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No hay ningún otro simulador más conocido en el mundo de los ordenadores, Flight Simulator es el título por excelencia cuando se habla de emular aviación civil en un monitor. Afortunadamente para sus seguidores hoy se estrena una nueva entrega que pone punto y seguido a un paréntesis demasiado largo en lo que respecta a sus actualizaciones.
Desde 2006 no habíamos tenido noticias sobre este querido juego de Microsoft, ha tenido que pasar más de una década para encontrarnos con una puesta al día tan deseada como merecida. Desde la empresa de Redmond han considerado que ahora es el mejor momento de hacerlo, potenciando su oferta de ocio tanto en ordenadores como en Xbox.
La tecnología actual ha permitido a los desarrolladores de Asobo Studio realizar un juego majestuoso desde el punto de vista técnico, con un nivel de detalle incomparable, y lo que es más importante, jugable desde muchos niveles de ordenadores y una consola como es Xbox. Tenemos plataforma de vuelo para la próxima década.
Hacemos hincapié en un detalle muy importante, como todos los juegos “fist party” de Microsoft, este Flight Simulator 2020 forma parte del programa Game Pass, es decir, está dentro del servicio de suscripción de la casa. Además de en la tienda de Microsoft, también está disponible en Steam.
Si estás un poco perdido con esta saga de aviación y quieres recorrer de forma resumida la historia desde 1982 hasta nuestros días, no podemos hacer otra que recomendaros el vídeo que han preparado los desarrolladores de la franquicia.
Además de un homenaje a cada título de Flight Simulator, podemos descubrir la evolución técnica que hemos vivido en todos estos años:
Es un simulador y el realismo es algo que debe primar, tanto en opciones como en presentación. La verdad es que en ninguna de las dos cosas se ha quedado cojo, presentando un acabado gráfico incontestable.
El sistema fotorrealista implementado está basado en imágenes sacadas directamente de satélites, más concretamente de los mapas de Bing. Se consigue un nivel de fidelidad impresionante, pudiendo hacer vuelos rasos con la intención de buscar edificios reconocibles, incluso donde vivimos.
Pero si hay un detalle curioso en este juego es el extensivo uso de la nube que realiza, aprovechando el poder que tiene Microsoft en este campo: lo ideal es jugar conectados a la red ya que el juego descarga en tiempo real muchos datos relativos al tráfico aéreo, la meteorología, incluso el paisaje.
Un punto aparte es la recreación de aviones y el interior de las cabinas, realizadas con un escaneado mediante láser de los modelos reales. Jugado en sus especificaciones más exigentes nos está presentando un título que realmente podemos considerar como de nueva generación, no solo por el detalle, también por los efectos de iluminación.
Microsoft propone retos e iremos viendo crecer en número las posibilidades del juego, pero el modo libre es realmente el punto fuerte de Flight Simulator: crear una ruta es muy sencillo, solo hay que tomar un inicio y destino, hay hasta 40 aeropuertos recreadas de forma artesanal, y más de 37.000 pistas en todo el planeta a tu disposición.
En el lanzamiento del juego hay 20 modelos de aviones disponibles para la versión estándar, que suben a 25 en deluxe y a 30 en la edición premium. En mucho tiempo no vamos a necesitar más ya que todos son muy diferentes en diseño y control.
Gracias a los datos de Meteoblue en el juego podemos ver el tránsito aéreo de todo el planeta en tiempo real, afectándote directamente a ti y tu situación de vuelo. La meteorología es uno de los aspectos más trabajados, pudiendo elegir nuestras propias condiciones con herramientas personalizadas, desde el propio vuelo.
Cuando visitamos ciudades o zonas interesantes, puedes ordenar al copiloto que lleve el avión y usar el modo drone: nos ofrece una cámara libre por el lugar que sobrevolamos, además de herramientas fotográficas para tomar los mejores recuerdos.
Esto es un simulador de vuelo muy profundo, pero Microsoft ha teniendo en cuenta que hay mucha gente que puede tener cero experiencia en este tipo de títulos y le apetece adentrarse en él. Solo nos pide que tengamos un afán explorador para disfrutarlo, ya que hay muchas ayudas para el vuelo que nos permitirán dar nuestros primeros pasos.
Pero no hay que engañar a nadie, hace falta pasar por tutoriales y el desarrollo inicial es lento, por no hablar de la experiencia de vuelo real, que puede durar horas. Pasaremos mucho tiempo pendientes de los sistemas del avión, las comunicaciones desde torres de control, pero sobre todo, viendo paisajes maravillosos.
Es un juego históricamente creado para ser jugado en ordenador, donde la multitud de periféricos nos permite recrear con mayor garantía la experiencia: teclados, joysticks, ratones, etc. Y así es posible seguir jugándolo.
Pero para esta ocasión Microsoft ha querido que Flight Simulator sea totalmente jugable desde un simple mando de Xbox. Los chicos de Asobo Studio se han estrujado el cerebro para dar funcionalidad a tanta cosa con tan poco botón, usando por ejemplo múltiples combinaciones.
Esto de las puntuaciones es una barra de medir un tanto volatil, ya que cambia bastante desde el inicio de la publicación del juego y la llegada de las puntuaciones de los usuarios, pero si tenemos que hacer caso a cómo está la cosa en el día de su lanzamiento, podemos decir que Flight Simulator está encandilando.
Actualmente luce un 93 en Metacritic, una nota que es realmente alta para lo que se cuece en esa plataforma de reviews. Para que os hagáis una idea eso es un punto menos que The Last of Us 2, el que puede ser considerado como juego más importante del último lustro.
Obviamente hablamos de géneros muy diferentes, siendo difícil que el juego de Microsoft se convierta en un título de masas, pero nadie le va a borrar su positivo estreno.
