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Lo que vamos a compartir contigo aquí son los mejores trucos de Age of Empires 2 Definitive Edition para que puedas hacerte con el mundo y conseguir que tu civilización sea la que prospere al final de la partida.
Dominar el mundo es, ni más ni menos, el objetivo último y principal de cualquier partida de Age of Empires 2 DE. Si ya has jugado, seguro que lo sabes y, si te estás iniciando ahora, no vas a tardar mucho en comprobarlo.
Claro que el camino para dominar al resto de jugadores y civilizaciones no es precisamente fácil.
Hay muchas formas de ganar una partida. Cada civilización de las 35 que te ofrece el juego tiene características propias y, por supuesto, las estrategias que elijas para desarrollar tu juego pueden llegar a ser decisivas.
Sarracenos, ingleses, bizantinos, celtas, chinos… ¿Cómo es posible elegir una civilización cuando te pones a jugar por primera vez?
En realidad, la pregunta que deberías hacerte no es esta, sino la de qué civilización te ofrece las estadísticas que mejor encajan con el tipo de juego que quieres llevar a cabo.
Probablemente, en muchos otros videojuegos elegir la civilización formaría parte de los consejos para ganar partidas o de los trucos para convertirte en el mejor jugador.
Aquí la cosa no va así para nada, porque Age Of Empires II DE te ofrece una experiencia de juego completamente diferente según la civilización y el entorno de la partida.
Debido a esta peculiaridad, los mejores trucos de Age Of Empires II Definitive Edition serán de dos tipos: generalistas y específicos, completamente diferentes según la civilización y entorno que selecciones en cada partida.
Créenos, elegir bien este detalle es fundamental para todo lo que va a venir a continuación, que no es nada menos que 1000 años de historia en los que tienes que hacer que el mundo caiga a tus pies con el pueblo que defiendas.
Si la cuestión fuese simplemente estética, no le daríamos importancia. Sin embargo, cada civilización tiene una serie de puntos débiles y otros fuertes.
Y sus aldeanos te responden de una manera diferente; los veteranos de Age of Empires se consideran políglotas gracias a esto.
Por ejemplo, hay algunas que son muy fuertes en los primeros compases del juego, pero que pierden fuelle cuando las tecnologías se van haciendo más complejas.
Como no tenemos ni tiempo ni espacio material para poder darte una explicación detallada de las 35 civilizaciones sin dejarnos otras muchas cosas atrás, lo que vamos a hacer es compartir algunas de las más clásicas e interesantes si quieres ganar la partida en sus primeros compases.
Puede parecer de perogrullo, pero te lo vamos a decir de todas formas: no elijas tu civilización al tuntún. Estudia las 35 disponibles y piensa en cuál se parece más a tu mente de estratega. Porque no es lo mismo hacerte con el mundo pensando como Napoleón, que hacerlo como el más feroz de los guerreros jacobitas.
Claro que las que te vamos a mostrar no son las mejores en términos absolutos, pero sí son excelentes para comenzar la partida con un extra de fuerza que te encamine de forma decisiva hacia la victoria.
Piensa en una cualidad de cada civilización y plantéate exprimirla como si te fuera la vida en ello -a ti no, pero a tus monigotes sí que les van a poner las cosas difíciles si no te pones las pilas- para que tus primeros minutos de juego estén casi completamente orientados a que esa virtud sirva de escudo para todo lo que está por llegar.
Vamos a destacar algunas de esas cualidades de las civilizaciones más elegidas, para que te hagas una idea...
Sin ir más lejos, los ingleses son muy populares en las partidas online de AoE 2 DE. En parte, esto se debe a que cuentan con los arqueros de tiro largo, una unidad que puede marcar la diferencia en los primeros compases del juego al darte la oportunidad de disparar de forma segura desde grandes distancias.
Los celtas son también interesantes, pero solo si tienes la estrategia de ganar la partida lo antes posible.
El motivo es que se mueven rápido y atacan aún más velozmente, pero sus tecnologías se van quedando atrás con respecto a otras civilizaciones a medida que avanza el juego.
China es otro de los imperios que te van a dar un extra de poder en los primeros compases del juego.
