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¡No lo tires! 19 buenos usos que le puedes dar a tu teléfono antiguo

19 Diciembre 2020 - Actualizado 16 Noviembre 2021

Es ley de vida, todo el mundo tiene un teléfono que va a ser sustituido por otro más moderno y capaz, con suerte terminará ocupando un lugar en un cajón sin darnos cuenta que su vida útil podría seguir adelante. ¿Has pensado en cómo aprovechar un teléfono antiguo?

Las estadísticas hablan de cerca de mil millones de teléfonos que ya no están en uso en la Unión Europea, pero que tampoco han sido reciclados o desechados por sus dueños. La recaudación que se puede hacer de sus materiales o darle una segunda vida es algo que deberíamos tomar como una responsabilidad.

Obviamente depende mucho del tipo de teléfono que sea y el estado en que se encuentre, pero un dispositivo del último lustro es bastante capaz de hacer muchas cosas bien, especialmente si cuenta con conectividad WiFi, cámara o GPS. Podremos descargar de funcionalidades al teléfono principal, o descubrir nuevas tareas que son ideales para él:

1. El teléfono suplente

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Es la primera opción que se nos viene a la cabeza y estamos seguros que es algo que contempla la mayoría de la gente: lo dejo ahí en el cajón y si le pasa algo a mi teléfono, aquí está el teléfono suplente, esperando su segunda oportunidad.

Mejor que no ocurra, pero sí, nos puede salvar la vida tener un teléfono de repuesto.

2. El teléfono de batalla y deporte

Tu teléfono principal está impoluto, pero quieres ir a realizar actividades de “riesgo” y no te apetece nada que le pase algo al teléfono titular. Pues el suplente que os presentamos en el punto anterior está siempre dispuesto a echarnos una mano.

Salir de fiesta, ir a la playa o realizar actividades deportivas son algunos de los escenarios que se nos ocurren para cambiar de móvil e ir en modo “seguro”. En el deporte es especialmente interesante, ya que el GPS y las apps nos permiten contar con un monitor de actividad. Solo tendrás que buscar un buen brazalete.

3. Tu mando a distancia alternativo

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Así es, tu antiguo teléfono puede convertirse en un estupendo control remoto de la tele y otros dispositivos que se dejen manejar por él. Es posible que tu teléfono cuente con sensor de infrarrojos, con una aplicación podremos convertirlo en el mejor mando.

También hay teles que permiten el control a través de la conectividad WiFi, solo hay que colocar a ambos en la misma red. Ganamos un mando a distancia extra, incluso uno que es más cómodo que el que traen algunos dispositivos de serie: se nos vienen a la cabeza mandos muy pequeños con muy pocos botones.

4. Conviértelo en un Google Home

Nos invaden los altavoces inteligentes, y la verdad es que son bienvenidos ya que nos hacen la vida más fácil al poder usarlos sin tocar un botón o poder realizarles consultas. Si tienes un teléfono Android y unos altavoces que se conecten a ellos, también tienes un Google Home.

El teléfono Android tiene que ser lo suficientemente moderno para contar con el Asistente de Google. Solo habrá que configurarlo para que esté esperando nuestro “Ok Google”.


5. El teléfono VoIP

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Si no tienes teléfono fijo en casa pero te gustaría contar con algo parecido, puedes conectar el móvil a la red WiFi y configurarlo como un teléfono VoIP, es decir, las llamadas las realizarás a través de Internet, sin tener que meter una tarjeta SIM.

Obviamente hacen falta aplicaciones con las que realizar las comunicaciones, se nos vienen a la cabeza varias con las que ya nos hemos familiarizado bastante: Skype, Viber o Tango. Son además una puerta a las videollamadas.

6. Un monitor para el bebé

Aquí te hacen falta un par de teléfonos, pero vamos a conseguir tener controlado al pequeñajo con aplicaciones como Cloud Baby Monitor o Dormi. Nos mandará en streaming el vídeo de lo que está ocurriendo en su habitación, incluso es posible configurar alertas ante situaciones como movimientos o lloros.

La comunicación puede ser en ambas direcciones, consiguiendo que el receptor hable a distancia, o reproduzca música e imágenes relajantes.

7. Como almacenamiento de memoria

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Eso es, piensa que tu móvil se puede convertir en un disco duro portátil o pendrive. Dependiendo de la cantidad de memoria que cuente, será más o menos útil, pero en todo caso nos servirá para transportar y guardar fotos, vídeos y archivos a otros lugares.

Solo necesitamos un cable USB OTG con el que poder conectarlo a otros dispositivos y saber usar el explorador de archivos de tu teléfono para tenerlo todo bien organizado.

8. Afinador de instrumentos

Si tocas algún instrumento musical o vas a comenzar con ello, tienes que saber que hay una infinidad de aplicaciones que te pueden ayudar con tu aprendizaje, especialmente en lo que respecta al afinamiento. Tu viejo teléfono se puede convertir en un compañero ideal de una guitarra, ukele o bajo.

9. La mejor videoconsola “retro” portátil

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Ya os contamos la forma de convertir un teléfono en toda una consola portátil. Aprovechando el artículo no se nos ocurre una mejor “segunda vida” para un dispositivo móvil, que aunque nos parezca viejo tiene bastante potencia escondida.

