junto con el lag, sería una de las primeras cosas en desaparecer del mundo.
¿Cuánto ping tengo?
Aunque hay muchos juegos, como League of Legends, que nos permiten conocer nuestro ping de una forma muy sencilla (o de varias), hay otros con los que nos tenemos que buscar las habichuelas nosotros mismos. De ahí que, si quiero saber cuánto ping tengo, me venga bien saber cómo obtener este dato con mi ordenador.
Para ello, solo hay que seguir los siguientes pasos:
- Lo primero que debemos hacer es abrir el juego en cuestión y conectarnos a un servidor.
- Después, pulsamos el botón Windows, escribimos ‘Monitor de Recursos’ y entramos en el mismo.
- Nos vamos a Red y, debajo, buscamos el proceso que se corresponde con el título en cuestión.
- Una vez lo hayamos seleccionado, en la ventana de de debajo veremos la IP que se corresponde con dicho proceso. Ese es justo el dato que andábamos buscando.
- Lo único que nos falta es irnos al final de esa fila, hasta la columna de ‘Latencia (ms)’. El dato que veamos ahí es el ping que tenemos en el juego, ¡en función del mismo podremos jugar tranquilamente o buscar una solución!
¿Cuánto ping es bueno?
Esta, en realidad, es una pregunta trampa, ¡porque lo realmente bueno es que no hubiese ping! Se dice que con la llegada de la tecnología 5G, aunque no se llegará a esos niveles, sí que se conseguirá reducirlo a la mínima expresión. Por eso, en vez de preguntarnos cuántos ping es bueno, deberíamos preguntarnos cuánto ping es aceptable, ¿no creéis?
Por lo general, un ping de hasta 60 ms no debería suponer ningún problema a la hora de disfrutar de nuestro juego favorito. Eso sí, un ping por debajo de 20 es una auténtica maravilla. Lo ideal es que, con la evolución de las telecomunicaciones, evolucionemos a pings de 5 ms o menos, ¡ahí si contaríamos con una inmediatez prácticamente perfecta!