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Tengas un teléfono Android de última generación o uno que ya tiene unos añitos de vida, e independientemente de su nivel de precio, debes realizarle una puesta a punto de forma periódica. Posiblemente hayas notado que con el paso del tiempo el dispositivo comienza a ir más lento, le cuesta hacer las cosas que antes hacía con más soltura.
Mucho de estos problemas tienen que ver con el estado del sistema, que necesita espacio para trabajar. Una limpieza a fondo del teléfono, borrando todo aquello que no usamos o no necesitamos, puede ayudar bastante.
Tranquilo, no lo estás usando mal, el teléfono móvil es nuestro principal dispositivo y lo usamos para todo. Con él hacemos las fotos, en él probamos decenas de aplicaciones que a veces ni usamos, y en él se van generando muchos datos que realmente no nos hacen falta ni a nosotros ni al sistema.
Vamos a borrar elementos, tocar en algunos sitios y no está de más que tengamos copias de seguridad de las cosas importantes. Con Android es fácil, Google nos proporciona la forma de hacerlo, guardando los datos en su nube.
Al margen de que vayamos a hacer una puesta a punto del teléfono o no, nos parece recomendable que hagamos copias de seguridad, es fácil, solo hay que seguir las opciones de menú que os presentamos a continuación (Ajustes>Google>Hacer copia de seguridad):
Ya la tenemos guardada por si es necesario volver al punto en que hicimos la copia, o tenemos un nuevo teléfono y queremos pasarle esa información para continuar con nuestra experiencia.
De la misma forma que hemos hecho con el estado del sistema, podemos elegir que nos guarde las fotos. Muchas aplicaciones que utilizamos a diario tienen también la opción de guardar en la nube los datos, hagámoslo de forma recurrente, nos puede venir muy bien en el futuro.
Muy posiblemente, descargamos y probamos aplicaciones con bastante facilidad. Muchas veces las usamos una vez y pensamos que estarán ahí para volver a ser usadas con asiduidad, pero no, caen en el olvido ocupando un preciado espacio.
Momento para repasar aplicación por aplicación, siendo sinceros con su verdadero uso. Si localizamos una que no nos vale, la desinstalamos desde su icono en el escritorio, o lo hacemos desde Google Play:
En el caso de tener dudas, mejor eliminarla y dejar el espacio libre, es un proceso rápido y sencillo volver a instalarla en el momento que realmente la necesitemos. Esto es independiente de si son de pago o no, la aplicación es tuya y la instalarás cuantas veces quieras.
¿Te has parado a mirar cuántas imágenes hay en un tu carrete? Nos pegamos el día haciendo fotos, para recordar cosas o para compartirlas, a veces sin ningún sentido estético importante, por lo que terminan convirtiéndose en basura digital en poco tiempo.
Lo mismo pasa con los vídeos, con el agravio para nuestros equipos de que ocupan bastante más espacio que las fotos, especialmente si están grabadas en formatos de alta resolución, como el 4K.
La solución con todos ellos, si es que son importantes para nuestras vidas, es utilizar servicios basados en la nube para subir aquello que nos interese: Google fotos puede ser la mejor opción. Otra posibilidad es traspasar esos contenidos al ordenador o a discos externos.
Las películas y la música, cuando no son consumidos vía streaming, son recursos que nos acompañan y posiblemente ya hemos visto o nos hemos cansado de ellos. Localízalos y acaba con ellos.
Luego están las fotos que llegan a través de las principales aplicaciones, especialmente usurpadoras son las que tienen que ver con redes sociales. Nombres como WhatsApp o Telegram crean álbumes propios en tu galería de fotos, que son llamadas colecciones en Google Fotos.
Centenares de megas de información que podemos eliminar con un buen repaso.
Otro lugar donde se acumula mucho elemento de dudoso uso es la carpeta de descargas. No está de más darnos una vuelta por ahí y comprobar qué documentos, contenido multimedia y archivos nos sobran.
Es recomendable usar un explorador de archivos, como el que lleva ya el sistema operativo Android, ya que ahí veremos con mayor facilidad la información de cada elemento.
No es posible en todos los teléfonos ya que no todos tienen ranura para tarjetas de memoria, tampoco es lo más eficiente en algunos casos, ya que la memoria interna del teléfono es más rápida que las tarjeta microSD.
Pero es una alternativa muy interesante para colocar aplicaciones que usamos menos y nos liberan de espacio el teléfono. La forma de hacerlo es sencilla: en los “ajustes” de “aplicaciones” podemos “mover” la aplicación a la tarjeta.
El cambio también puede ser a la inversa, pudiendo pasar de la tarjeta a la memoria del teléfono. Hay aplicaciones, como juegos, que no nos dejan hacer estos cambios.
No confíes en aplicaciones extrañas que te prometen limpiar los archivos del teléfono, alguna de ellas de los propios fabricantes. Mejor utilizamos desarrollos como Google Files, que es una herramienta de administración bastante potente.
Nos permite liberar espacio con limpiezas, también nos ayuda a buscar archivos más rápido, incluso nos sirve para hacer copias de seguridad. Lo interesante es que nos mantiene informados sobre archivos inservibles que andan por ahí ocupando espacio.
Puede que no tengas tanto aprecio por lo que tienes en el móvil, o que ya hayas hecho las copias de seguridad y salvado de lo único que te interesa conservar. En ese caso quizá te interesa hacer un reset total del estado del teléfono, volviendo al punto inicial.
Podemos hacer que el teléfono quede tal y como vino de fábrica desde los ajustes de configuración. Entre las opciones de recuperación hay una muy descriptiva que dice “volver al estado de fábrica”, o lo que es lo mismo, borrarlo todo.
Imágenes | Angela Compagnone | Jonathan Kemper | Philipp Katzenberger | Tomasz Zagórski
