Cinco años después del lanzamiento de GoW: Ascension, se estrenaba la nueva saga de God of War. ¿Ha merecido la pena la espera? Te contamos qué es lo que lo hace especial y qué lo diferencia de las sagas anteriores. Además, te traemos algunos consejos y trucos para que le saques el máximo partido a este juegazo que seguro que va a dar mucha guerra en tu PlayStation 4.
Una historia de peso, contada como nunca
En este caso, eso de que lo bueno se hace esperar, era verdad. El juego cuenta la historia más cercana y personal de la saga, con una narración más robusta y profunda a la altura de las mejores series de ficción.
Se reemplaza la mitología griega por la mitología nórdica que tanto nos ha cautivado a lo largo de los capítulos de Vikingos, y se cuenta la historia de un padre, Kratos, y su hijo Atreus. Los de Santa Monica Studio (desarrolladores de la saga) han querido dar relevancia a los vínculos familiares al contar una relación padre-hijo, una apuesta que suele salir bien con grandes casos de éxito como el de Darth Vader y Luke Skywalker o el de Juan y Esteban, los protagonistas de la adivinanza “este banco está ocupado por un padre y un hijo…”
Algo que caracteriza a God of War 4 es que prescinde de cortes explicativos y se centra en que la la historia avance a través de las conversaciones de sus personajes, con diálogos naturales y fluidos, ya que hablarán entre ellos de manera constante sobre todo tipo de temas, menos de sexo, claro. Sea en la actualidad o en la mitología nórdica, hay temas entre padres e hijos que siguen sin tocarse demasiado. El hecho de que todo suceda en tiempo real atrapa y seduce a cualquiera que pruebe el juego.
Visualmente, es para exponerlo en un museo
En cuanto al aspecto técnico, es imprescindible hablar de la revolucionaria e impresionante utilización del plano secuencia que hay durante todo el juego, lo que convierte las horas de juego en una experiencia cinematográfica sin precedentes en la saga.
A ello también contribuye el especial mimo y cuidado con el que se tratan otros aspectos como la colocación de la cámara y su movimiento, algo que no suele verse en otros videojuegos, pero que cada vez tomará más protagonismo.
Otra muestra de ese cuidado es el Modo Foto, un modo disponible desde la actualización 1.21 del juego en PlayStation 4. Al entrar a este modo, el juego se pausa y permite manipular cosas como la posición de la cámara, la exposición, la apertura de foco, además de aplicar filtros y otros detalles. ¡Incluso permite modificar las expresiones faciales de los dos protagonistas! En definitiva, nos invita a formar parte en la creación del juego, tocando sus entrañas para que todo esté a nuestro gusto.
Los piñazos, más reales que nunca
Si bien en sus inicios, allá por 2005, el juego destacaba por sus brutales y frenéticos combates, hay una enorme diferencia respecto a los combates de esta nueva saga. No es que ahora sean flojos o suaves, de hecho, da la sensación de que los combates son más reales que nunca, ya que resultan cercanos y viscerales. Para quien quiera estudiar medicina, bien puede usar este juego como curso introductorio para acostumbrarse a presenciar heridas y sangre con un realismo que ya quisieran muchas películas.
Este tipo de combates recuerda a algunos jugadores a grandes títulos como The Last of Us o la saga Uncharted, aunque la experiencia en el GoW es totalmente distinta a los demás, ya que permanece dentro del estilo del juego.
Cada maestrillo tiene sus truquillos
God of War es un juego lleno de trucos y secretos, muchos más de los que se pueden pensar en un primer momento. Ya existen algunas guías con consejos y fórmulas (¿o deberíamos decir trampas y trucos?) que cuentan cómo conseguir, por ejemplo, más oro, plata o EXP en el juego, o dónde encontrar todos los hallazgos o coleccionables, o cómo hacerse con el Guantelete Quebrado. Por cierto, ¿estamos todos de acuerdo en que ‘guantelete’ es una de las palabras más maravillosas del español?
Algunos de ellos son verdaderamente interesantes. Por eso, queremos contarte cómo descubrir los reinos opcionales y cómo puedes ver el final secreto del juego, ¡y además lo vamos a hacer sin spoilers! Saca bolígrafo y papel y apunta.
Los reinos, como las asignaturas más divertidas, las opcionales
Durante la historia del juego se descubrirán la mayoría de reinos nórdicos, sin embargo, dos de ellos son opcionales y están reservados para la recta final de la experiencia: Muspelheim y Niflheim.
Para llegar a ellos, se necesitan los códigos de cifrado, un tipo de coleccionable que se encuentra esparcido por otros reinos. Puede ser que te estés preguntando, ¿pero dónde están, que yo no los veo? Busca bien, que estar, están. Para conocer el reino de Muspelheim, encontrarás tres de los cuatro cifrados necesarios en el reino de Midgard, concretamente en la Cueva de la Bruja, en La Cumbre, y en la Torre de Midgard. El cuarto se encuentra en Alfheim, justo junto a la barca que tomas la primera vez que llegas a este reino. ¡Shhh! ¡Si te preguntan, nosotros no hemos dicho nada!
El secreto está en el final secreto, como su propio nombre indica
Son muchos los juegos que acostumbran a guardar un final secreto cuando se completan al 100%, pero ese no es el caso con lo nuevo de God of War. El final secreto, en este caso, está disponible para todo el mundo una vez superada la historia, independientemente del porcentaje al que se haya completado del juego.
¿Cómo puedes verlo? Toma nota: al final de la historia, cuando se regresa al Templo de Tyr, los enanos que ayudan durante la partida recomiendan que volvamos pronto a nuestro hogar. Si les hacemos caso, y al volver hasta el hogar de Kratos y Atreus nos tumbamos en la cama (como se suele hacer al regresar de un viaje así), al interactuar con ella, ambos se irán a dormir, y dará comienzo el final secreto de God of War. Y así, encima, nos cuelan una moraleja: que irse a dormir pronto tiene recompensa.
¡Nadie es perfecto, ni siquiera el GoW!
Si bien es cierto que, en general, el juego ha sido bien recibido y los usuarios parecen estar más que contentos, hay algunas quejas y críticas en el libro de reclamaciones que también queremos contar.
Algunos jugadores señalan echar de menos la variedad de enemigos que había en las sagas pasadas, mientras otros se sienten decepcionados por tener que esperar a la secuela para continuar con la historia de Kratos. En el aspecto técnico, aunque las quejas son pocas, ya que todos coinciden en que en este sentido el juego es uno de los mejores de la PS4, algunos usuarios cuentan haber tenido molestias causadas por cambios bruscos en los fotogramas por segundo en momentos puntuales. ¡Que todo lo malo sea eso!
En realidad, el juego tiene poco que criticar. En definitiva, se puede decir que GoW es un entretenimiento complejo y cerebral, que al mismo tiempo supone toda una experiencia visual y sensorial para el jugador. Por todo esto, no es de extrañar que ya se le considere como uno de los juegos para consola más cuidados y redondos de esta generación.