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Los autónomos se reconocen a simple vista: suelen ir corriendo a todas partes, pegados a su móvil, escuchando a su cliente con la mirada fija en el infinito (exactamente el número de tareas que le quedan por hacer) mientras, mentalmente, planean su próximo presupuesto.
Para que los autónomos no acabéis en peligro de extinción por agotamiento, queremos descubriros 6 apps que no pueden faltar en vuestros smartphones. Aquellas que lograrán unificar por fin vuestra vida personal y profesional en un calendario perfecto y os permitirán organizar vuestras tareas para disfrutar como es debido de ese oasis de paz llamado “parón para el almuerzo”. Además, son ideales para trabajar a distancia con clientes y equipos en cualquier parte del mundo.
Trello es una grandísima forma de comenzar. Se trata de un organizador muy sencillo y más útil que una gran To Do list. Todos tus trabajos ordenados en columnas: las ideas, las que están en proceso y las completadas. Tan solo le falta una trompetita de felicitación cada vez que termines una tarea.
Puedes usarlo online en su página web, descargártelo en el escritorio o en tu smartphone, aunque tras unas semanas usándolo, desearás instalártelo en el cerebro para tener la cabeza tan estructurada. Sirve tanto para iOS como para Android. En su versión gratuita soporta archivos de hasta 10 MB y puedes vincularlo con tu cuenta de Google Drive o Dropbox. Importante, que quien avisa no es traidor: incorpora deadlines para que no se te pase absolutamente nada.
Si algo hemos aprendido de los Vengadores, es que los superhéroes trabajan en equipo. Si es tu caso, no debes perderte Asana. Esta app que permite pasar los correos de Gmail directamente a tareas compartidas y adjudicárselos a un compañero, ahorrándote el trabajo de traspasar la información y el peligro de caer en un teléfono escacharrado. Tan solo por la satisfacción que tendrás al comprobar que has encargado unas “botas rojas de piel” como te pedían, en lugar de unas “estilo indio piel roja”, ya merece la pena.
Puede usarse en iOS o Android. Su versión gratuita permite trabajar hasta con 15 personas, puedes sincronizarla con Apple Calendar o Google Calendar, te avisa de alertas importantes aunque la app esté cerrada y permite establecer prioridades. Vamos, un lujazo de herramienta que debes incorporar ya a tu día a día.
Todo freelance conoce ese desesperado estado de nerviosismo, que se traduce en mirar el móvil compulsivamente cuando ni siquiera ha vibrado. ¿Esperando a ver si aparece un encargo que te solucione el mes? ¿Evaluando una propuesta que no puedes llevar a cabo solo? Para eso está Freelancer. En este gran ágora de ideas y negocio encontrarás nuevos proyectos cuando estés ocioso y ya te hayas pasado todos los niveles de Candy Crush, así como profesionales dispuestos a sumarse al tuyo.
Con Mobills podrás liberar al pequeño economista que llevas a cuestas a diario. Para que no soportes ese peso tú solo está Mobills, el Ministerio de Economía de tu casa, en tu móvil. Nunca fue tan fácil hacer un seguimiento de tus gastos con gráficos y porcentajes. Además, también puedes crear huchas para invertir en tu negocio y organiza los ingresos y gastos por categorías.
Se puede usar tanto en iOS como en Android y su versión gratuita es suficiente, pero por 25 dólares al año también podrás controlar tus tarjetas de crédito, exportar PDFs o Excels y recibir avisos para no saltarte pagos. Todo lo necesario para que cuelgues de una vez por todas los guantes del ring de las finanzas, en el que un imponente Excel te noquea cada trimestre.
Si eres de los que todavía tiene el coche y el despacho a rebosar de papeles, necesitas Camscanner. Así, en cuanto un proveedor te de una factura, tú sacas tu móvil, escaneas el documento y te lo envías para archivarlo digitalmente. Mejor también guardarlo en papel, por si algún día hay un apocalipsis y los ordenadores fallan. Pero lo cierto es que ya podrías usar el papel para que tus hijos dibujen, o para envolver el bocadillo del día siguiente porque no creemos que vayas a necesitarlo más.
En los ochenta, un cocinero llamado Francesco Cirillo se dio cuenta de que nuestra atención se mantiene al máximo tan solo durante 25 minutos. Para calcular esos intervalos de tiempo, el bueno de Cirillo usaba un temporizador de cocina con forma de tomate y, como tomate en italiano es pomodoro, así es como bautizó a su peculiar técnica.
Hoy en día, para usar esa técnica de forma sencilla y moderna ya no necesitas un reloj de cocina. Existen apps para iOS como Flat Tomato o para Android como Brain Focus, que te avisan cuando tu “pomodoro time” ha llegado al final de su tiempo productivo. Solo tienes que tomarte un pequeño descanso y continuar, concentrado y eficiente como un tomate recién salido de la huerta.
Tómate un pequeño descanso y continúa, concentrado y eficiente como un tomate recién salido de la huerta
Ahora ya tienes todas las herramientas clave para lograr que tu día a día sea un pelín más llevadero. Úsalas sabiamente y sigue demostrándonos que con trabajo y esfuerzo, cualquier sueño puede cumplirse.