El poderío de los chinos se basa en el número, ya que crecen de una forma vertiginosa consiguiendo que sea complicado que te falten aldeanos y otras unidades que son necesarias para sacar lo mejor de cada partida.
También especulamos que son especialmente buenos construyendo murallas, aunque esto ya lo tendréis que comprobar vosotros.
Otra de las que debes apuntar en tu lista es la de los hunos. La razón aquí se encuentra en que son los únicos que no necesitan casas para alojar a los aldeanos.
De esta forma, vas a poder crear una gran cantidad de ellos al comienzo del juego para que recojan materiales y construyan otros edificios, mientras que el resto de jugadores deberá estar creando casas y más casas para ponerse a la altura de tu civilización.
La cosa cambia si no eres de hacer guerra relámpago e intentar llevarte la victoria lo más rápido que puedas.
Como antes apuntamos, hay civilizaciones que comienzan un poco débiles, pero que van creciendo en fuerza y poder conforme van pasando los años.
Normalmente, estas son las que más eligen los jugadores expertos tratando de descubrir cómo avanzar rápido en AOE 2 DE para conseguir que estos imperios lleguen a su mejor estado cuanto antes.
Un ejemplo de este tipo de civilización lo tienes en los españoles. Estos comienzan el juego siendo un poco vulnerables, pero todo cambia cuando la pólvora hace su aparición.
En este momento, tendrás en las manos una serie de unidades que, bien utilizadas, pueden darte la victoria. Además, los aldeanos españoles se producen a una gran velocidad, otra virtud que no hay que perder de vista.
Los aztecas son un pueblo equilibrado, sí, pero también cuentan con algunas de las unidades más mortíferas de todas las que te vas a encontrar en AOE 2.
Esto significa que puedes aprovechar los primeros compases de la partida para recoger recursos y crear un ejército temible. Cuando el juego esté avanzado, puedes mostrarle al mundo tu poderío militar sembrando el pánico allá por donde pases.
Aquí podríamos meter de nuevo a los ingleses. Sí, ya sabemos que te los habíamos recomendado más arriba, pero lo cierto es que forman uno de los imperios más equilibrados de todo el juego.
Por lo que si escoges a esta civilización, no deberías tener demasiados problemas para hacerte con más de una victoria, gracias a sus características que se adaptan a todos los momentos de una partida.
Este es el último aspecto al que nos vamos a referir para elegir una civilización u otra.
No es lo mismo jugar en un mapa terrestre más plano y ancho que Castilla, en uno que tenga mar o en un archipiélago de islas. La cosa cambia entre una situación y otra como cambian la noche y el día, por lo que debes elegir en consonancia.
Para mapas de archipiélagos en los que la navegación va a ser fundamental, cualquier jugador experto sabe que los japoneses son los mejores.
Lo son porque sus galeras ven un 50% más que las de los enemigos, porque sus pesqueros son los que más recolectan y porque tienen barcos de guerra realmente temibles.
Si algún otro jugador te quita a los japoneses en una partida online en islas, entonces te queda la esperanza de coger a los vikingos.
Con ellos, tus puertos serán un 33 % más baratos, los barcos de guerra necesitarán un 20 % menos de recursos para construirse y la fuerza bélica marítima será capaz de destruir a cualquiera que tenga la mala suerte de cruzarse contigo en mitad del mar.
Pero como en AOE 2 DE no todo es agua, también hay civilizaciones muy prácticas para jugar en tierra.
Los mongoles, por la rapidez de su caballería, son una gran elección en este sentido, aunque terminan quedándose un poco atrás con el desarrollo de las partidas.
Los godos son también interesantes para el combate terrestre, ya que disponen de unidades de infantería que pueden ser de las más efectivas de todo AOE 2 DE.
Es más, uno de los trucos que primero puedes poner en práctica es el de elegir los godos y ponerte a crear soldados a pie como un loco.
Así podrías llegar a la edad avanzada con un ejército que sea casi imposible de derrotar por número.
Los últimos que destacan en tierra son los francos, especialmente en mapas muy grandes por tener un gran rango de visión y moverse muy rápido.
Además, su caballería es veloz y tiene mucha salud, algo fundamental para las grandes batallas en las que te puedes ver envuelto de un momento a otros.