Al menos la potencia necesaria para ejecutar emuladores de consolas del pasado como Super Nintendo, Mega Drive o GameBoy. Con este nivel de gráficos, nuestros teléfonos, por muy antiguos que sean, no tendrán problema.

10. La primera cámara de los pequeños

Si te gusta la idea de que tus pequeños tomen conciencia fotográfica y una cámara te resulta un artilugio complejo y delicado, puedes probar a dejar el teléfono antiguo para esta función. Las cámaras de los móviles funcionan sin tarjeta ni conectividad, pueden experimentar con al foto y el vídeo.

Siempre podemos subir un nivel, conectándola a WiFi, descargando alguna aplicación de retoque y compartiendo lo que realizan en algún grupo familiar.

11. Un dispositivo para las videollamadas

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Si tu teléfono tiene una buena cámara frontal y está en forma para hacer videollamadas con Skype o Facetime, puedes usarlo como dispositivo dedicado para esto, dejando el teléfono principal libre para otras actividades que poder realizar al mismo tiempo.

También se queda libre por si alguien más en la casa quiere realizar videollamadas a familiares o amigos.

12. La pantalla del teléfono como trackpad de tu ordenador

Imagina que te quedas sin ratón, teclado o trackpad en el ordenador, o simplemente no te funcionan muy bien, pues debes saber que hay aplicaciones - Unified Remote, Mouse Kit, Remote Mouse - que te convierten la pantalla del teléfono en un trackpad alternativo. A lo mejor no es la opción más cómoda, pero puede salvarte la vida en alguna ocasión.


13. Una Dashcam para el coche

¿Sabes lo que es una Dashcam? Es un gadget muy extendido en algunos países del planeta, pero bastante desconocido en España. Se trata de una cámara que graba todo lo que acontece mientras conduces. Podemos convertir nuestro antiguo teléfono en una, utilizando su cámara y un buen soporte.

Eso sí, no usamos la cámara por defecto del teléfono, en su lugar elegimos una aplicación como AutoBoy Dash Cam, que prepara el teléfono para grabar de forma continua.

14. Marco de fotos digital

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Posiblemente nuestro teléfono no tenga una pantalla gigante como para convertirlo en el marcos de fotos ideal, pero podemos ubicarlo en lugares recogidos como un escritorio, donde las fotos y recuerdos luzcan mejor.

Necesitarás una carcasa con pie para que el teléfono se mantenga de pie, además de una aplicación que permita mostrar un carrusel de imágenes: Digital Photo Frame Slideshow en Android o Picmatic en iOS. Si tenemos una tablet antigua, podemos usarla para esto.

15. Un despertador

A muchos no les gusta tener el teléfono principal encendido durante la noche, así que puedes usar el antiguo. Busca un soporte, descarga una aplicación de reloj despertador - Timely, Sleep Cycle - y convierte a tu teléfono en la mejor opción para levantarte por las mañanas. Es una forma de seguir en sintonía con tu preciado teléfono

16. Un lector para todo lo que se te ocurra

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Si te gustan los libros o los cómics, tienes un decente lector en tu teléfono móvil. La pantalla suele ser pequeña, pero no mucho menos que un lector de libros convencional, y la resolución bastante alta.

Si lo que te agrada es que te lean los libros, más que leerlos, echa un vistazo a servicios como Audible. Puedes colocarle un altavoz inalámbrico o unos auriculares para hacer que la experiencia sea más inmersiva.

Obviamente si lees libros y los escuchas, lo más lógico es que también te guste escuchar música o radio. ¿Qué mejor dispositivo que un teléfono inteligente? Tenemos acceso a todas las aplicaciones de streaming, solo nos hace falta una conexión WiFi. Lo mismo podemos decir del vídeo para las series o las pelis.

17. Una cámara de vigilancia

De una forma parecida a la cámara de vigilancia para los bebés, también podemos usar el viejo teléfono para situaciones de seguridad: controla a tus mascotas, la entrada de alguien en una habitación, etc.

Apunta con la cámara hacia el lugar que queremos monitorizar y carga alguna aplicación de vigilancia doméstica: Presence, Manything, AtHome Camera, IP Webcam, SmartCam Webcam, o Heden VisionCam.

18. Un GPS para el coche

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Es una de las funcionalidades más interesantes que podemos tener en un teléfono que no usamos, ya que estos han sustituido prácticamente a los navegadores dedicados, gracias a las aplicaciones y la calidad del receptor GPS que utilizan.

De esta forma tenemos el teléfono principal libre y no consumirá tanta batería. Eso sí, para usar aplicaciones como Waze o Google Maps hay que tener conectividad móvil para un funcionamiento ideal, pero es posible usar algunas que almacenan los mapas en local.

19. Dona el teléfono o recíclalo

¿No le encuentras una utilidad real? ¿No tienes apego por un producto que te ha acompañado un largo tiempo? Pues dónalo o recíclalo, de esta forma contribuirás al cuidado del medio ambiente o a la democratización de la tecnología.

Hay organismos sin ánimo de lucro como Amnistía Internacional o Intermon Oxfam, que ayudan a que podamos enviarlos de forma sencilla hasta personas que pueden aprovecharlos o sus componentes sean reciclados.

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