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Es posible que ya encuentres protegida tu vida digital de diferentes maneras; sea por tu propio interés o porque el sistema que utilizas ya cuenta con sistemas de seguridad que están funcionando sin ser demasiado consciente de ello. Hablamos de herramientas de seguridad como los antivirus o los firewalls.
Sea como sea, si estás preocupado por conocer más sobre ello, en este artículo te vamos a explicar de forma sencilla qué son esos “cortafuegos digitales”, cómo funcionan, y los tipos principales de firewalls que nos vamos a encontrar.
Si nos vamos a la analogía con la naturaleza, un cortafuegos es un espacio de terreno rural en el que no hay vegetación.
En el caso de incendio el fuego pararía ahí ya que no encuentra material para avanzar quemando. Desde el mundo tecnológico podemos decir que un firewall es una barrera que se crea entre tu ordenador y los peligros del mundo exterior.
Mejor conocido en el mundillo informático como firewall, es un sistema de seguridad que bloquea accesos no autorizados en tu ordenador. Lo complicado de su misión es que al mismo tiempo debe dejar que el resto de comunicaciones fluyan.
Para determinar qué circula y qué no, existen una serie de reglas preestablecidas, en unos criterios de seguridad que en sistemas modernos no paran de cambiar. Estos están basados en el análisis constante, ya que las amenazas no paran de evolucionar.
La barrera puede estar construida tanto con hardware como con software, o bien una combinación de las dos.
Los mecanismos físicos o hardware los podemos encontrar en dispositivos como routers, mientras que el software o barrera lógica suele venir instalada en el sistema operativo, aunque también hay aplicaciones de terceros que hacen esta función.
Es importante conocer que un firewall es un complemento de otras herramientas de seguridad. Un cortafuegos no puede hacer nada contra un malware que ya está dentro de tu ordenador, eso es trabajo del antivirus. Su misión es detectar y bloquear el acceso antes de que ocurra.
Siempre hablamos de ordenadores, pero es bienvenido el concepto de cortafuegos en cualquier máquina que se vaya a conectar a Internet: ordenador, servidor web, teléfono inteligentes, gadgets IoT, etc.
Va a protegerte a ti o a tu sitio web frente a malware, intrusiones en tu computadora de usuarios no autorizados, ataques de fuerza bruta para descubrir tus credenciales o ataques DDoS.
Tenemos que entender que siempre que visitamos una web nos estamos conectando a otro ordenador, a otro equipo, que es conocido como servidor web. Todos los elementos que conforman la red y se están comunicando pueden recibir ataques, por eso debe existir una protección intermedia entre ellos.
La tarea principal del cortafuegos es la de monitorizar todos los “paquetes” de información que entran y salen de nuestro equipo. Si detecta alguno sospechoso, lo bloqueará instantáneamente para que no llegue a su destino.
Su posición podemos decir que estará entre la red local e Internet, desde ahí gobernará el tráfico. No solo bloqueará amenazas, también se pueden crear filtros para decidir qué es lo que realmente quiere que circule hacia nuestra red, incluso suelen incluir protecciones contra los virus más comunes.
Como parece obvio lo más complejo de un firewall es crear una configuración equilibrada, que sea tan restrictiva como para bloquear las amenazas importantes, como permisiva para que el funcionamiento sea fluido.
Por eso hay que confiar en soluciones de empresas especializadas en seguridad y en las que llevan los propios sistemas operativos.
Además de la división física y lógica que hemos descrito con anterioridad, existen diferentes tipos de cortafuegos, diseñados para funcionar de forma diferente y bloquear un tráfico concreto de paquetes, según necesidades.
Los que más nos interesan a nosotros son los cortafuegos de tipo personal, para instalar en un equipo. Existen también cortafuegos de software, de estado, cortafuegos de las aplicaciones y de próxima generación.
No bajes la guardia, utilizar un cortafuegos siempre es una buena práctica. Si tienes Windows 10 ya llevas uno en el sistema, en el caso de OS X también está presente pero tienes que activarlo en las preferencias.
En cuanto al hardware, nuestros routers también cuentan con módulos que se encargan de filtrar amenazas básicas. Para una protección completa la apuesta debe ser por un firewall de próxima generación, junto a un buen antivirus, además de seguir tomando todas las precauciones posibles al navegar.
