¿Cómo es bailar con robots? El baile programable es lo que lo peta
28 Julio 2019 - Actualizado 02 Agosto 2019
Poco a poco se va instalando la idea de que comienzan a surgir robots de fácil uso y de programación sencilla. La industria está cada vez más acostumbrada a la automatización a través de robots, pero están surgiendo nuevos usos, quizás impensables, que comienzan a dar un nuevo aire al mundo de la tecnología.
Los cobots o robots colaborativos han llegado para quedarse. Uno de los grandes precursores de la “cobótica” es Jordi Pelegrí, Country Manager de Universal Robots en España y Portugal con más de diez años de experiencia en el ámbito de la automatización y el control de procesos industriales.
Los «cobots», los grandes desconocidos de la robótica
Cobots es un término que se escucha cada vez más. Pero ¿qué son exactamente?
Son robots diseñados específicamente para automatizar tareas en cualquier cadena de producción, trabajando junto a operarios humanos. Este trabajo mano a mano entre robots y personas es posible gracias a la ligereza de los brazos robóticos, su facilidad de programación y sus sensores de seguridad, que lo harían detenerse en el caso de que hubiera una obstrucción. Por eso, los cobots permiten eliminar las barreras físicas de seguridad. Además, liberan a los empleados de las tareas más físicas o repetitivas y, por lo tanto, mejoran el ambiente de trabajo. La alta especialización de estos robots hace que cada vez se incorporen más aplicaciones a su rango de tareas, que van desde la soldadura por arco hasta el empaquetado o el control de calidad. Otra característica importante es su alta precisión a la hora de llevar a cabo una tarea repetitiva, lo que permite mejorar la competitividad de las empresas.
De hecho la compañía de danza Sol Picó ya hizo un espectáculo bailando con un brazo robótico.
La colaboración con Sol Picó es una buena muestra de hasta qué punto los humanos y los robots van a ser compañeros de viaje. Hemos creado una pieza de danza conjunta entre la bailarina Sol Picó y el cobot UR10e, que interpretan “Un año de amor”, de Luz Casal. Sol Picó nos visitó en dos sesiones de cuatro horas y nos planteó los movimientos que quería hacer. Nuestros ingenieros programaron al momento el cobot para que acompañara los movimientos de la bailarina. Jugando con las posiciones y la velocidad del robot, y gracias a la maestría de Sol Picó, logramos programar una perfecta pareja de baile (ríe).
¿Hay alguna otra aplicación que sea distinta a la empresa, con eventos tan vistosos como el conseguido con Sol Picó?
Aunque los cobots están diseñados para trabajar en entornos industriales, es cierto que su alta flexibilidad ha servido de inspiración a otros artistas para crear con alta tecnología. Recuerdo especialmente el caso de Andrea Anner y su marido, graduados en la prestigiosa escuela de arte ECAL (Suiza). A raíz de una conferencia de Universal Robots, descubrieron que los brazos robóticos y la automatización de procesos industriales era fascinante, así que se pusieron manos a la obra para crear aplicaciones originales que ponían el foco en las interacciones humano-robot. ¿Y qué ocurre cuando un cobot y una artista se encuentran? Pues que el robot colaborativo sale del ámbito industrial y se anima a hacer burbujas de jabón, cepillar el pelo, escribir, proyectar luces y mucho más.
Para que todos lo entiendan, ¿cuáles son las diferencias entre un robot tradicional y un robot colaborativo?
Mientras que el robot industrial tradicional produce de forma masiva, ocupa mucho espacio y suele estar fijo, el robot colaborativo es compacto, ocupa poco espacio y se puede reubicar en cualquier lugar de forma sencilla. Mientras que el robot tradicional necesita barreras físicas de seguridad para evitar riesgos, el cobot se integra más en el entorno de trabajo gracias a sus sensores, que lo harían detenerse ante cualquier riesgo. Mientras que el robot tradicional necesita la pericia de un experto para empezar a trabajar, cualquier persona puede programar rápidamente un cobot.
¿Cree que existe un creciente interés en las pymes por las ventajas que ofrecen estos cobots?
Así es; los cobots están acercando las ventajas de la alta tecnología a la pyme. El rápido retorno de la inversión (inferior a un año), la alta especialización de los cobots (que puede realizar cualquier tarea repetitiva con una pericia muy elevada y en cualquier sector industrial) y las mejoras en productividad que aportan estas soluciones están extendiendo su uso. Actualmente ya hay más de 34.000 cobots de Universal Robots trabajando en fábricas de todo el mundo, pero el crecimiento en la próxima década se prevé exponencial.
Si tuviera que poner nombres y apellidos, ¿qué tipo de sectores, industrias y aplicaciones pueden beneficiarse de los cobots?
Los sectores que están liderando la cobotización de la industria son la automoción, la alimentación, el plástico y el retail, pero los cobots también están llegando a áreas hasta ahora impensables, como por ejemplo la soldadura por arco o la restauración. Estamos en un momento apasionante y efervescente en lo que a Human-Robot Collaboration se refiere.
¿Considera que se le tiene miedo a la robótica en general?
En la medida en que van cayendo las barreras físicas entre robots y humanos, también se derrumban los muros mentales. A este respecto, vale la pena detenerse en la experiencia de la compañía española RNB Cosméticos, que ha instalado seis brazos robóticos UR10 para efectuar tareas de paletizado. Al principio, algunos empleados veían con recelo la incorporación de estos cobots por el miedo de que pudieran sustituir puestos de trabajo. Sin embargo, la integración de estas máquinas ha consolidado la plantilla existente, ha aumentado el nivel de competencias del equipo e incluso ha supuesto nuevas incorporaciones derivadas del aumento de la producción.
Y si mencionamos el futuro, ¿cuáles son las tendencias en los próximos años en relación a los cobots?
Podemos destacar el aterrizaje definitivo de los cobots en la pequeña y mediana empresa, así como la posibilidad de integrar sistemas de visión artificial y otras aplicaciones dentro de una sola plataforma de desarrollo, las instalaciones móviles para que el cobot trabaje en distintos puntos de la cadena de producción, etc.