Esos sprites de nuestra infancia se están convirtiendo en obras de arte, estos son los mejores artistas del Pixel Art
05 Marzo 2020 - Actualizado 20 Marzo 2020
Las manifestaciones artísticas son totalmente inesperadas: se van creando corrientes y estilos que no se pueden prever. En los últimos años tenemos buenos ejemplos de la mano del arte digital, donde se desarrollan trabajos como el Pixel Art, basados a su vez en la forma de crear obras por ordenador de hace más de dos décadas.
Para las nuevas generaciones, acostumbradas a gráficos impresionantes por ordenador, puede resultar extraño, pero para los que nacieron y vivieron los años ochenta, y gran parte de los noventa, se encontrarán bastante familiarizados con el concepto “pixel”. Que es la mínima expresión del dibujo por ordenador, el punto más pequeño con el que podemos representar imágenes en una pantalla.
Así es, el Pixel Art tiene como lienzo un pantalla, y como orígenes aquellos artistas precarios en herramientas y tecnología, que dibujaban a Mario en los juegos de NES o a Guybrush Threepwood en esas maravillosas aventuras de Monkey Island firmadas por Lucasfilm.
Sprites y escenarios estaban confeccionados pixel a pixel, con la intención de que pudiéramos introducirnos en mundos completamente nuevos, toda una proeza debido a lo justos que andaban de resolución y cantidad de colores. Y la realidad es que lo conseguían, también nosotros poníamos bastante imaginación.
Sea como fuera, hoy en día no hay restricciones, se pueden realizar auténticos dibujos animados, un buen ejemplo de ello es nuestro GRIS. Pero eso no implica que el “método pixel” no haya calado hondo entre los artistas y se esté creando mucha obra utilizando técnicas y resultados más nostálgicos que eficientes.
Tampoco es la primera vez que en el mundo del arte se utilizan puntos diminutos para terminar conformando una obra, el Puntillismo es una técnica que juega con la misma idea, pero difiere en las herramientas: pinceles y lienzos:
Trabajar el Pixel Art es realmente complicado para un artista moderno, se tiene que armar de paciencia, utilizando herramientas y habilidades que hoy en día no son necesarias para crear arte bien definido. Pero es un reto y sorpresivamente el resultado final es muy atractivo.
Categorías y animación
A partir de píxeles, o forzando la imagen para que parezca pixelada, se puede dibujar cualquier cosa, pero su origen en el mundo de los videojuegos inició dos tipos claramente reconocibles: isométrico y no isométrico.
La nula capacidad de crear gráficos en 3D avivó la creatividad de los desarrolladores y encontraron una fórmula interesante basada en un ángulo isométrico, con la que se creaban mundos en perspectiva, como podéis comprobar en la imagen.
Hoy en día estos dos caminos se difuminan, pero es cierto que los artistas siguen utilizando la particular perspectiva para muchas obras. Otra cosa que se ha puesto en práctica en los últimos años es la animación del ‘Pixel Art’: utilizando formatos que pueden recoger movimiento, como el GIF, se le otorga cierta vida a las obras.
En este artículo os vamos a presentar algunos artistas reconocidos por sus trabajos con píxeles, muy activos en los últimos años:
Octavi Navarro
Desde Barcelona, conocido en el mundillo como Pixels Huh, se sitió atraído por el dibujo pixelado desde que en su casa apareció un Commodore 64. Sorprendido por lo que los primeros desarrolladores eran capaces de hacer con esas limitaciones, él pensó que podía replicar ese aspecto con las técnicas actuales.
Ha trabajado con revistas como Edge Magzine, Kill Screen o Die Welt, pero su actividad reciente más reconocida está en Thimbleweed Park, la aventura gráfica de Ron Gilbert (Monkey Island).
En realidad Valeriya Sanchill, Wanella es una de las artistas más mediáticas en el panorama actual, fantástica trabajando tanto el dibujo de píxeles estáticos, como en la introducción de animaciones y música.
Consigue generar atmósferas muy atractivas, casi siempre inspiradas en escenarios urbanos asiáticos, japoneses. Creemos que su trabajo es más interesante conocerlo en movimiento.
eBoy en realidad un colectivo artístico que ahora mismo lo forman tres personas: Kai Vermehr, Steffen Sauerteig y Svend Smital, que están afincados en Vancouver y Berlín. Han trabajado con marcas como Nike, Red Bull o Adobe, demostrando que el Pixel Art también es un recurso en acciones comerciales importantes.
Lo que proponen en sus obras es crear escenas super recargadas, normalmente ciudades con edificios y personajes de todo tipo. Nos podemos pasar horas descubriendo nuevos detalles. Hay muchas referencias a temas populares.
Otro pseudónimo para un artista del pixel, en este caso Simon Stafsnes Andersen, famoso por haber trabajado en Owlboy, el exitoso juego de factura independiente y gráficos preciosos.
Su inspiración llega del mundo de los juegos clásicos, teniendo especial cariño por todo lo que tiene que ver con Zelda. Como podéis comprobar en su web, también ilustra de una forma convencional.
Es uno de los más conocidos fuera de la escena Pixel Art, creador de juegos y producciones de animación como Gravity Falls, Scott Pilgrim: The Game o Curses N Chaos.
Si echas un vistazo a su Tumblr descubrirás sus influencias, con series como Los Simpson, Hora de Aventuras, Pokémon. Aunque es muy detallista en el trabajo de sprite, destaca por su estilo de animación, siempre basado en videojuegos.
Junkboy se llama en realidad Markus Toivonen y es el director creativo de Mojang, la empresa que está detrás de Minecraft. Le gusta jugar con vóxeles y píxeles, creando proyectos artísticos estupendos.
Como podéis comprobar en las imágenes, le gusta especialmente convertir juegos que muchos conocemos en 3D a imágenes 2D, aplicándole el aspecto retro.