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El fenómeno de los drones no hace más que crecer. Y es que, gracias a las nuevas tecnologías y sus avances, ha sido posible su incorporación dentro de la sociedad para algunas situaciones como eventos, control fiscal o videovigilancia.
Tanto es así que, tampoco es de extrañar que se adquieran también para uso personal. ¡Si hasta podemos ver a influencers utilizándolos para grabar stories de Instagram! No se escapa ni el volcán de La Palma.
Si llevas tiempo dándole vueltas al tema, sigue leyendo e infórmate de todos los requisitos para tener un dron. ¿Qué debo saber para comprar uno?
Como en toda decisión de compra, lo primero y más importante es plantearte para qué vas a utilizar el dron.
El uso que vayas a darle, así como dónde lo vayas a pilotar, va a determinar a su vez la elección de otras características como la utilización de protectores de hélices si vas a usarlo en interiores o la autonomía de vuelo si quieres pilotarlos fuera.
Si tu idea es pillarte un dron simplemente con fines recreativos y no vas a volarlo fuera de casa, no hace falta que te gastes millonadas ya que con un “mini dron” o “dron de juguete” será más que suficiente para pasar muchas horas de diversión.
Pero, si tu intención es convertirte en todo un experto en carrera de drones, la cosa cambia. Estamos hablando de drones que requieren un generoso presupuesto, así como un buen equipo para volarlos.
El mundo de los drones no es sencillo y debes estar familiarizado con la normativa vigente y con los tipos de espacios aéreos que existen si no quieres que te llegue una multa por el uso indebido de esta aeronave no tripulada.
El organismo encargado de regular el uso de drones en nuestro país es la Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA).
Infórmate antes de comprar sobre todos los requisitos para tener un dron y volarlo que existen en cuanto a temas de registro, formación, disponibilidad de seguro obligatorio de responsabilidad civil o reglas y lugares de vuelo.
En España está terminantemente prohibido volar drones en espacios urbanos, por lo que, si tu idea era utilizarlo con tus colegas en el parque de enfrente de tu casa, te recomendamos que te plantees mejor tu compra.
No obstante, si estás pensando en comprar un dron para usos comerciales, ten en cuenta que la legislación exige a los pilotos algunos permisos y licencias de pilotaje y para volar fuera de las áreas limitadas para el uso recreativo.
Aunque lo primero que se te venga a la cabeza cuando piensas en un dron sea un vehículo aéreo no tripulado, también puedes encontrar modelos que no vuelen y que solo funcionan de forma terrestre.
Para los drones aéreos, podemos establecer una primera clasificación por el número de rotores. En la gama de entrada, lo normal son modelos de cuatro rotores, mientras que, si buscas uno más avanzado, están por encima de los 6 rotores.
A la hora de escoger tu dron RPA (Remoted Pilot Aircraft), hemos visto que una decisión importante es el presupuesto que vas a destinar.
Como ya sabes, las tecnologías avanzadas y su complejidad suelen incrementar los precios de los equipos. Por tanto, si eres principiante en este mundillo, lo mejor será que apuestes por un modelo de coste bajo para ir probando y comenzar el aprendizaje.
Puedes encontrar modelos por menos de 50 euros como el JJRC H36 o el Powerextra Mini Drone. El primero de ellos cabe en la palma de tu mano y cuenta con un giroscopio de 6 ejes para ganar estabilidad de vuelo. Lo tienes disponible en Amazon por 28,70 euros.
Otra franja de precios sería la de los drones por menos de 500 euros. Van orientados a aquellas personas que quieren un nivel superior, con cámaras de más calidad o vuelos más largos y complejos como el EACHINE EX3 o Potensic Dreamer.
A partir de los 500 euros, los drones ya se centran más en aspectos como la grabación y creación de contenido, ofreciendo una autonomía y alcance considerable, como es el caso de DJI Mavic Air 2.
