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¿Os imagináis un mundo sin redes sociales? Sin grupos de Facebook, sin horas de conexión de Whatsapp, sin Trending Topics de Twitter, sin coreografías imposibles de TikTok, sin directos de Twitch, sin influencers de Instagram…
Las redes sociales forman parte de nuestro día a día y, sin darnos cuenta, se han transformado en el método de trabajo de mucha gente. ¿Alguna vez te has parado a pensar cuánto dinero gana un influencer por publicar contenido en las redes sociales?
Los fans de la reconocida serie Black Mirror, disponible en Netflix, recordarán el primer capítulo de la tercera temporada de esta serie de ciencia ficción distópica: ‘Caída en picado’.
En este capítulo, se muestra un mundo en el que las personas pueden calificar y ser calificadas con estrellas cada interacción social que realicen. De esta forma, los mejores calificados de la sociedad tienen ventajas frente a los peores valorados.
Salvando las distancias, en las redes sociales nos comportamos igual. Hacemos scroll y regalamos ‘Me Gusta’ dependiendo las fotos o vídeos que nos ofrecen las personas o marcas. Estas interacciones se contabilizan y se utilizan para medir cuánto es atractivo el contenido o el perfil.
Según el informe Digital Consumer 2020 realizado por Nielsen Global Media, los españoles pasamos 27 horas semanales conectados a nuestros smartphones. En todo este tiempo, invertimos más de 12 horas en las redes sociales (excluimos las apps de mensajería instantánea sobre todo Instagram, Facebook y TikTok, que se posicionan como las redes sociales preferidas de los usuarios.
En cuanto al contenido que vemos mientras estamos en las redes sociales, tres horas lo hacemos de la mano de influencers. Es decir, disfrutamos de su contenido, interactuamos con ellos y escuchamos sus consejos.
Definimos ‘influencer’ como una persona que cuenta con cierta credibilidad sobre un tema concreto (por ejemplo, trucos de belleza, expertos en videojuegos, cocinillas…) y por su visibilidad y presencia en redes sociales. Estos influencers realizan contenido e interactúan con sus seguidores diariamente.
Esta visibilidad y credibilidad es oro para las marcas que quieren enamorar a los instagramers, tiktokers o youtubers más afines a su línea de productos y a su filosofía como empresa. De esta forma, las marcas buscan colaborar con estos creadores de contenido y ellos hablan de las marcas que eligen aconsejar a sus seguidores.
Uno de los mitos más extendidos en los internautas es que Instagram paga a los influencers. FALSO. Instagram no paga nada; es solo es el instrumento que utilizan los creadores de contenido para trabajar con las marcas.
Por poner un ejemplo más cotidiano, es como si Instagram fuese la televisión, los influencers los distintos canales televisivos y las audiencias los followers de estos perfiles. Este es el motivo por el que redes sociales se han convertido en un nuevo canal de comunicación y, por ende, de publicidad y marketing.
A la hora de poner un precio, los influencers se pagan en base a las interacciones (‘Me Gusta’ y comentarios, sobre todo), a las visualizaciones que obtiene su contenido, al número de followers y a la calidad del contenido. Al final, realizar un contenido y ser bueno conectando con tu audiencia es un trabajo para el que no todos valen.
Pero no todas las plataformas de contenidos son esta. Algunas como YouTube o TikTok sí pagan a los creadores de contenido por sus publicaciones.
Estas plataformas también se alimentan y financian de la publicidad y de las marcas que deciden publicar sus anuncios en estas plataformas.
Por ejemplo, en el caso de YouTube, los anuncios se colocan en vídeos que tienen miles de visualizaciones para conseguir impactar al máximo número de personas. Los youtubers que han publicado el vídeo que irá después de la publicidad ganan dinero por esto.
¿Cuánto? En promedio, un canal de YouTube puede recibir 18 dólares (menos de 15 euros) por 1.000 visitas de publicidad. Si hablamos de un vídeo individual, serían de 3 a 5 dólares por cada 1.000 visitas a ese vídeo.
En el caso de TikTok, la aplicación de vídeos que triunfó durante el primer confinamiento y que se ha posicionado como la red social preferida de los adolescentes, la plataforma paga por el número de seguidores.
Según el Business Insider, las marcas pueden llegar a pagar alrededor de 100 dólares por cada 10 mil seguidores por una publicación patrocinada. Los influencers no dejan de ser influencers cuando recomienden o colaboren directamente con una marca en redes sociales.
Como ellos mismo han explicado en cientos de ocasiones, la mayoría de los creadores solo realizan publicidad de productos que les gustan, que utilizan y que creen que es interesante para sus seguidores. Es decir, la publicidad en estos perfiles les permite poder dedicar su tiempo a las redes sociales y dedicarse a ello.
Además, las redes sociales y la rama del marketing que han comenzado a estudiarlas y explotarlas como canal de comunicación y publicidad han creado cientos de nuevos trabajos que, hasta hace escasos 20 años, no existían: Community manager, Social Media Manager, Content Creator, consultor SEO y SEM…
Siempre hay que tener presente que la vida no es tan bonita como un baile de TikTok o un tuit viral de Twitter.