Una vez que conoces más o menos las civilizaciones y sus puntos fuertes, toca desarrollar una estrategia de juego que te dé más posibilidades de vencer.
Estas son comunes en muchos casos a todos los imperios, aunque debes conjugar siempre los aspectos más potentes de estos con el modo de juego que tengas, y aquí no vale hacer el truco del coche (sabes de lo que te hablamos).
Es fundamental y no lo vas a conseguir más que con la práctica. Cada mapa de AOE 2 DE tiene una serie de peculiaridades y puntos que hay que conocer para hacerte con ellos cuanto antes.
Por ejemplo, en el mapa de las Highlands hay poquísimos puntos por los que cruzar el río.
Si los controlas desde el principio, más de media partida será tuya, ya que podrás estar seguro en tu territorio para poder ir desarrollando tu civilización sin el miedo que provoca el poder ser fruto de un ataque repentino.
Lo mismo sucede en el escenario de la Selva Negra. Aquí debes explorar nada más comenzar la partida para descubrir desde dónde pueden venir los ataques.
Los pasos en este escenario son estrechos, por lo que te bastará con construir una muralla y alguna torre defensiva para que el enemigo no pueda entrar en tu terreno así como así, ya que los propio árboles harán las veces de una barrera natural.
Por otro lado, cada mapa cuenta con recursos distintos.
El Yucatán es rico en comida (¡y qué comida!), así que puedes retrasar la construcción de granjas y centrarte en recolectar bayas para no perder tiempo ni recursos en algo que la misma naturaleza te está dando.
En los mapas de islas, la fuerza marítima es fundamental, pero no solo la de guerra.
Contar con una flota pesquera importante es algo que puede llenar tus despensas de comida para que puedas desarrollarte con una mayor facilidad y tranquilidad.
Da igual el mapa o la civilización con la que hayas decidido jugar, debes tener claro si vas a querer una partida en la que ir al ataque o una en la que defenderte.
Esta es una estrategia que te conviene tener clara desde el principio y que, además, no deberías cambiar por nada del mundo una vez que hayas comenzado a desarrollarla, ya que quedarte a medio camino de algo en AOE 2 DE es sinónimo de derrota segura.
Para defenderte, lo mejor es que des gran importancia a tu centro urbano. Es mucho más fácil crear ciudades inexpugnables que tener un imperio a campo abierto expuesto a todo tipo de ataques, y porque aquí es donde se organizan las fiestas del pueblo (es broma).
Para la defensa, como es evidente, las murallas y las torres con artillería son elementos infalibles. Pero combinarlas es trabajo tuyo.
Por ejemplo, crear una doble muralla con un buen número de torres es algo que te va a llevar tiempo y va a consumir muchos de los recursos de tu imperio, pero, a cambio, te dará una seguridad para dedicarte a aspectos económicos del juego que también te pueden dar la victoria.
Recuerda que una de las formas de conseguir el triunfo en AOE 2 DE es consiguiendo construir una de las maravillas que hay en el juego.
Si apuestas por esto, mejor que comiences su construcción en un espacio muy bien defendido porque será un proceso largo y algún enemigo podría echarlo a perder cuando le quede poco para terminar.
Si, por lo contrario, vas a salir al ataque, las murallas de tus ciudades serán menos importantes y deberás centrar el consumo de tus recursos en crear unidades militares equilibradas.
Sigue un poco la historia y diseña ejércitos que combinen arqueros, caballería e infantería, todo ello seguido de algunas piezas de artillería por si te topas con algún muro o torre.
Con fuerzas de este tipo diseminadas a lo largo y ancho del mapa, tu nombre resonará hasta en la cabaña del último de los aldeanos de los otros imperios, y es que tus ejércitos irán sembrando el caos allá por donde pasen.
Eso sí, vigila siempre tu retaguardia. No hay nada peor en AOE 2 DE que estar en mitad de un ataque y ver cómo te quedas sin tu principal asentamiento por no haberlo defendido adecuadamente.
En definitiva, los mejores trucos de Age of Empires 2 DE se basan en tener muy clara tu estrategia, en elegir a una civilización que encaje con lo que quieres de la partida y en sacar el juego a los mapas del juego.
Con ello, convertirte en el rey del mundo no debería costarte demasiado.