Vamos con otros de los requisitos más decisivos a la hora de elegir un dron para exteriores. El alcance y la autonomía son las cuestiones que realmente van a marcar la diferencia entre un dron más de entretenimiento y los destinados a usos profesionales.
En primer lugar, debes considerar la autonomía de vuelo que proporcionan las baterías del dron. De media, el tiempo de vuelo suele oscilar entre los 7 y los 30 minutos.
Esta limitación en el tiempo de vuelo supone la necesidad de comprar baterías adicionales si no quieres tener que esperar 40 minutazos a que tu dron se cargue.
No obstante, el asunto de las baterías es complicado ya que no todas las marcas son compatibles con todos los modelos y pueden ocasionar daños a tu aeronave por lo que será mejor que te asegures bien antes.
La autonomía va de la mano del alcance. De esta forma, si el dron tiene mucho alcance y poca autonomía, corre el riesgo de llegar a su punto de no retorno demasiado rápido, por lo que tendrás que ir en su busca más veces de las esperadas.
A su vez, el alcance está directamente relacionado con la potencia del controlador desde el que pilotarás el dron, que puede enlazarse de dos maneras diferentes:
A nivel europeo, si quieres pilotar un dron, es obligatorio que cuentes con un seguro RC, por lo que es un aspecto que también tienes que considerar.
Puede que te estés preguntando por qué es necesario tener asegurado tu dron. Pues bien, la tecnología no es perfecta y puede fallar en cualquier momento. Estamos hablando de dispositivos que se encuentran a gran altura, imagínate la que se podría liar si se caen.
Lo bueno de esto es que puedes encontrar seguros muy baratos, entre 20 y 30 euros para drones recreativos o incluso existen seguros de días para los profesionales.
Un dron no es un juguete, hay que hacer un buen uso de él y proteger a los demás.
Si tu intención es comprar un dron para realizar fotos y grabaciones aéreas, la calidad de la cámara es un punto clave para la elección de tu RPA.
Es lógico pensar que a más barato el dron, peor calidad de imagen ofrecerá su cámara integrada. Por ello, si estás pensando en comprarte un dron para conseguir contenido audiovisual, valora bien este aspecto.
Existen modelos de drones con cámaras integradas que filman en 4K. El mínimo exigible actualmente es una resolución Full HD, pero también puedes encontrar otros modelos con mejor resolución sin que suban mucho de precio.
Y, eso no es todo. También puedes encontrar drones a los que montar tu propia cámara, siempre teniendo en consideración aspectos como la estabilidad, la resolución o el zoom. Los más avanzados y profesionales incluso pueden instalar cámaras réflex en su parte interior.
Como has podido comprobar, comprar un dron no es una decisión fácil. Hay muchas cosas que tienes que saber, sobre todo si vas a gastarte mucho dinero en él.
Por eso, al margen del resto de cosas de esta guía para comprar drones, debes darle la importancia que se merece al mantenimiento para aprovechar al máximo tu aparato:
Especialmente si eres principiante en el mundo de los drones, lo más seguro es que las primeras veces que lo uses se lleve varios golpes. Por eso, es importante acceder a repuestos cuando los necesites.
Antes de comprar tu dron, averigua si puedes disponer de los repuestos necesarios y cuenta con una empresa de mantenimiento y reparación de drones de referencia por si las moscas.
Por último, recuerda que toda persona que quiera manejar un dron necesita un certificado de piloto. Si esto te echa un poco para atrás, no te preocupes. Puedes obtener este carnet de forma online y 100% gratuito, por lo que no te llevará nada de tiempo.
Además, tiene una gran ventaja y es que te permite trabajar. Puedes obtener beneficios realizando fotografías o vídeos y vendiéndolos.
No obstante, si lo que quieres es hacer operaciones en alguna categoría específica, sí que te harán falta otro tipo de titulaciones.
En el futuro ir por la calle y ver decenas de drones haciendo todo tipo de cosas será bastante habitual, pero hoy por hoy este mundillo todavía está en desarrollo. Por eso si quieres pillarte un buen modelo tienes que estudiar bien el contexto.
